Finalmente sucedió: la nave de la que todo el mundo hablaba fue dada a conocer. La NASA presentadó ayer, 12 de enero, su flamante avión supersónico silencioso X-59 Questst en las instalaciones en Palmdale, California.
Questt es la misión de la NASA que busca demostrar la capacidad de vuelo supersónico superando la velocidad del sonido, al tiempo que se quiere reducir el tradicional estallido a un golpe sónico silencioso. Su distintivo diseño afilado y con ala en delta favorece este objetivo. Ayer los directivos de la NASA y el contratista principal, Lockheed Martin, presentaron oficialmente al mundo el avión supersónico ya totalmente terminado.
Según explicó Pam Melroy, viceadministradora de la NASA, durante la presentación del avión, aviones supersónicos basados en el X-59 permitirán, por ejemplo, reducir a la mitad el trayecto Nueva York-Los Ángeles, que actualmente requiere seis horas y 30 minutos. El X-59 volará a una velocidad de 1.488 kilómetros por hora, alrededor de 1,4 veces la velocidad del sonido.
La NASA planea realizar vuelos del X-59 desde este 2024 sobre áreas pobladas para recopilar datos de cómo percibe la gente el sonido que produce. Estos avances podrían permitir nuevos mercados comerciales de carga y pasajeros en viajes aéreos por encima de la velocidad del sonido.
La principal característica del X-59 es su prolongada nariz, mucho más larga que la que tenía el Concorde, el avión comercial supersónico desarrollado de forma conjunta por Francia y el Reino Unido (1976-2003) y que era capaz de volar a dos veces la velocidad del sonido. Melroy explicó que la nariz del X-59 constituye la tercera parte de la longitud total del avión experimental, que mide en total 100 pies o 30,5 metros.
“Este diseño es realmente clave para dispersar las ondas sonoras”, dijo la viceadministradora de la NASA, que describió el ruido que causa el X-59 como “un rumor” en vez del bum habitual.
Aquí 4 claves para entender la importancia de este avión que parece de ciencia ficción, pero no lo es.
1. ¿Qué es una aeronave supersónica?
Las aeronaves supersónicas son capaces de alcanzar velocidades superiores a la del sonido, aunque su rapidez ha venido acompañada históricamente de la generación de ondas de choque, produciendo un estruendoso ruido similar a una explosión. En 1973, el gobierno de los Estados Unidos prohibió los vuelos supersónicos comerciales sobre su territorio debido a la contaminación sonora generada por estos aviones.
Sin embargo, existe la posibilidad de un cambio en esta restricción si los resultados de la misión de la NASA con el avión supersónico resultan positivos.
2. Golpe sónico
Este avión experimental es único en su clase y tiene como objetivo demostrar la capacidad de volar a velocidades supersónicas con la particularidad de causar un suave “golpe sónico” en lugar del estruendo sonoro característico.
El proyecto forma parte de la misión de la NASA denominada “QueSST”, cuyas siglas en inglés significan “Tecnología Supersónica Silenciosa”.
3. ¿Cuál es el propósito del avión supersónico X-59?
En la siguiente fase del proyecto, se llevarán a cabo vuelos sobre comunidades específicas de Estados Unidos para estudiar las percepciones sonoras de las personas cuando el avión sobrevuela sus áreas.
Según explicaron los expertos, la agencia compartirá los datos sobre las reacciones a los “golpes” sónicos más silenciosos con los organismos reguladores de la aviación. Estos datos podrían ser considerados por los reguladores al evaluar las normas actuales que prohíben los vuelos supersónicos comerciales sobre tierra debido al ruido.
Catherine Bahm, directora del proyecto que supervisa el desarrollo del X-59, expresó su entusiasmo ante la posibilidad de levantar la prohibición de vuelos supersónicos sobre tierra, considerando esto como el futuro habilitado por el X-59.
4. Vuelos transoceánicos en cuestión de horas
Si se autoriza su uso, permitiría vuelos transoceánicos en cuestión de horas, como el trayecto entre Nueva York y Londres en tan solo 2 horas en comparación con las 7 horas actuales. Puede ser utilizado tanto como aeronave espacial como un caza militar.
El diseño del avión, con motores sobre el ala para evitar que las ondas de choque se dirijan hacia el suelo, y una parte inferior lisa para minimizar las ondas de choque, refleja una combinación de nueva tecnología y componentes de aeronaves establecidas. Además, se presenta con tecnología proveniente de diversas aeronaves ya existentes, como el tren de aterrizaje de un F-16 y el sistema de soporte vital de un F-15, según informó la NASA.
La presentación del X-59 es un hito significativo para el equipo, marcando el inicio de la siguiente fase que incluirá el primer vuelo y eventualmente vuelos supersónicos.
Aunque ya se había presentado anteriormente en agosto, la aeronave ha pasado por el taller de pintura y ahora se muestra con los colores finales: rojo, blanco y azul. John Gould, director de investigación aeronáutica de la misión, destacó la importancia de la presentación no solo como un logro técnico, sino como un paso hacia el futuro del vuelo y la investigación aeroespacial.
Con información de Europa Press y EFE