Tras su presentación, ya comenzó la convivencia de los cuatro voluntarios en el Mars Dune Alpha, un hábitat de 160 metros cuadrados diseñado para simular la vida en Marte. Es que esta vivienda construida con una impresora 3D, que será hogar de estos expertos durante un año a partir de junio, busca preparar a los humanos (en el espacio y la Tierra) para una futura misión al planeta rojo.
Ubicado en el Centro Espacial Johnson de la NASA en Houston, Texas, Mars Dune Alpha es una casa común a simple vista, con cuatro dormitorios, sala de estar y gimnasio. Sin embargo, el suelo de tierra roja en el patio trasero revela su verdadero propósito: replicar las condiciones de vida en Marte.
El equipo de voluntarios está liderado por la comandante Kelly Haston, una científica e investigadora que estudia enfermedades humanas, quien es acompañada por el ingeniero de vuelo Ross Brockwell, el oficial médico Nathan Jones y la oficial científica Alyssa Shannon, una enfermera de práctica avanzada. Mientras que, “como tripulantes de respaldo” se encuentran el ingeniero aeroespacial y de defensa Trevor Clark y la microbióloga de la Marina de los EEUU, Anca Selariu.
El hábitat incluye una granja vertical para el cultivo de vegetales, una sala dedicada a procedimientos médicos, dos baños, una zona de relajación y varias estaciones de trabajo. Además, cuenta con una puerta que conduce a un área de simulación del entorno marciano, equipada con una estación meteorológica, un pequeño invernadero y una cinta para correr, donde los voluntarios caminarán suspendidos por correas.
Durante su estancia, los voluntarios estarán sometidos a estrés regularmente, enfrentando restricciones de agua y fallas en el equipo, entre otros desafíos. Estas condiciones están diseñadas para imitar las dificultades que los astronautas podrían enfrentar en una misión real a Marte, proporcionando a la NASA datos valiosos sobre cómo los humanos pueden manejar tales desafíos.
La NASA planea monitorear la salud física y mental de los voluntarios para comprender mejor la resistencia humana a un aislamiento tan prolongado. “Al medir su desempeño y habilidades cognitivas, la NASA comprenderá mejor los recursos que se deben proporcionar durante este ambicioso viaje”, explicó Grace Douglas, investigadora principal del programa CHAPEA (Crew Health and Performance Exploration Analog), una serie de programas de simulación de vida en Marte aquí en la Tierra.
“Realmente podemos comenzar a comprender cómo los estamos apoyando con lo que les estamos brindando, y esa será información realmente importante para tomar esas decisiones críticas sobre los recursos”, dijo en una gira de prensa por el hábitat, siendo que el método de construcción es “una de las tecnologías que la NASA está estudiando para construir potencialmente hábitats en la superficie de otros planetas o en la Luna”, afirmó Douglas.
El hábitat fue impreso en 3D, una tecnología que la NASA está estudiando para construir potencialmente hábitats en la superficie de otros planetas o en la Luna. Esta técnica ofrece una serie de ventajas para la construcción de hábitats espaciales, incluyendo la capacidad de utilizar materiales locales para su edificación, lo que reduce la cantidad de componentes que deben ser transportados desde la Tierra.
La agencia espacial estadounidense está preparando un viaje de ida y vuelta a Marte, que podría realizarse a finales de la década de 2030, según el administrador de la NASA, Bill Nelson. Este viaje sería una hazaña sin precedentes en la historia de la exploración espacial, y los datos recopilados en el experimento Mars Dune Alpha serán vitales para su planificación y ejecución.
Jason Ballard, cofundador y CEO de ICON el constructor del hábitat dijo en un comunicado: “Este es el hábitat simulado de mayor fidelidad jamás construido por humanos. ‘Mars Dune Alpha’ tiene un propósito muy específico: preparar a los humanos para vivir en otro planeta”. “Queríamos desarrollar el análogo más fiel posible para ayudar en el sueño de la humanidad de expandirse hacia las estrellas. La impresión 3D del hábitat nos ha ilustrado aún más que la impresión 3D a escala de construcción es una parte esencial del conjunto de herramientas de la humanidad en la Tierra y para ir a la Luna y Marte para quedarse”, concluyó.
El experimento en Mars Dune Alpha es parte de los esfuerzos de la NASA para prepararse para una misión a Marte, aunque la mayor parte de su enfoque está en las próximas misiones Artemis, cuyo objetivo es llevar humanos a la Luna por primera vez en medio siglo. La experiencia y la información recopilada durante este tiempo dentro de la simulación ayudarán a la NASA a tomar decisiones para diseñar y planificar una futura misión humana a Marte.
Tras lograr aquello que esperan los científicos, Mars Dune Alpha se convertirá en un paso crucial en la preparación de la humanidad para la exploración de Marte. A través de este experimento, la NASA espera obtener una comprensión más profunda de los desafíos que los astronautas pueden enfrentar en una misión a Marte, y cómo estos pueden ser superados. Con los ojos del mundo puestos en la exploración del espacio, este experimento representa un paso significativo hacia el objetivo de enviar humanos a Marte.
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