Un estudio realizado por investigadores españoles detectó que silenciar un gen específico colaboraría en reducir el incremento del peso impulsado por la dieta. Pese a que aún solo fue desarrollado en ratones, esta investigación abre un nuevo panorama en lo que se refiere al tratamiento genético de la obesidad, ya que con una simple inyección se podría impedir el aumento del tejido adiposo.
“La obesidad es una epidemia mundial causada por la alteración del equilibrio energético (aumento de la ingesta de energía alimentaria y/o disminución del gasto energético) y caracterizada por el agrandamiento del tejido adiposo y el aumento de la acumulación de grasa corporal”, describieron los científicos en el documento publicado en la revista Molecular Therapy Nucleic Acids.
En ese sentido, señalaron que la obesidad tiene, como factor más relevante, la progresión hacia el padecimiento de enfermedades metabólicas, entre las que enumeraron: diabetes tipo 2, dislipidemia (niveles excesivamente elevados de colesterol o grasas en sangre), hipertensión arterial, cardiopatía isquémica, enfermedad del hígado graso no alcohólico y algunos tipos de cáncer, entre otros. Por este motivo, destacaron la importancia de realizar nuevas investigaciones que permitan generar tratamientos que eviten el aumento del peso, además de disminuir la acumulación de grasa.
Con esto en mente, los científicos del Instituto de Investigación Biomédica de Girona (IDIGBI) y el Centro de Investigación Biomédica en Red Fisiopatología de la Obesidad y Nutrición (CIBEROBN), que ya habían detectado en un estudio anterior la relación entre el aumento de peso y la proteína de unión al lipopolisacárido (Lbp), definieron realizar un estudio por el cual, mediante una inyección administrada directamente en el tejido adiposo, se inhibiera esta proteína.
“La proteína de unión a lipopolisacáridos (Lbp) ha sido identificada recientemente como un componente relevante de la respuesta de la inmunidad innata asociada a la adiposidad”, argumentaron los científicos. Al tiempo que puntualizaron que la finalidad del estudio fue analizar “el impacto del tejido adiposo Lbp en el aumento de peso y el tejido adiposo blanco (WAT) en ratones machos y hembras alimentados con una dieta obesogénica”.
Para alcanzar este objetivo, los investigadores le administraron a los ratones una inyección partículas lentivirales (fragmentos virales atenuados que transportan ácidos nucleicos que son incapaces de replicarse y están diseñados para auto-inactivarse tras cumplir su cometido) para lograr la inhibición de estos genes. El resultado, según señalaron, fue una reducción del aumento corporal y la acumulación de grasa.
La aplicación de estas inyecciones se realizaron mediante una intervención quirúrgica directa en el tejido adiposo. La extensión del estudio fue de cinco semanas, ya que luego de ese periodo la efectividad de la inhibición decayó.
“La eliminación de genes condujo a una reducción del aumento de peso corporal, una disminución de la expresión de proteínas y genes relacionados con la acumulación de grasa, y un aumento de la actividad de la lipasa basal inguinal, en paralelo a una disminución de los ácidos grasos libres, la leptina y los triglicéridos en plasma, pero en niveles más altos de glicerol, lo que resultó en una acción de insulina ligeramente mejorada”, advirtieron en el documento el equipo de científicos liderados por José María Moreno, investigador del CIBEROBN en el grupo de Nutrición, Eumetabolismo y Salud del IDIBGI.
Pese a que este estudio se realizó en ratones, los expertos aseguran que estos resultados permiten vislumbrar un posible tratamiento para la obesidad, ya que la inhibición de la Lbp dentro del tejido adiposo se podría convertir en una terapéutica. Incluso, gracias a esta técnica, también se podrían prevenir otros trastornos asociados con la obesidad. De todas maneras, aclararon que aún deben desarrollarse nuevos ensayos preclínicos (en animales) y clínicos (en humanos) para determinar la efectividad de esta terapéutica.
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