El exfutbolista John Viáfara, capturado en abril pasado por presuntamente hacer parte de una red que enviaba cocaína a los Estados Unidos y que al parecer estaba vinculada al poderoso Clan del Golfo, la banda criminal más grande de Colombia, ahora está solicitando que se le conceda la extradición exprés al país del norte donde deberá responder por estos delitos.
La petición fue hecha ante la Corte Suprema de Justicia el 31 de julio y de acuerdo a los requerimientos de la Ley este alto tribunal tiene 20 días, es decir, hasta el 20 de agosto, para definir si la solicitud cumple con los presupuestos para conceder la extradición simplificada, o "extradición exprés".
Cuando es solicitada, la "extradición exprés" significa una renuncia a cooperar o aportar pruebas a la justicia Colombiana, en este caso a la Corte Suprema de Justicia que lleva el caso, y por el contrario acelerar la comparecencia ante los juzgados estadounidenses. Esto suele suponer un preacuerdo de colaboración con EEUU o que el acusado ha aceptado los cargos por los cuales es solicitado en extradición.
De ser así, esto marcaría un viraje importante en el caso Viáfara ya que hasta conocerse esta solicitud sus familiares, en especial su padre, han buscado demostrar su inocencia a través de la defensa del exfutbolista.
A sus 40 años, Viáfara se encuentra retirado del fútbol, pero cuando vestía de cortos cosechó importantes triunfos como haber ganado la Copa Libertadores de América con el Once Caldas en 2004, disputando la final contra el Boca Juniors de Argentina en la que marcó un gol decisivo. Esto le valió el reconocimiento de la Conmebol como el mejor jugador de América ese año.
Tuvo un paso destacado por otros clubes del Fútbol Profesional Colombiano como el Junior de Barranquilla, Equidad, Pereira, Deportivo Cali, Pasto y América; y otro más modesto por clubes internacionales como Portsmouth FC y Southampton -en la Premier League de Inglaterra- y por la Real Sociedad en España.
También jugó en la selección Colombia jugando partidos de eliminatorias integrando la convocatoria de la Copa América 2007.
El caso en el que se acusa a Viáfara también están involucradas otras cuatro personas que "se habrían asociado para mover cargamentos de cocaína a través de lanchas rápidas, semisumergibles y otro tipo de embarcaciones que salían del Pacífico colombiano con destino a Centroamérica", como explicó en su momento la Fiscalía colombiana basada en el requerimiento de extradición de la Corte del Distrito Este de Texas en los Estados Unidos.
El exfutbolista espera en la cárcel de máxima seguridad La Picota, en Bogotá, que respondan su solicitud y den pronto traslado a Estados Unidos para comparecer ante sus tribunales.