La rectora de un colegio de monjas en Cartagena retuvo a estudiantes en una iglesia por haberla criticado

Un "secuestro" en una iglesia desató manifestaciones en el tradicional Colegio Biffi de Cartagena, en el que los estudiantes y padres de familia exigen la renuncia de la rectora por lo que ellos consideran "posturas dictatoriales". Anteriormente, hubo despido masivo de profesores y cambios en actividades extracurriculares.

El pasado martes, un grupo de estudiantes denunciaron haber sido encerradas contra su voluntad, por varias horas, en una iglesia cercana al colegio. El hecho se presentó luego de que las jóvenes pararan un retiro espiritual en el que se encontraban al enterarse que habían despedido a varios de sus profesores, y por considerar que el encuentro religioso era un "lavado de cerebro"; según contó una de ellas a El Universal.

Esa fue la 'gota que rebosó el vaso' para la comunidad educativa que se sentía descontenta con algunas decisiones de la rectora de la institución, que cumple 120 años de fundada. Ese día, los estudiantes decidieron no retirarse del colegio al término de las clases para protestar contra la madre Alicia Ruiz que lleva dos años en el cargo.

Más tarde se les unieron algunos padres de familia, que organizaron una protesta pacífica con antorchas en las calles de alrededor del colegio, para exigir la renuncia de la superiora. Ya había quejas por otros despidos masivos de docentes y cambios en actividades extracurriculares que habían sido retiradas.

"Las niñas están siendo expuestas a una dictadura por parte de la madre rectora, expulsó a profesores que venían estando al frente de las protestas desde hace varios meses. Las niñas lo único que piden es que las escuchen", dijo a El Tiempo, Lucia Rivero, madre de familia.

Por su parte, la cuestionada rectora explicó a los medios que el colegio adelanta un proceso de restructuración académica con el Ministerio de Educación, y que los cambios serán temporales. Asimismo, especificó que hasta el momento fueron retirados de sus cargos 4 docentes y 2 coordinadores de grupo, y 3 profesores más renunciaron.

La manifestación, en la que también participó un grupo de profesores y empleados inconformes, causó caos vehicular en la ciudad, por lo que las autoridades policiales tuvieron que intervenir.

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