La Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA) ha dado luz verde a la vacuna contra el virus respiratorio sincitial (VRS) desarrollada por GSK, ampliando su administración a adultos en riesgo de entre 50 y 59 años. Este paso convierte a esta vacuna en la primera autorizada para proteger a este grupo etario más joven contra el VRS. La vacuna había sido previamente aprobada solo para adultos de 60 años o más.
Esta decisión se basa en datos presentados por GSK que muestran que la respuesta inmune en adultos vacunados de entre 50 y 59 años es similar a la de los de 60 años o más. GSK había solicitado formalmente a la FDA en febrero que se ampliara la aprobación tras estos hallazgos. La compañía también tiene programados ensayos adicionales para evaluar la seguridad y eficacia en adultos de entre 18 y 49 años, cuyos resultados se esperan para la segunda mitad de este año.
El Comité Asesor sobre Prácticas de Inmunización de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) será el siguiente en recomendar si esta vacuna debe ser administrada rutinariamente a adultos de entre 50 y 59 años. Su respaldo en las próximas reuniones, previstas para junio u octubre, ayudaría a reforzar la cobertura del seguro para esta vacuna.
Según el Dr. Phil Dormitzer, vicepresidente senior y director global de investigación y desarrollo de vacunas en GSK, quien declaró para CBS News, muchos efectos secundarios observados en este grupo de edad eran similares a los reportados en adultos de 60 años o más. Dormitzer destaca que “muchas enfermedades surgen porque el virus desencadena afecciones médicas subyacentes, como EPOC o insuficiencia cardíaca”, lo que justifica la importancia de vacunar a edades más tempranas en presencia de comorbilidades.
Las otras dos empresas líderes en vacunas, Pfizer y Moderna, también están realizando investigaciones para ampliar la cobertura de sus vacunas de VRS más allá de los adultos de 60 años. Según comunicaciones de Pfizer a los inversores el mes pasado, se están preparando para presentar datos “positivos” de estudios realizados en adultos jóvenes de 18 años en adelante.
El panel de los CDC también ha considerado los casos raros, pero graves de síndrome de Guillain-Barré (GBS) que se han observado tras la administración de inyecciones contra el VRS. Los datos indican aproximadamente 1.5 casos de GBS por cada millón de dosis de la vacuna de GSK administradas, aclararon los CDC la semana pasada. Dormitzer ha asegurado que los ensayos de GSK no revelaron tendencias alarmantes de casos de GBS en adultos de entre 50 y 59 años. Subrayó que “el riesgo de GBS tiende a aumentar con la edad, pero no hay nada que indique un riesgo particular en este caso”.
La evaluación futura del panel de los CDC también se centrará en la necesidad potencial de dosis de refuerzo. GSK tiene la intención de presentar al comité más resultados, que abordan la efectividad de los refuerzos hasta tres años después de la vacunación inicial. Esta evaluación es fundamental, ya que “la gente originalmente anticipó que podría requerirse una inmunización anual, pero hemos descubierto que la protección dura más de una temporada”, explicó Dormitzer.
La aprobación de la FDA y el eventual respaldo de los CDC para vacunar a los adultos en riesgo de entre 50 y 59 años fortalecerá la inmunización contra el VRS y ampliará las estrategias de prevención de este virus, especialmente en aquellos con condiciones médicas preexistentes que los coloca en mayor riesgo.