Se las conoce por la sigla “PFAS”. Son las sustancias químicas perfluoroalquiladas y polifluoroalquiladas, que han sido elaboradas por seres humanos y se han usado en la industria y los productos de consumo en todo el mundo desde la década de 1940.
Pese a su alto uso, las PFAS pueden tener efectos negativos sobre la salud humana. Ahora, por primera vez, investigadores científicos de Italia demostraron que la exposición a estas sustancias aumenta la probabilidad de muerte por enfermedad cardiovascular. Publicaron el hallazgo en la revista Environmental Health.
Si bien resulta difícil probar una asociación con la muerte por exposición a sustancias químicas, los investigadores pudieron establecerla al revisar los registros de fallecimientos de la región del Véneto, en el norte de Italia. Allí muchos residentes bebieron durante décadas agua altamente contaminada con PFAS, también llamados “productos químicos para siempre”.
Los registros mostraron también un incremento en la probabilidad de muerte por varios tipos de cáncer, pero no llegaron a establecer una asociación formal debido a otros factores.
“Es la primera vez que se encuentran pruebas sólidas de una relación entre la exposición a PFAS y la mortalidad cardiovascular”, dijo Annibale Biggeri, autor principal del estudio e investigador de la Universidad de Padua, en Italia.
Cuáles son los “productos químicos para siempre”
Los “productos químicos para siempre”(PFAS) son un grupo de más de 9.000 compuestos introducidos por los fabricantes en la década de 1940. Se fabrican y diseñan para ser resistentes, con un enlace químico duradero carbono-flúor.
Estas sustancias ayudan a los productos a resistir el calor, el aceite, las manchas, la grasa y el agua; y pueden estar en:
- Ropa
- Cosméticos
- Espuma contra incendios
- Envoltorios de alimentos
- Utensilios de cocina antiadherentes
- Alfombras
- Tapicerías
Cómo llegan los PFAS a los seres humanos
Puede haber escape de sustancias químicas PFAS de las instalaciones de fabricación y los productos de consumo al ambiente. A medida que más y más sustancias químicas de este tipo circulan y permanecen en el medio ambiente, aumenta la exposición.
“Durante la producción y el uso, las PFAS pueden desplazarse al suelo, el agua y el aire. La mayoría de las PFAS (incluidos el PFOA y el PFOS) no se degradan y permanecen en el ambiente. Debido a su uso generalizado y su persistencia en el ambiente, las PFAS se encuentran en la sangre de las personas y los animales en todo el mundo, y están presentes en niveles bajos en una variedad de alimentos y en el entorno. Algunas PFAS se pueden acumular en las personas y los animales con exposiciones reiteradas a lo largo del tiempo”, según los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) de los Estados Unidos.
Qué se descubrió en Italia
El agua potable del Véneto estuvo ampliamente contaminada por una planta de producción de PFAS entre 1985 y 2018. Los investigadores detectaron por primera vez un exceso de unas 4.000 muertes durante este período, es decir, aproximadamente una cada tres días.
Parte de la región se abasteció con agua de una fuente diferente. Eso dio a los investigadores la oportunidad de comparar los registros de decenas de miles de personas que bebieron agua contaminada y vivían cerca de los que no lo hicieron.
Aunque los PFAS pueden afectar al sistema cardiovascular de diferentes maneras, en gran medida son un problema porque producen niveles de colesterol muy altos y peligrosos.
Los niveles son difíciles de controlar porque no están causados por elecciones, por factores dietéticos o en el estilo de vida que puedan tratarse con ajustes, sino por cambios hormonales que afectan al metabolismo y a la capacidad del organismo para controlar la placa en las arterias.
Los autores del estudio sospechan que el trastorno de estrés postraumático causado por la catástrofe ambiental, que trastornó vidas en toda la región, también puede estar favoreciendo a las enfermedades circulatorias.
También en los primeros cinco años del estudio se registraron 16 casos de cáncer de riñón, mientras que en los últimos cinco se han registrado 65. También se detectaron niveles elevados de cáncer de testículo durante algunos períodos de tiempo.
Los registros “mostraban claramente” que las exposiciones en etapas más tempranas de la vida conducían a niveles más altos de mortalidad, excepto en el caso de las mujeres que tienen varios hijos. Investigaciones anteriores habían detectado niveles más elevados en mujeres con un solo hijo.
En las conclusiones, los investigadores hacen un llamado para que se prohíba el uso de las sustancias PFAS y para que se empiecen a implementar medidas de remediación en sitios contaminados.
Qué otros efectos tiene las sustancias PFAS
De acuerdo a la Clínica Cleveland de los Estados Unidos, hay evidencia que algunas de las sustancias PFAS generan cambios en los niveles de hormonas tiroideas, incluidas la hormona estimulante del tiroides (TSH) y la tiroxina, la principal hormona liberada por las tiroides.
Cuando los niveles de la hormona tiroidea cambian, puede causar que las funciones corporales se aceleren (hipertiroidismo) o se ralenticen (hipotiroidismo).
También hay pruebas que señalan estos efectos de las PFAS:
- Desarrollo más lento en los niños
- Menor peso al nacer
- Reducción de la calidad y el recuento de espermatozoides
- Mayor riesgo de obesidad
- Inicio precoz de la pubertad
- Problemas óseos
- Cambios de comportamiento
- Aumento del riesgo de cáncer
- Reducción de la función inmunitaria
Según las directrices publicadas en enero pasado por los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC), se recomienda a los médicos que consideren la posibilidad de realizar más análisis de sangre para detectar PFAS, también conocidas como “sustancias químicas de siempre”.