Solo 1 de cada 4 pacientes con COVID que fueron hospitalizados se recupera por completo al año del alta

Lo reveló un estudio publicado en The Lancet hecho en el Reino Unido con más de 2.300 pacientes. Quiénes son los que tuvieron menos probabilidad de recuperarse

Guardar
Una paciente del Hospital Ichilov, en Tel Aviv, Israel, es atendida por el COVID persistente, un síndrome con más de 200 síntomas/REUTERS/Amir Cohen/Archivo
Una paciente del Hospital Ichilov, en Tel Aviv, Israel, es atendida por el COVID persistente, un síndrome con más de 200 síntomas/REUTERS/Amir Cohen/Archivo

Más de 505 millones de personas han sido diagnosticadas con la infección por el coronavirus. Más de 6,2 millones han fallecido. Si bien la mayoría de los afectados desarrolla un cuadro leve o moderado, el COVID-19 puede dejar secuelas después de la fase aguda, especialmente en las personas que requirieron hospitalización. Un estudio científico realizado en el Reino Unido encontró que solo 1 de cada 4 pacientes que se contagiaron el coronavirus y tuvieron que ser hospitalizados se recuperó al año de haber tenido la infección.

El trabajo se hizo en el Reino Unido con más de 2.000 pacientes que habían estado hospitalizados con COVID-19. Fue presentado días atrás en el Congreso Europeo de Microbiología Clínica y Enfermedades Infecciosas, que se lleva a cabo en Lisboa, Portugal. También fue publicado en la revista especializada The Lancet Respiratory Medicine.

Con la dirección del Profesor Christopher Brightling, Rachael Evans, y Louise Wain, del Centro de Investigación Biomédica de Leicester del Instituto Nacional de Investigación de Salud, la Universidad de Leicester, y otras instituciones, se demostró después de un año de tener el COVID-19, solamente uno de cada cuatro pacientes que requirieron hospitalización se recuperaron totalmente.

Después de un año de tener el COVID-19, uno de cada cuatro pacientes se ha recuperado totalmente, según estudio en el Reino Unido (REUTERS/Hannah Beier/Archivo)
Después de un año de tener el COVID-19, uno de cada cuatro pacientes se ha recuperado totalmente, según estudio en el Reino Unido (REUTERS/Hannah Beier/Archivo)

Los autores hallaron que las mujeres tienen un 32% menos de probabilidad de haberse recuperado al año de haber tenido la infección. También padecer obesidad (50%) y tener respiración asistida en el hospital (58% menos) se asociaron con menor probabilidad de una recuperación total en un año. Los síntomas más comunes en el COVID persistente fueron fatiga, dolor muscular, ralentización corporal, dormir mal y dificultad para respirar.

Los investigadores usaron información proveniente del estudio PHOSP-COVID en el que se evaluaron adultos (a partir de 18 años) que fueron hospitalizados por COVID-19 en Reino Unido y más tarde dados de alta. Se incluyeron los pacientes de 39 hospitales del Servicio Nacional de Salud (NHS) de Reino Unido que aceptaron un seguimiento a los cinco meses y al año, además a sus cuidados hospitalarios. Los investigadores tomaron muestras de sangre de los participantes a los cinco meses para analizar la presencia de varias proteínas inflamatorias.

Se dio de alta hospitalaria a un total de 2.320 pacientes entre el 7 de Marzo de 2020 y el 18 de Abril de 2021. Todos ellos fueron evaluados a los 5 meses de su alta y 807 (33%) participantes completaron los seguimientos de los 5 meses y el año en el momento en que se realizó este análisis (ya que el estudio aún continua). Los 807 pacientes tienen una media de edad de 59 años, 279 (36%) eran mujeres y el 28% recibió respiración asistida invasiva. La proporción de pacientes que se notificaron como recuperados totalmente fue similar entre los 5 meses y un año.

En una publicación anterior de la investigación, los autores habían identificado cuatro grupos o ‘clúster’ de síntomas graves a los cinco meses, los cuales se confirmaron en este nuevo estudio realizado al año. De los 2.320 participantes, se obtuvo suficiente información de 1.636 de ellos como para asignarles un clúster: 319 (20%) tuvieron un deterioro de salud físico y mental muy grave, 493 (30%) tuvieron un deterioro de salud físico y mental grave, 179 (11%) tuvieron un deterioro de salud físico con problemas cognitivos moderados y 645 (39%) tuvieron un deterioro de salud físico y mental leve.

Ser obeso se asocia con un 50% menos de probabilidad de una recuperación total en un año (Getty Images)
Ser obeso se asocia con un 50% menos de probabilidad de una recuperación total en un año (Getty Images)

Padecer obesidad o una capacidad para ejercitarse reducida, un mayor número de síntomas y un aumento en los niveles del biomarcador de la proteína C-reactiva fueron asociados a que las personas estuvieran en los grupos más graves. En los casos de clúster muy graves y moderados de problemas cognitivos, los niveles del biomarcador inflamatorio interleuquina-6 (IL-6) fueron más altos respecto al clúster leve.

Los autores apuntaron que fue sorprendente “la escasa recuperación tras hospitalización desde los 5 meses al año en nuestro estudio mediante síntomas, salud mental, capacidad de realizar ejercicio, deterioro de órganos y calidad de vida”.

Además comentaron: “Hallamos que el sexo femenino y la obesidad son mayores factores de riesgo para no recuperarse al año. En nuestros clústeres, el sexo femenino y la obesidad también se asociaron a problemas de salud graves en curso incluyendo una ejercitación reducida y una calidad de vida respecto a su salud al año, destacando potencialmente a un grupo que puede necesitar una mayor intensidad de procedimientos como la rehabilitación supervisada”.

Sobre la falta de tratamientos para el COVID persistente, los autores señalaron: No existen terapias específicas para el COVID persistente y nuestra información destaca la necesidad de procedimientos efectivos con urgencia. Nuestros resultados sobre inflamación sistemática persistente, en particular en los casos muy graves y moderados de grupos de problemas cognitivos, sugieren que estos grupos pueden responder a estrategias antiinflamatorias”.

Los casos muy graves con COVID persistente podrían responder a estrategias antiinflamatorias, según los investigadores (Getty)
Los casos muy graves con COVID persistente podrían responder a estrategias antiinflamatorias, según los investigadores (Getty)

También destacaron que tras la fase aguda de la enfermedad en pacientes que requieren hospitalización se debería considerar la integración de la atención médica que abarque tanto la salud física como la salud mental. “La concordancia de severidad en los problemas físicos y de salud mental que se desarrollan en el COVID persistente destaca no sólo la necesidad para una integración estrecha en el cuidado del físico y salud mental de los pacientes con COVID persistente, incluyendo evaluaciones y tratamientos, sino también la transferencia de conocimientos entre los profesionales sanitarios para así mejorar los cuidados de los pacientes”, afirmaron.

Además, los resultados también sugieren la necesidad de procedimientos complejos que tengan como objetivo aliviar los síntomas de deterioro físico y de salud mental. Sin embargo, también pueden ser necesarias terapias especificas para controlar el estrés postraumático.

Los investigadores concluyeron que su estudio “destaca la urgente necesidad por parte de los servicios sanitarios de respaldar a este grupo de población rápidamente en aumento que padecen una carga sustancial de los síntomas, incluyendo una capacidad de ejercitación reducida y deterioro de calidad de vida respecto a su salud al año del alta hospitalaria”.

Sin tratamientos efectivos, el COVID persistente podría convertirse en una condición de larga duración muy frecuente, alertaron los investigadores. Además, “nuestro estudio ofrece una base para la investigación de tratamientos para el COVID persistente con un enfoque de precisión médica para así enfocar los tratamientos a perfiles de pacientes individualizados para la recuperación de su calidad de vida en lo relacionado a su salud”.

SEGUIR LEYENDO

Guardar