Los 122 imponentes metros del cohete más grande del mundo volvieron a asombrar a todos esta mañana, cuando SpaceX lanzó con éxito esta enorme estructura llamada nave Starship.
El crítico despegue, el primero del año y tercero en la historia de esta nave espacial, tuvo lugar a las 8:25 hora local (13:25 GMT), desde Starbase, la base espacial de SpaceX con sede en Boca Chica, al sur de Texas, Estados Unidos. Si bien el despegue estaba programado originalmente para más temprano, las malas condiciones climáticas y algunos ajustes en la carga de combustible demoraron el lanzamiento unas dos horas.
El enorme cohete que consta de dos partes, finalmente se elevó exitosamente, encendiendo los 33 motores Raptor de su primera etapa, el propulsor llamado Super Heavy (Super Pesado) y la segunda etapa superior reutilizable de acero inoxidable que también se conoce como " Starship”. Ambas etapas del cohete se separaron como se esperaba, permitiendo a la nave principal realizar la órbita a la Tierra, según lo planeado por los ingenieros en este vuelo de prueba.
La empresa espacial SpaceX, perteneciente al millonario emprendedor Elon Musk ha diseñado el sistema de lanzamiento Starship para que sea totalmente reutilizable y espera utilizarlo para la exploración del espacio profundo hacia la Luna y Marte, realizando lanzamientos de carga pesada y hasta para turismo espacial.
La tercera prueba de vuelo tenía como objetivo aprovechar lo aprendido de vuelos anteriores mientras se intenta abordar una serie de objetivos ambiciosos, incluido el ascenso exitoso de ambas etapas, abrir y cerrar la puerta de carga útil de Starship, una demostración de transferencia de propulsor durante la ‘fase costera’ de la etapa superior, el primer reinicio de un motor Raptor en el espacio y un reingreso controlado de Starship”, escribió SpaceX en su sitio web de la misión Starship.
Y agregó: “Starship voló en una nueva trayectoria de vuelo que nos permite intentar nuevas técnicas como la quema de motores en el espacio mientras maximizamos la seguridad pública”, escribió SpaceX sobre el lanzamiento de hoy.
Durante el vuelo de Starship, SpaceX demostró que este poderoso cohete podrá también en un futuro cercano desplegar satélites Starlink al abrir la puerta de carga útil de la etapa superior del cohete. De este modo, la compañía ha conseguido uno de los grandes objetivos de esta prueba.
También perseguía mover varias toneladas de oxígeno líquido entre dos tanques dentro de Starship, una prueba preliminar para el futuro reabastecimiento de combustible en órbita entre dos Starships, lo cual es fundamental para enviar el vehículo a la Luna.
No obstante, Starship buscaba reiniciar uno de sus motores Raptor en el vacío del espacio, algo que no ha hecho antes, pero este paso no fue realizado por la compañía.
Si bien el lanzamiento fue exitoso, SpaceX deberá seguir trabajando en la posible recuperación de ambos tramos del cohete. El propulsor Super Heavy ha vuelto de regreso a la Tierra, pero un fallo técnico en la visualización de la imagen no ha dejado ver si SpaceX logró completar con éxito la recuperación. Y la nave Starship que ha logrado volar durante una hora alrededor de la Tierra, llegando más lejos que las pruebas anteriores, no ha podido llegar a amerizar en el Océano Índico sin conseguir una reentrada con éxito en nuestro planeta.
Según ingenieros de la compañía, se perdió la comunicación con la nave lo que hace sospechar que no “ha sobrevivido a la reentrada”, pero se han recogido datos de telemetría muy valiosos durante este tiempo ya que el cohete ha seguido emitiendo en directo, lo que supone un éxito por ser la primera vez que lo consiguen.
“Se trató de la tercera prueba del complejo Starship Super Heavy, el cohete más grande en tamaño y a su vez el más potente de la historia y además también el cohete con más motores. De todos los tiempos, 33 motores, superando incluso al famoso cohete N1 que construyó la Unión Soviética en plena Guerra Fría, cuando estaba en plena carrera lunar con los Estados Unidos. Nunca un cohete con tantos motores había funcionado. Esto ya había ocurrido en la prueba número dos donde habían funcionado los 33, ahora nuevamente los 33. Pero bueno, esta prueba fue extraordinaria por otros aspectos también”, comenzó a analizar para Infobae el astrónomo Diego Bagú, especialista en vuelos espaciales.
Y agregó: “El cohete ascendió sin grandes problemas. Se pudo probar nuevamente y por segunda vez lo que se llama la separación en caliente, el donde básicamente se separan Starship de 50 metros que va en la parte superior del booster, del cohete de la parte inferior, que posee a su vez otros 70 metros. Separar ambas partes mientras los motores están encendidos funcionó a la perfección. Otra cosa que se logró es que el booster no explotó. La primera etapa de 70 metros descendió en el Golfo de México, aunque se la estabilidad en su momento, ya cuando estaba en los en los últimos kilómetros. Pero bueno, fue superador a lo que ocurrió en los anteriores lanzamientos”.
“Otro logro impresionante fue que la Starship alcanzó el espacio exterior, cuando una nave alcanza los 100 kilómetros de altura que separa la atmósfera de nuestro planeta del espacio exterior, e hizo un vuelo suborbital para caer finalmente en el Océano Índico. Otro de los logros justamente fue ese que la Starship pudo reencender sus motores raptor en el espacio nunca se habían reencendido, siempre se habían encendido y apagado. Encendieron los motores del Starship y realizó una entrada en la atmósfera que realmente fue digna de película. Las imágenes que estuvimos viendo hoy en el lanzamiento en directo fueron alucinantes. Se perdieron algunas losetas térmicas que son las que. Protegen a la nave en el reingreso por la alta temperatura que alcanza. Pero básicamente la gran parte del conjunto de losetas térmicas soportaron el reingreso en la atmósfera”, precisó el experto en vuelos espaciales.
La tercera es la vencida
Antes del éxito de este tercer lanzamiento de Starship, SpaceX sufrió 2 reveses el año pasado. El cohete Starship y su booster Super Heavy tuvieron su primer lanzamiento de prueba el 20 de abril de 2023, pero explotó a los 4 minutos de lanzamiento, justo cuando ambos impulsores debían separarse y no lo lograron, haciendo que la nave comenzara a girar en forma descontrolada y obligando a los ingenieros a apretar el botón de autodestrucción en pleno vuelo.
En el segundo lanzamiento, que tuvo lugar el 18 de noviembre de 2023, el cohete despegó rápidamente y un deflector de llamas refrigerado con agua protegió la plataforma. En el vuelo, la primera y la segunda etapa del cohete se separaron correctamente, pero el propulsor Super Heavy (modelo Booster 7) estalló poco después.
La nave Starship (modelo Ship 25) siguió ascendiendo durante 8 minutos. Sin embargo, se autodetonó poco antes de apagar sus motores cuando se encontraba a unos 150 km de altitud. “SpaceX logró una serie de hitos importantes y proporcionó datos invaluables para continuar desarrollando rápidamente Starship”, explicó la compañía ese día.
La empresa de Elon Musk, que ha catalogado de aprendizaje los dos lanzamientos anteriores pese a los reveses, necesitó la aprobación de la Administración Federal de Aviación (FAA, en inglés) para el nuevo intento de hoy. La FAA señaló el ayer que SpaceX “cumplió con todos los requisitos de seguridad, medio ambiente, políticas y responsabilidad financiera”.
¿Por qué es tan importante Starship?
“Podemos ir a otros lugares del sistema solar, como Saturno, pero creo que lo más importante en lo que debemos centrarnos es en el camino más rápido hacia una ciudad autosuficiente en Marte”, fueron las palabras que pronunció el multimillonario empresario Elon Musk al presentar hace dos años su nuevo cohete Starship, con el que se propone generar una revolución espacial como la que hizo el legendario Apolo que llevó el hombre a la Luna.
Pero la meta del hábil emprendedor no solo se circunscribe a la Luna. Si Marte es el gran objetivo de la carrera espacial de este siglo, Starship es la gran promesa para hacerlo una realidad.
Con el poder de transportar hasta 100 toneladas en órbita baja alrededor de la Tierra, sus admiradores afirman que Musk está a punto de transformar la economía del negocio de los lanzamientos. “Se acabó el juego para las empresas de lanzamiento existentes. No hay ningún vehículo en la mesa de dibujo que pueda competir”, afirmó Peter Diamandis, un empresario espacial estadounidense.
El megacohete Starship de Space X se ha convertido en el más alto del mundo, con 122 metros de altura. A SpaceX le llevó varios años su desarrollo, cambios de nombre y de diseño, desde que fue presentado por Musk en 2019 en su primera versión llamada MK1.
Starship diseñó un nuevo motor, llamado Raptor, que funciona a base Metano en estado líquido, más oxígeno líquido como oxidante (metalox), en una nueva combinación de combustible más económico y más fácil de manejar a bajas temperaturas. Y esta cohete posee 33 motores Raptor en su primera etapa y 6 en su segunda. “Debido a su tamaño y capacidad para llevar instrumentos científicos incluso al espacio profundo, Starship permitirá una clase completamente nueva de misiones científicas”, comentó Musk en su cuenta de Twitter.
Si Marte es el gran objetivo de la carrera espacial de este siglo, Starship es la gran promesa para hacerlo una realidad. El ambicioso proyecto de Elon Musk y SpaceX lleva casi 20 años en la imaginación del mundo, pero estamos siendo testigos de lujo de que los sueños de llegar a otros mundos se están haciendo realidad. El cohete prevé que transportar hasta 100 personas y 150 toneladas de carga en cada viaje a la Luna y Marte.
Los números de Starship:
- Mide 122 metros de altura, contando al booster Super Heavy, más la nave (70 metros la primera etapa más 50 metros de la segunda)
- Tiene 9 metros de diámetroCuenta con 33 motores Raptor en la base del Super Heavy y 6 en la Nave
- Posee 7.600 toneladas de empuje
Capacidad de carga:
- 150 toneladas hacia la órbita baja de la Tierra, la Luna o Marte
- 250 toneladas en su versión desechable o no reutilizable