La directora general de Migración de Bolivia, Katherine Calderón, afirmó este miércoles que el gobierno de Chile no solicitó la extradición de Pablo Muñoz Hoffman, ex guerrillero chileno detenido y liberado en menos de un día en La Paz.
Calderón explicó que, aunque Muñoz contaba con una alerta roja de Interpol, esta notificación “no constituye un mecanismo de detención” bajo el sistema judicial boliviano.
En declaraciones al canal de televisión DTV, Calderón indicó que su despacho está verificando si el ex guerrillero enfrenta un proceso de extradición pendiente a través del Ministerio de Relaciones Exteriores y del Tribunal Supremo de Justicia (TSJ).
“Se identificó que la República de Chile no requirió la extradición al Estado Plurinacional de Bolivia de esta persona (Muñoz), por lo que no existen causas legales en el país para que sea presentado ante la autoridad competente”, declaró.
Por otro lado, Calderón aseguró a Unitel que, según su conocimiento, Muñoz “se encuentra en La Paz”, aunque precisó que la Policía debe determinar su ubicación exacta.
Este pronunciamiento representa la primera declaración oficial del gobierno de Luis Arce sobre el caso, después de días de especulación y silencio por parte de las autoridades bolivianas.
El caso salió a la luz luego de que los medios bolivianos Brújula Digital y La Prensa informaran el martes sobre la liberación de Muñoz tras su detención inicial por parte de la Interpol Bolivia.
Posteriormente, el canciller chileno, Alberto van Klaveren, confirmó los hechos y anunció que Chile activará los mecanismos necesarios para la extradición de Muñoz.
“Lo que hacemos como Cancillería es activar la petición de extradición, aunque esta corresponde al Poder Judicial. Por esa razón, ayer (martes) se ofició a la Corte Suprema para solicitar la detención y extradición de este individuo, considerando que estaba en Bolivia”, explicó Van Klaveren.
El lunes, agentes de Interpol en Bolivia interceptaron a Muñoz tras recibir una alerta que indicaba su presencia en el Consulado de Chile en La Paz.
Según el director nacional de la Interpol en Bolivia, Juan Carlos Bazoalto, al no contar con documentos, se revisaron sus registros migratorios, constatándose su ingreso irregular al país, además de una alerta roja internacional en su contra.
En ese momento, se procedió con su detención temporal, y se tenía previsto entregarlo a las autoridades chilenas en un punto fronterizo, algo que finalmente no ocurrió.
La jefa de Cooperación Internacional de la Policía de Investigaciones (PDI) de Chile, Carolina Namor, explicó que la liberación de Muñoz respondió a que Bolivia no reconoce las notificaciones rojas de Interpol como un mecanismo válido de detención.
Muñoz Hoffman, integrante del extinto grupo guerrillero Frente Patriótico Manuel Rodríguez (FPMR), es recordado por su participación en la llamada “fuga del siglo”.
El 30 de diciembre de 1996, junto a otros tres miembros del FPMR, escapó de la cárcel de Alta Seguridad de Santiago en un operativo con helicóptero que duró menos de un minuto.
Muñoz era el último de los cuatro ex guerrilleros cuyo paradero permanecía desconocido hasta ahora. Sus compañeros, Mauricio Hernández Norambuena, Ricardo Palma Salamanca y Patricio Ortiz Montenegro, fueron localizados o capturados previamente en otros países.
Este caso revive tensiones diplomáticas entre Bolivia y Chile, principalmente por la decisión de liberar a Muñoz sin proceder con su extradición.
(Con información de EFE)