En muchos sentidos, las décadas de 1950 y 1960 se definieron por la rivalidad entre Estados Unidos y Rusia. Esta rivalidad se conoció como la Guerra Fría y condujo a eventos históricos como el Temor Rojo, la Guerra de Vietnam e incluso jugó un papel importante en la infame Guerra contra las Drogas. Casi todos los eventos mundiales de la historia reciente tienen algún tipo de conexión con la Guerra Fría, incluida la interferencia rusa en las elecciones estadounidenses de los últimos años. Dejando a un lado la política moderna, uno de los duelos más legendarios entre Oriente y Occidente se produjo en la forma de la Carrera Espacial, que vio a las dos potencias globales literalmente correr hacia el espacio y la Luna.
En 1959, en plena Guerra Fría, la Unión Soviética domina la carrera espacial y los Estados Unidos temen ser una nación en caída. La reciente formada NASA tiene la monumental tarea de enviar al hombre al espacio y sus ingenieros calculan que les tomará décadas lograrlo. Sin embargo, solo les dan dos años.
Conocido como Proyecto Mercury, un programa recluta y entrena a siete astronautas elegidos entre los mejores pilotos del ejército. A tan solo días de haber sido presentados al mundo, los “Mercury Seven” se convierten de inmediato en celebridades y se los considera héroes sin haber siquiera realizado alguna hazaña.
Basada en el emblemático best-seller de Tom Wolfe, Los Elegidos De La Gloria es una serie que brinda una mirada inspiradora sobre los inicios del programa espacial de los Estados Unidos y la increíble historia de los primeros astronautas del país. La temporada de debut de ocho episodios describe los primeros días de la búsqueda de Estados Unidos para llevar a un hombre al espacio, mostrando a los astronautas no como grandes titanes del folclore, sino como seres humanos con ansiedades, presiones y obstinada tenacidad conocida como patriotismo.
Creada por National Geographic para Disney+, la serie debutará en el servicio de streaming de The Walt Disney Company este viernes. Con ocho episodios que se estrenarán semanalmente cada viernes, ofrece una mirada certera de lo que se transformaría en el primer reality show estadounidense.
Dos hombres centrales en esta historia lucharán por ser el primer humano en llegar al espacio: el Mayor John Glenn, miembro de la Marina y un comprometido hombre de familia, y el Teniente Comandante Alan Shepard, uno de los mejores pilotos de la historia de la Armada. La serie también sigue a las familias de los astronautas, incluyendo a Annie Glenn, quien lucha contra sus dificultades para hablar en público; Louise Shepard, el sostén de su familia y quien impide que las transgresiones de Alan afecten a su hogar, y Trudy Cooper, una piloto consumada que debe dejar de lado sus propias ambiciones en pos de dar una imagen de familia feliz.
En exclusiva con Infobae, Jennifer Davisson, productora ejecutiva de la serie, habló sobre el desarrollo del proyecto, así como la responsabilidad de retratar a los Mercury Seven. “Me fascina la gente que piensa que puede ser pionera en algo. Creo que es un concepto salvaje. ¿Por qué creen que podrían ser los primeros en llegar al espacio? ¿Qué es lo que los hace creer que tienen las cualidades adecuadas para llevarlo a cabo? Esa es una pregunta tan interesante y complicada de responder y no creo que la respuesta sea solo ‘porque pensaron que podían’. Mucho tiene que ver con el ego, con las inseguridades y con cosas internas, luchas y desafíos. Ese me pareció un tema muy interesante para explorar. En la serie tenemos siete personajes, dos en los que nos enfocamos principalmente, que se acercan al por qué deberían ser ellos los indicados para el trabajo desde puntos de vista completamente diferentes y, en última instancia, eso causa estragos en ellos y en sus vidas personales”, aseguró entusiasmada.
Nacida y criada en Sparta, Nueva Jersey, Jennifer comenzó trabajando con el productor Rick Yorn en AMG antes de pasar a The Firm y posteriormente a LBI Entertainment, donde demostró el liderazgo que luego la llevaría a tomar las riendas de Appian Way, la compañía de Leonardo DiCaprio. Desde 2007, es presidenta de la productora de cine y televisión con sede en Los Ángeles y en ese rol produjo un gran numero de largometrajes, como El Renacido, de Alejandro González Iñarritu, ganadora de tres premios de la Academia y ganadora del Globo de Oro; El Lobo de Wall Street, dirigida por Martin Scorcese y nominada a los premios de la Academia y al Globo de Oro; El Aviador y Shutter Island; La Ley del Más Fuerte, protagonizada por Christian Bale y Woody Harrelson; Secretos de Estado (The Ides of March), de George Clooney, nominada al Globo de Oro; el thriller psicológico de Jaume Collet Serra La Huérfana y Vivir de Noche, adaptación de la aclamada novela, escrita, dirigida y protagonizada por Ben Affleck. Recientemente produjo para Warner Bros. La Balada de Richard Jewell, dirigida por Clint Eastwood.
- Esta historia aspiracional sobre cómo personas ordinarias pueden lograr lo extraordinario habla tanto de la identidad norteamericana como de sus logros históricos, y refleja una época singularmente maravillosa en la que el mundo avizoraba nuevos horizontes de esperanzas. ¿Cuáles fueron las claves para fusionar aspectos tan diferentes pero trascendentes de la historia?
- A nivel mundial, esta es una historia de hace una eternidad y todos saben lo que sucedió: saben que fuimos al espacio y saben que comenzamos la NASA. Sin embargo, la verdad es que de lo que realmente se trata es de lo que somos capaces de lograr cuando todos nos unimos y trabajamos hacia un objetivo común. Por ejemplo, cuando terminamos de grabar la serie ocurre esta pandemia que es aterradora y debilitante en tantas formas diferentes en todo el mundo. Pero de lo que la gente no habla lo suficiente es de lo absolutamente increíble que es que nos hayamos unido como comunidad global y que, a una velocidad récord, tengamos todas estas vacunas disponibles y más por venir. Vamos a curarnos unos a otros y a salir adelante como comunidad, y creo que esa temática es algo de lo que se debe hablar y explorar constantemente. Necesitamos que nos recuerden constantemente que somos uno y que si trabajamos juntos podemos lograr grandes cosas.
El lado personal de la historia, creo, también es universal. Es decir, el querer más para uno, creer que podemos hacerlo mejor. Bueno, al esforzarnos para conseguir nuestros objetivos muchas veces sacrificamos otras partes de nosotros mismos. Saber cómo equilibrar nuestros deseos con lo que estamos sacrificando, junto con nuestros propios miedos, nuestras propias ansiedades y nuestros propios problemas, creo que es algo que nos atraviesa a todos. Y en la serie esto afecta no solo a los astronautas, sino también a sus esposas y familias.
- Sos una productora bien establecida y con una lista de proyectos en tu haber. ¿Cómo fue que empezaste a producir?
- Me mudé a Los Ángeles cuando terminé la universidad y realmente no sabía qué era producir. Es decir cuando crecés sabés quiénes son los actores, quiénes son los escritores y los directores, pero no sabés quién es o qué hace bien un productor. Tampoco escuchás hablar sobre aquellos que son grandes productores en la industria. Di mis primero pasos en el mundo de la representación, donde trabajé con escritores y directores, y finalmente conocí a Leonardo (DiCaprio) y empezamos a trabajar juntos. Nos dimos cuenta de que nos gustaban las mismas cosas y de que desde el punto de vista de la narración teníamos una mentalidad muy similar. Ahí fue que me convocó para trabajar en su productora. Acepté, pero realmente no sabía ni por dónde empezar y él me dijo: ’Solo tenés que encontrar grandes historias para contar y grandes personajes para explorar’. Ese fue el comienzo y la base de nuestra empresa: encontrar grandes historias y personajes, y tratar de darles vida para mostrárselos a aquellas personas que tal vez creen que los conocen, pero no desde nuestro punto de vista.
- ¿Cuál creés que será el mayor desafío de los próximos años en relación con la industria cinematográfica?
- Creo que este es un punto de transición en Hollywood en todos los sentidos en términos de cómo hacemos las cosas, dónde se van a ver las cosas y cómo se van a ingerir, obviamente en el universo del streaming que se aceleró debido a la pandemia por COVID-19. El mayor desafío será poder destacarse en un mundo en el que habrá mucho más contenido y se contarán muchas más historias. Esto, sin dudas, ejerce mucha presión sobre los cineastas, los narradores y los productores que deberán asegurarse de que lo que están haciendo, y creo que esto finalmente será algo bueno, se destaque. Al final del día, una buena historia siempre tiene éxito. Es un hecho y creo que todos los cineastas seremos desafiados a contar las mejores historias de la mejor manera posible para superar todas las demás cosas que se están haciendo.
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