Applied DNA Sciences planea iniciar un ensayo clínico de una de sus cinco vacunas candidatas LineaDNA de uso veterinario para prevenir infecciones por coronavirus en gatos domésticos, dijo el miércoles el fabricante de pruebas de diagnóstico.
Se sabe que aproximadamente una docena de animales son susceptibles al virus. En abril, se informó que un tigre de un zoológico de Nueva York dio positivo a pruebas de COVID-19; en tanto que la Organización Mundial de la Salud advirtió de la susceptibilidad de los felinos domésticos ante la enfermedad.
Los gatos, tanto salvajes como domésticos, son susceptibles al coronavirus felino, pero hasta hace poco, se desconocía si podían contraer SARS-CoV-2. Primero, un estudio chino encontró que los gatos pueden infectarse entre sí. Y después, se conoció el caso de Nadia, el felino que dio positivo de COVID-19. La tigresa no fue la única víctima del COVID-19. También se contagiaron su hermana Azul, dos tigres de Amur y dos leones africanos.
Según advirtió un estudio chino, el coronavirus de rápida propagación se puede transmitir entre las mascotas felinas. Pero no es probable que otros animales, como perros, pollos y cerdos, se contagien o propaguen el virus. Todavía no hay evidencia directa de que los gatos puedan infectar a las personas.
Investigadores del Harbin Veterinary Research Institute descubrieron que los gatos no solo son susceptibles a contraer COVID-19, sino que también pueden transmitirlo a sus amigos peludos. “Descubrimos que el SARS-CoV-2 se replica mal en perros, cerdos, pollos y patos, pero de manera eficiente en hurones y gatos”, se lee en un resumen del estudio. “Descubrimos que el virus se transmite en los gatos a través de gotas respiratorias”.
Los ensayos de Applied DNA Sciences se realizarán en colaboración con la firma de biotecnología Evvivax S.R.L. al recibir la aprobación del Departamento de Agricultura de Estados Unidos, indicó Applied DNA en un comunicado.
El ensayo tiene la intención de inscribir a 30 felinos domésticos sanos y seguirlos durante seis meses. El estudio evaluará la respuesta inmune felina doméstica, la seguridad y la tolerabilidad de la vacuna candidata y determinará evidencia de respuesta de anticuerpos y linfocitos T en ellos.
A principios de julio, Applied DNA dijo que cinco de sus candidatas a vacunas LineaDNA mostraron fuertes respuestas de anticuerpos a dosis bajas en estudios con ratones.
Las autoridades sanitarias norteamericanas aseguran que no hay evidencia hasta el momento que sugiera que ningún animal, incluidas las mascotas, pueda ser fuente de infección por COVID-19. “Actualmente no hay nada que compruebe que los animales de compañía puedan transmitir o causar la enfermedad, por lo que pueden y deben permanecer en el hogar durante el período de cuarentena salvo que una condición física propia de su tenedor lo impida”, explicó en diálogo con este medio la médica veterinaria Silvia Vai, especialista en etología clínica, perros y gatos.
Según una investigación publicada en la revista Nature, hasta ahora, solo ha habido dos casos reportados de animales, ambos visones, que transmiten el virus SARS-CoV-2 a las personas. Por el momento, la posibilidad de contraer la enfermedad de un animal infectado es insignificante en comparación con el riesgo de contraerla de una persona enferma, dicen los investigadores.
Sin embargo, dado que todos los animales pueden transportar gérmenes que pueden enfermar a las personas, siempre es una buena idea practicar hábitos saludables con las mascotas y otros animales, aclara el el Centro para el Control y la Prevención de Enfermedades.
El pelo de perro o gato es poroso y fibroso por lo que es poco probable que una persona se contagie al acariciarlo o jugar con él, de todas formas es necesario mantener las medidas de higiene adecuadas como lavarse las manos con agua y jabón luego de la interacción con el animal, así como evitar que suba a sillones o duerma en la cama, aunque estas últimas recomendaciones son difíciles de cumplir ya que muchos disfrutan del contacto estrecho con sus mascotas.
Asisa Volz, una viróloga veterinaria de la Universidad de Medicina Veterinaria de Hannover en Alemania, planea investigar si los gatos transmitieron el virus en una casa de retiro en Baviera, donde los residentes separados de las personas infectadas aún se enfermaron. Se descubrió que un gato tenía rastros de ARN del coronavirus, lo que sugiere que podría haber estado eliminando virus mientras deambulaba por las instalaciones. Volz examinará los gatos del centro para detectar anticuerpos contra el virus y estudiará la cronología de los eventos para ver si los felinos fueron una fuente de infección.
Con información de: Reuters
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