El propulsor Super Heavy apagó casi todos sus motores, salvo tres, cuando superó los 70 km de altitud y la nave Starship encendió sus seis motores para separarse de él. Pero inmediatamente el impulsor Super Heavy que debía amerizar en el Golfo de México sufrió una explosión. Y 8 minutos después de eso, la nave principal Starship también explotó al alcanzar el espacio.
SpaceX considera que fue un éxito la prueba del segundo vuelo de Starship pese a que el propulsor Super Heavy explotó tras la separación y que la nave Starship llegó al espacio y se autodetonó debido a problemas en sus motores o a una posible desviación de trayectoria.
La misión de hoy tenía como objetivo enviar la etapa superior Starship alrededor de la Tierra, terminando con un amerizaje en el Océano Pacífico cerca de Hawaii a los 90 minutos de iniciado el despegue, trayecto final que no pudo completarse.
El Starship y su booster Super Heavy han volado juntos sólo una vez hasta la fecha, en un lanzamiento de prueba que despegó de Starbase el 20 de abril último, pero explotó a los 4 minutos de lanzamiento, justo cuando ambos impulsores debían separarse.
A los 12 minutos del lanzamiento, los controladores de SpaceX perdieron comunicación con Starship y se cortó la transmisión en directo por los distintos canales.
A los 4 minutos del lanzamiento, el lanzador Super Heavy se separó con éxito de la nave principal Starship, que prosigue su vuelo hacia la órbita terrestre.
Pasado un minuto del lanzamiento, los 33 motores se encendieron exitosamente.