El presidente Boric le pidió la renuncia a una de sus ministras por la fallida compra de la casa de Salvador Allende

Tras la ola de criticas que obligó al presidente Gabriel Boric a desistir de la compra de la casa del expresidente Salvador Allende en la comuna santiaguina de Providencia por parte del Estado para convertirla en museo, esta jornada el mandatario le pidió la renuncia a la ministra de Bienes Nacionales, Marcela Sandoval.

Cabe señalar que la noticia de la adquisición que beneficiaba a la ministra de Defensa, Maya Fernández, nieta del fallecido exmandatario y una de las dueñas de la vivienda - por un valor de $933 millones de pesos (USD 926 mil)- circuló el último día de 2024, pero apenas iniciado el año nuevo estalló el escándalo.

Ello, puesto que la Constitución establece que “durante el ejercicio de su cargo, los ministros estarán sujetos a la prohibición de celebrar o caucionar contratos con el Estado, actuar como abogados o mandatarios en cualquier clase de juicio o como procurador o agente en gestiones particulares de carácter administrativo, ser director de bancos o de alguna sociedad anónima y ejercer cargos de similar importancia en estas actividades”.

El asunto también salpicó a la senadora Isabel Allende (PS), otra de las dueñas de la casa ubicada en calle Guardia Vieja, ya que “cesará en el cargo el diputado o senador que durante su ejercicio celebrare o caucionare contratos con el Estado, o el que actuare como procurador o agente en gestiones particulares de carácter administrativo, en la provisión de empleos públicos, consejerías, funciones o comisiones de similar naturaleza”, según reza la Carta Magna chilena.

Debido a esto el Gobierno dio pie atrás y el presidente Boric señaló el sábado desde el Polo Sur que debido “a una incompatibilidad respecto de la estructura de propiedad de esa vivienda se decidió detener la compra, hasta que ese problema sea eventualmente solucionado (...) Nadie está buscando hacer ningún tipo de negocio, ni enriquecerse a costa del Estado. Eso jamás lo permitiría”, dijo enfático.

Los reproches a la compraventa arrecieron el fin de semana y el domingo el diputado de Renovación Nacional, Eduardo Durán, pidió derechamente la renuncia de ambas ministras, a quienes acusó de intentar burlar la Constitución “por un negocio”.

“Aquí más que un error es una falta a la fe pública, porque es un trámite que pasó por varias etapas de aprobación e igualmente se insistió con tal de favorecer a la ministra de Defensa, Maya Fernández”, sostuvo, según consignó ADN Radio.

“Las dos ministras debieran ser removidas o que renuncien por su actuar tratando de burlar la Constitución por un negocio. Una vez más, la promesa de superioridad moral del gobierno se cae a pedazos”, remató.

Este lunes, desde el ejecutivo señalaron mediante un comunicado de prensa que el Presidente “agradece el trabajo” de la ministra de Bienes Nacionales, Marcela Sandoval, e informaron que en su lugar asumirá el actual subsecretario de la misma cartera, Sebastián Vergara.

Minutos más tarde, la ministra vocera de Gobierno, Aisén Etcheverry explicó desde La Moneda que “es importante comprender que todas las acciones del Gobierno son objeto de una permanente evaluación. Se evalúan desde lo procedimental, desde lo legal, desde lo técnico y también desde lo político. La evaluación política le corresponde al Presidente de la República (...) Eso es todo lo que podemos decir”, según consignó Cooperativa.

“Es por eso que, con total transparencia, como Gobierno durante el fin de semana pudimos explicar cuál había sido ese proceso, cuáles son sus etapas, cuáles son las acciones que se tomaron”, aseguró.

El Gobierno chileno continuará, eso sí, con la compra dos propiedades contiguas en las que vivió el expresidente Patricio Aylwin (1990-1994), ubicadas en calle Arturo Medina, también en la comuna de Providencia.