El visón se cría ampliamente para obtener pieles en distintas partes del mundo, como Europa, América del Norte y China. Asimismo, mucho se ha escrito sobre la práctica cruel, innecesaria y, según algunos, poco ética de este proceso. Sin embargo, menos se ha discutido sobre los peligros para la salud humana y animal que plantea, en particular, esta cría.
Las granjas de pieles de visón podrían proporcionar las condiciones óptimas para que la influenza H5N1 mute y dé el salto a los humanos, lo que podría conducir a la próxima pandemia mundial, advierten científicos del Imperial College London. En un artículo que acaba de publicarse, los virólogos de Imperial destacan la cría de pieles de visón como un importante riesgo mundial para la bioseguridad y piden medidas urgentes para abordar el peligro de una pandemia mundial inminente. La llamada coincide con informes de este mes sobre brotes de H5N1 en granjas peleteras en Finlandia.
En la revista científica PNAS, Wendy Barclay, jefa del Departamento de Enfermedades Infecciosas del Imperial College de Londres, y Thomas Peacock, virólogo del Imperial College London y el Instituto de Virología Pirbright, han dado a conocer algunas aristas de sus investigaciones y destacan el riesgo significativo de las granjas peleteras y agregan que la práctica debe colocarse en la misma categoría que las prácticas de alto riesgo, como el comercio de carne de animales silvestres y los mercados de animales vivos.
Entre las preocupaciones, los especialistas destacan que las granjas de pieles de visón representan la amenaza biológica evitable más significativa para la próxima pandemia mundial de influenza. “Los animales pueden contraer y propagar fácilmente la influenza y otros virus respiratorios, y hay evidencia de virus que saltan de los animales a otras especies (incluidos el SARS-CoV-2 y el H5N1)”, afirma Barclay.
Una prevención posible
Los investigadores argumentan que la cría de pieles representa una amenaza mayor para la salud mundial que la cría de aves o cerdos, debido a una combinación de la biología del visón, las condiciones de alojamiento y la falta de regulación y equipo de protección en el manejo y sacrificio de animales.
“Los brotes continuos de influenza H5N1 representan un riesgo pandémico significativo -afirma Peacock-, pero hasta ahora los casos se han limitado en gran medida a aves silvestres o mamíferos solitarios con poca interacción humana. Las granjas de visones brindan la oportunidad perfecta para que el virus H5N1 se propague rápidamente entre animales y para que se acumulen mutaciones virales, incluidas adaptaciones que lo hacen más transmisible a los humanos y entre ellos”.
Al mismo tiempo, los especialistas advierten en su documento que el uso de antivirales en granjas de visones no es una opción viable debido al riesgo significativo de que los virus desarrollen resistencia antimicrobiana, una situación que haría que los medicamentos se conviertan en ineficaces para tratar a los humanos.
“Restringir y/o regular enérgicamente la cría de pieles de visón en Europa y América del Norte ofrece la estrategia única más eficaz y fácilmente ejecutable para reducir el riesgo de un evento pandémico H5N1 en un futuro próximo”, continúa Peacock.
Los autores advierten en su escrito que “la cría de pieles debería estar en la misma categoría de prácticas de alto riesgo, como ocurre con el comercio de carne de animales silvestres y los mercados de animales vivos”.
“Todas estas actividades aumentan la probabilidad de futuras pandemias. Como mínimo, las prácticas de bioseguridad y la vigilancia activa en las granjas peleteras deben revisarse, mejorarse en gran medida y aplicarse estrictamente”, concluye Barclay.