Qué tipos de eclipses existen y qué distingue al “anillo de fuego”

Mañana 2 de octubre ocurrirá uno de los fenómenos astronómicos más esperados del año: desde la Patagonia de Argentina y Chile, se podrá observar un eclipse solar anular, conocido como “anillo de fuego” que se prolongará por dos horas.

Este fenómeno astronómico se produce cuando la Luna pasa entre el Sol y la Tierra mientras se encuentra en su punto más alejado de nuestro planeta. Debido a que la Luna está más lejos de la Tierra de lo habitual, parece más pequeña que el Sol y no lo cubre por completo. Esto crea lo que parece un anillo brillante en el cielo.

Antes y después de que el Sol tome la apariencia de un anillo de fuego, los espectadores podrán observar cómo partes de la luz solar son bloqueadas, formando una característica figura de media luna.

Dado que el Sol no será cubierto por completo en ningún momento, es imprescindible utilizar protección ocular adecuada durante todo el fenómeno para evitar daños en la vista.

Un eclipse se produce cuando un cuerpo celeste bloquea la luz de otro, ya sea parcial o totalmente. Desde la Tierra, se pueden apreciar dos tipos principales de eclipses: los eclipses solares y los eclipses lunares. Estos se clasifican según la alineación y la naturaleza del evento.

En el caso de los eclipses solares, existen cuatro tipos: totales, parciales, anulares e híbridos.

Un eclipse solar total ocurre cuando la Luna cubre completamente al Sol, sumergiendo temporalmente una sección de la Tierra en la oscuridad. Este fenómeno es posible debido a que, aunque el Sol es unas 400 veces más grande que la Luna, se encuentra 400 veces más lejos de nuestro planeta, lo que permite que ambos cuerpos celestes parezcan del mismo tamaño desde nuestra perspectiva.

Los eclipses solares parciales, ocurren cuando solo una porción del Sol queda oculta; anulares, cuando la Luna está en una parte más alejada de su órbita y no cubre por completo el disco solar, en esos casos, como el espectáculo astronómico de mañana, se forma un “anillo de fuego” alrededor de la Luna. Por último, los eclipses solares híbridos combinan aspectos de los eclipses totales y anulares en distintas partes del planeta.

Por otro lado, los eclipses lunares se dividen en tres categorías: totales, parciales y penumbrales. En un eclipse lunar total, la Tierra se interpone entre el Sol y la Luna, proyectando su sombra sobre la superficie lunar y oscureciéndola completamente. En los eclipses parciales y penumbrales, solo una parte de la Luna entra en la sombra de la Tierra.

El próximo eclipse solar anular, que será visible mañana en el sur de Argentina y Chile, se caracteriza porque la Luna no cubrirá completamente al Sol, sin que dejará visible un anillo de luz alrededor del satélite.

Este tipo de eclipse, conocido como “anillo de fuego”, es un espectáculo visual impresionante y requiere el uso de filtros adecuados para su observación segura, ya que mirar directamente al Sol puede causar daños oculares permanentes.

La observación de estos fenómenos astronómicos no solo es fascinante para los aficionados, sino que también es objeto de estudio para los astrónomos. Los eclipses permiten investigar diversos aspectos del sistema solar y la interacción entre sus cuerpos celestes.

El eclipse “anillo de fuego” será visible en una franja austral de Argentina y Chile. La provincia de Santa Cruz se destaca como el mejor lugar en la Patagonia para presenciar el fenómeno. En esta zona, dependiendo de la ubicación exacta, ya sea cerca de la costa o en la zona cordillerana, el eclipse podrá observarse entre las 16:00 y las 18:20, con su punto máximo alrededor de las 17:25.

La fase anular tendrá una duración aproximada de 6 minutos y 20 segundos en la parte central de la trayectoria del eclipse.

En el noroeste de Santa Cruz, el Parque Nacional Patagonia, junto con el Parque Provincial Cueva de las Manos y la Reserva Cañadón Pinturas, albergan un paisaje único de estepa patagónica con mesetas basálticas, lagunas, humedales y cañadones profundos.

Este entorno majestuoso ofrecerá dos lugares privilegiados para observar el eclipse: el sector de La Ascensión, dentro del Parque Nacional Patagonia y situado a los pies de la meseta del lago Buenos Aires, y varios puntos en el área de Cañadón Pinturas, que incluye un tramo del río Pinturas y uno de los accesos a la Cueva de las Manos.

El eclipse solar anular será visible de manera parcial en varias regiones de América Latina, aunque con diferentes grados de cobertura. En países como Perú y Bolivia, la magnitud del eclipse será menor al 10%, mientras que en Paraguay variará entre el 10% y el 20%, siendo mayor en el sur del país.

En Brasil, la cobertura oscilará entre el 30% y el 10%, con ciudades como Río de Janeiro al 9% y San Pablo al 10%. En Uruguay, la Luna ocultará entre el 40% y el 30% del Sol, dependiendo de la ubicación.

En México, solo Cabo San Lucas y Puerto Vallarta podrán apreciar una mínima cobertura del 1%. Por su parte, la Ciudad de México no verá ningún grado de ocultación, por lo que se sugiere a los interesados seguir las transmisiones en vivo de organismos astronómicos para no perderse el evento.