La Corte Suprema de Justicia (CSJ) de Guatemala decidió este lunes suspender la orden que revocaba el arresto domiciliario del periodista José Rubén Zamora, fundador del extinto diario El Periódico, evitando así su retorno a prisión.
“Seguiré cumpliendo con las medidas que se impusieron y esperaré en mi casa. Volveré a prisión si es necesario hasta que se haga justicia”, expresó Zamora al salir de la torre de tribunales.
La medida fue adoptada tras un recurso de amparo presentado por la defensa de Zamora, quien enfrenta un proceso judicial por supuesto lavado de dinero, ampliamente criticado por organismos internacionales.
La Cámara de Amparo y Antejuicio de la CSJ invalidó la resolución emitida en noviembre por una sala de apelaciones que buscaba devolver a Zamora a la cárcel. Jovita Tzul, abogada defensora, confirmó a la agencia de noticias AFP que el periodista “se queda en casa”, y descartó su traslado al penal donde estuvo recluido durante más de dos años.
El hijo del periodista, José Zamora, expresó desde Miami que esta decisión judicial representa un importante avance hacia la libertad de su padre. Por su parte, la organización Reporteros Sin Fronteras calificó la resolución como un “paso fundamental hacia la libertad total e incondicional” del periodista, de 68 años, quien fue detenido en julio de 2022 tras publicar denuncias de corrupción que involucraban al entonces presidente Alejandro Giammattei.
Zamora fue arrestado en un proceso que organismos internacionales han descrito como un ataque directo contra la libertad de prensa. Durante su detención, estuvo recluido en la prisión ubicada en el cuartel Mariscal Zavala, en el norte de Ciudad de Guatemala, hasta que obtuvo el arresto domiciliario en octubre de 2023.
Organizaciones internacionales, como la Sociedad Interamericana de Prensa (SIP), han presentado informes donde señalan que el proceso contra el periodista está plagado de inconsistencias y violaciones a su derecho de defensa.
La decisión de la sala de apelaciones, emitida en noviembre para revocar su arresto domiciliario, había sido condenada tanto por el actual presidente guatemalteco, Bernardo Arévalo, como por organizaciones internacionales de derechos humanos y prensa.
El proceso contra Zamora, basado en acusaciones de lavado de dinero, ha sido calificado por el propio periodista como una estrategia de “persecución política” y “terrorismo de Estado”.
Zamora ha sostenido que las autoridades guatemaltecas priorizan perseguir a figuras incómodas para el poder, mientras actúan con permisividad frente al narcotráfico y la corrupción.
Denuncias contra fiscales y querellantes
El caso es respaldado por la Fundación Contra el Terrorismo, una organización ultraderechista que actúa como querellante. Dicha fundación y los fiscales involucrados en el caso han sido señalados por Estados Unidos y la Unión Europea, que los han sancionado por prácticas consideradas corruptas y antidemocráticas.
El hijo de Zamora reconoció que, aunque la Fundación y la fiscalía puedan apelar esta decisión, se les complica mantener la persecución judicial contra su padre, quien ha insistido en su inocencia y su disposición de enfrentar el proceso tanto en arresto domiciliario como en prisión.
El arresto de Zamora ocurrió tras la publicación de investigaciones que implicaban a altos funcionarios del gobierno de Giammattei en actos de corrupción. Estas revelaciones contribuyeron al cierre de El Periódico en 2023, mientras su fundador permanecía en prisión.
La comunidad internacional ha denunciado este caso como un ejemplo de la creciente persecución contra periodistas y críticos en Guatemala.
Esta resolución de la CSJ no pone fin al proceso judicial contra Zamora, pero supone un alivio temporal para el periodista, cuya situación sigue siendo observada de cerca por defensores de los derechos humanos y la libertad de prensa a nivel global.
(Con información de EFE y AFP)