La medicina de precisión mejora la supervivencia contra el cáncer: el cambio de paradigma terapéutico que avanza en el mundo

El último informe anual de la Asociación de EEUU para la Investigación del Cáncer señaló que aumentaron las tasas de sobrevida aunque crecieron los casos en menores de 50 años. En exclusiva, las últimas novedades debatidas por los expertos en una cumbre regional sobre los tratamientos personalizados y medicina de precisión

El incremento significativo en los diagnósticos de cáncer entre menores de 50 años es atribuido a múltiples factores. En la imagen ilustrativa, nanobots atacando células cancerígenas representando un avance significativo en la ciencia y la tecnología médica (Imagen ilustrativa Infobae)

El diagnóstico temprano de cáncer marca un antes y después en la vida de los pacientes. Y la buena noticia es que hoy la ciencia tiene mucho para ofrecer con los tratamientos personalizados que además mejoran la calidad de vida.

El cáncer es una de las enfermedades que más preocupa a médicos y científicos de todo el globo, quienes no sólo trabajan sin descanso para entender los mecanismos del mal; sino también que de la mano de las terapias target y la medicina de precisión lograron la cronicidad de la enfermedad y cada vez más se acercan a la cura.

“La investigación es la base del progreso en la lucha contra el conjunto de enfermedades que llamamos cáncer”, así comienza el análisis del informe anual de la Asociación Estadounidense para la Investigación del Cáncer publicado hoy que reveló que las tasas de mortalidad por cáncer en EE.UU. bajaron 33% en las últimas tres décadas (entre 1991 y 2021).

Sin embargo, el informe también destaca un crecimiento de los diagnósticos de cáncer en edades más tempranas, especialmente en menores, lo que implica reforzar la prevención en los factores de riesgo vinculados al estilo de vida, como tabaquismo, consumo excesivo de alcohol, exposición a contaminación ambiental, obesidad y sedentarismo entre otros.

La doctora Jane Figueiredo, investigadora del Cedars Sinai de Los Ángeles, y coautora del estudio, explicó que los nuevos tratamientos y avances en métodos de detección mejoraron las tasas de supervivencia, incluso para tipos de cáncer muy letales como el de pulmón o el melanoma. Según el informe, desde el 1 de julio de 2023 hasta el 30 de junio de 2024, la Administración de Alimentos y Medicamentos de EE.UU. (FDA, por sus siglas en inglés) aprobó 15 tratamientos nuevos para enfermedades oncológicas, lo que refleja el ritmo acelerado de innovación científica frente al cáncer.

Como detalló Infobae, cuando participó del congreso de la Sociedad Americana de Oncología Clínica (ASCO 2023) en Chicago, los principales expertos a nivel mundial coinciden en que la investigación sobre los distintos tipos de cáncer y la oncología atraviesan una etapa excepcional: un periodo disruptivo e innovador que impulsa nuevos tratamientos con el objetivo de mejorar y extender la calidad de vida de los pacientes.

Todo esto ocurre gracias a la llamada “medicina de precisión” se centra en la comprensión de la individualidad para tratar las enfermedades. Gracias a los acelerados avances científicos en genética, biología (biomarcadores) y tecnología (Inteligencia Artificial y ciencia de datos), hoy los expertos tienen la posibilidad de obtener información específica de cada paciente: su perfil genético, estilo de vida e historial médico, lo que les permite desarrollar un tratamiento personalizado y más efectivo que optimice los resultados terapéuticos.

En 2023, uno de cada tres tratamientos aprobados por la FDA en fue terapéuticas de medicina de precisión, mientras que para el futuro cercano se espera que esta cifra se incremente a 2 de cada 3 aprobaciones. Esta tendencia refleja cómo los últimos avances en genética, biología y tecnología están revolucionando el tratamiento del cáncer y otras enfermedades.

La combinación de tecnologías avanzadas y genéticas permite desarrollar tratamientos a medida, mejorando tanto la eficacia como la calidad de vida de los pacientes (Imagen Ilustrativa Infobae)

El cáncer es responsable de 18% de las muertes a nivel mundial según la Agencia Internacional para la Investigación sobre el Cáncer (IARC), y sigue siendo uno de los principales desafíos en medicina. En 2020, 1,8 millones de personas fallecieron a causa de esta enfermedad. En América Latina, ocurren 90.000 muertes asociadas a patologías oncológicas anualmente y se diagnostican aproximadamente 100.000 casos de cáncer de pulmón al año.

Argentina es uno de los países de la región más afectados: en 2022 hubo cerca de 8.500 muertes por cánceres vinculados a la tráquea, bronquios y pulmón; 7.300 por cáncer de colon y recto; 5.900 por cáncer de mama y 4.400 por cáncer de páncreas, según datos del Observatorio Global del Cáncer (Globocan) de la IARC. Estos datos fueron presentados durante la cumbre de expertos de la región “Tomando la delantera frente al cáncer”, organizada por el laboratorio Johnson & Johnson.

Sin embargo, el panorama es alentador: la cronicidad progresiva de ciertos tipos de cáncer, como el de próstata, mama, colon y algunos hematológicos, se está extendiendo gracias a la secuenciación de tratamientos que combinan terapias tradicionales con nuevas opciones innovadoras, como la inmunoterapia y las terapias génicas y celulares.

Estos avances, junto con la detección temprana, hoy están transformando el pronóstico de una de las enfermedades más prevalentes y mortales del siglo XXI.

Un cambio de paradigma para tratar el cáncer

La tasa general de mortalidad por cáncer ajustada por edad ha disminuido un 33 por ciento en EEUU en las últimas tres décadas (Getty)

La medicina de precisión gana cada vez más terreno como un cambio de paradigma en el tratamiento del cáncer, gracias a años de investigación con foco en fármacos cada vez precisos y dirigidos. Esta estrategia utiliza la composición genética, el estilo de vida y el historial médico de cada paciente para diseñar terapias personalizadas que optimizan los resultados del tratamiento.

“Antes, cuando teníamos un diagnóstico de cáncer de pulmón, por ejemplo, lo analizábamos mediante el microscopio y buscábamos las características y apuntábamos a las mejores terapias, que normalmente era la quimioterapia convencional. Hoy, con investigación, la visión es distinta: podemos tomar un fragmento del tumor, hacer un análisis de su material genético e identificar las modificaciones que le sean únicas”, explicó el doctor Rodrigo Santa Cruz Guindalini, oncólogo y genetista, quien es asesor de Riesgo de Cáncer en la Clínica OncoStar Rede D’or, en Brasil.

El experto detalló que, además, se puede hacer la secuencia genética del ADN del paciente y, de este modo, conocer cuál es la característica genética que hace que tenga una mejor respuesta a una u otra medicación: “Toda esta información se puede usar para las terapias oncológicas, identificando terapias dirigidas a un marcador genético específico del tumor de ese paciente. Esta estrategia personalizada es más eficaz, menos tóxica e incrementa la sobrevida”.

La reducción de las tasas de mortalidad por cáncer de mama entre las mujeres y por cáncer colorrectal entre las personas mayores de 50 años desde la década de 1990 contribuyó al progreso en la reducción de la mortalidad general por cáncer dice el informe anual de la Asociacion Americana de Investigación contra el cáncer (Getty)

En esa línea, Infobae viene siguiendo los avances científicos que en los últimos años han transformado el tratamiento de distintos tipos de cáncer, como el de mama, lo que permite a los médicos obtener imágenes detalladas de los tumores y adaptar terapias personalizadas para cada paciente. Este enfoque “a medida”, combinado con un equipo multidisciplinario, mejora significativamente los resultados al ajustar los tratamientos a las particularidades de cada tumor.

La doctora Sabrina Barchuk, miembro de la Sociedad Argentina de Mastología, declaró en Infobae que la medicina personalizada permite clasificar los tumores según sus características moleculares, lo que aumenta la eficacia del tratamiento y reduce los efectos adversos al evitar terapias innecesarias.

El principal avance de la medicina personalizada radica en abordar el tratamiento del paciente considerando sus características biológicas únicas. Según explicó la doctora Barchuk, de la sección Mastología del Hospital Fernández, “existen cánceres de mama que expresan biomarcadores para los que contamos con fármacos dirigidos altamente efectivos. También contamos con plataformas genómicas para identificar tumores que podrían beneficiarse o no de tratamientos quimioterápicos. Ciertas alteraciones genéticas en las células del paciente, pueden no solo identificar una predisposición al cáncer sino también servir de blanco molecular para tratamientos específicos”.

Las biopsias líquidas son otro avance de las investigaciones en oncología, que permiten rastrear biomarcadores del cáncer (Imagen Ilustrativa Infobae)

Además, la medicina de precisión también permite el seguimiento del paciente de una manera menos invasiva, como las biopsias líquidas, que permiten monitorear el cáncer sin procedimientos invasivos, utilizando muestras de sangre, orina u otros líquidos corporales para buscar biomarcadores que indican procesos biológicos normales o patológicos. “Con esta técnica, es posible identificar los cambios genéticos que impulsan el cáncer y, mediante medicaciones dirigidas, detener su progreso sin dañar a las células sanas”, subrayó Guindalini.

Durante la cumbre de expertos “Tomando la delantera frente al cáncer”, los especialistas coincidieron en que la medicina de precisión en América Latina aún tiene una cuenta pendiente con la equidad en el acceso para los pacientes.

Hablar de equidad sanitaria implica acceso a los tratamientos innovadores, que los pacientes lleguen a los centros de salud, que tengan mejores diagnósticos y atención para el cáncer. Porque en medicina de precisión nuestros genes desempeñan un rol importante, pero nuestras circunstancias sociales también impactan en la atención médica”, sostuvo Ana Rita González, experta en salud pública, cofundadora y principal oficial ejecutiva de la consultora Policy Wisdom de Puerto Rico, quien también participó del foro regional.

La terapia agnóstica aprobada en la Argentina

La aprobación de terapias agnósticas y celulares en Argentina y el mundo brinda nuevas vías de tratamiento para diversos tipos de tumores, con alteraciones genéticas específicas Imagen Ilustrativa Infobae)

Otro avance en medicina de precisión es la terapia agnóstica, que selecciona tratamientos basados en información genética crucial para el crecimiento tumoral, independientemente de la ubicación del tumor.

En Argentina, la Administración Nacional de Medicamentos, Alimentos y Tecnología Médica (ANMAT) aprobó hace un año una terapia agnóstica para tratar 17 tipos de tumores sólidos, incluyendo el cáncer de mama, colon y recto, pulmón, páncreas, entre otros.

“Son tumores que tienen la mutación de NTRK, se trata de una modificación genética rara; en realidad, todos los cánceres tienen esa alteración, en unos se destaca más que en otros. Entonces, en el momento en que se identifica la mutación, empezamos a usar una medicación que es un inhibidor de NTRK, independientemente de donde haya aparecido el tumor primario”, explicó Guindalini.

Otro avance en la medicina de precisión son las terapias celulares están revolucionando el tratamiento de tumores hematológicos. En estas terapias, se modifican las células inmunológicas del paciente para atacar con precisión las alteraciones genéticas del tumor. “Esto está logrando curas en pacientes con linfomas y otros tipos de cáncer que no responden a tratamientos tradicionales”, afirmó Guindalini.

El aumento de cáncer en adultos jóvenes

El cáncer de mama es el tumor más frecuente en la Argentina y el tercero más mortal, cada año se detectan más de 22.000 casos nuevos y provoca 6.000 muertes (Imagen Ilustrativa Infobae)

De acuerdo con datos del Centro Internacional de Investigaciones sobre el Cáncer (CIIC), se espera que para 2040 haya hasta 30 millones de nuevos casos de cáncer y 16 millones de muertes. Como contó Infobae, el panorama global muestra una tendencia de crecimiento de los casos de cáncer entre los adultos jóvenes.

El informe anual Asociación Estadounidense para la Investigación del Cáncer publicado hoy marca que factores como el aumento de la obesidad, el consumo de alcohol y las condiciones ambientales son claves para entender por qué aumentan las tasas de cáncer entre la población joven, especialmente aquellos menores de 50 años. El informe señala que el 40% de todos los cánceres en Estados Unidos están asociados a factores de riesgo modificables, incluyendo el consumo excesivo de alcohol.

El doctor Oscar Cingolani, cardiólogo argentino e investigador en la Universidad Johns Hopkins, comentó en diálogo con Infobae que “todos los cánceres están en aumento en adultos jóvenes desde las últimas tres décadas”. Este incremento se ha observado en tumores que antes se asociaban principalmente con la edad avanzada, como los de colon, mama y próstata, entre otros. Las estadísticas recientes indican un aumento del 28% en las muertes por cáncer de aparición temprana entre 1990 y 2019.

Oscar Cingolani con Infobae desde la ciudad de Maryland, Baltimore, Estados Unidos. Con su acostumbrada precisión de médico cardiólogo e investigador de la Universidad Johns Hopkins

Uno de los factores más subestimados que podría estar contribuyendo a este aumento es la polución ambiental. Según Cingolani, “la contaminación del ambiente y la presencia de microplásticos y nanoplásticos en el aire son causas que podrían estar vinculadas con la aparición precoz de cánceres”. Además, el especialista resaltó el papel de la dieta moderna y la alteración de la microbiota como factores críticos que la ciencia está estudiando para comprender mejor este fenómeno.

El aumento en los casos de cáncer en adultos jóvenes también está relacionado con cambios en el estilo de vida. Un estudio publicado en la revista BMJ Oncology mostró que los diagnósticos en menores de 50 años pasaron de 1,82 millones en 1990 a 3,26 millones en 2019, un incremento del 79%. Los tipos de cáncer más comunes entre este grupo incluyen los de mama, colon, tiroides y pulmón, con un aumento particularmente significativo en el cáncer colorrectal en hombres jóvenes.

El doctor Cingolani señaló que el estudio del microbioma intestinal es clave para entender el impacto de la dieta en la salud oncológica. “Se está poniendo muchísima atención en las alteraciones de la microbiota intestinal”, afirmó, vinculando estas alteraciones al consumo de alimentos ultraprocesados y a la exposición continua a antibióticos. Estos factores, según Cingolani, pueden generar cambios en el ARN no codificante que podrían desencadenar la formación de tumores”.