Preocupación existe en el Gobierno y en la defensa de Manuel Monsalve tras una denuncia por amenazas de muerte al ex subsecretario en la cárcel de Rancagua, a la que ingresó este martes para cumplir prisión preventiva imputado por los delitos de violación y abuso sexual a una subalterna.
Aunque en un principio se habló solo de “improperios”, lo cierto es que “recabados todos los antecedentes, que darían cuenta de una presunta amenaza al imputado Manuel Monsalve, en circunstancias donde se encontraba en el área de salud del Complejo Penitenciario de Rancagua, la Institución presentó una denuncia ante el Ministerio Público para investigar los hechos”, señalaron en un escueto comunicado desde Gendarmería.
El ministro de Justicia, Jaime Gajardo, corroboró lo sucedido: “Tenemos antecedentes de que efectivamente hay una de denuncia, que está en investigación”. “Es una denuncia por presuntas amenazas que ocurrieron dentro de la zona médica de la unidad penal. Cada vez que ingresa un interno lo primero que se hace es pasar a la zona médica para hacer los controles y los chequeos respectivos, al parecer esos hechos ocurrieron dentro de esa zona”, detalló.
Sin embargo, la autoridad aseguró que “los antecedentes oficiales que dio a conocer el día de hoy (jueves) el director nacional de Gendarmería, después de una inspección técnica a ese establecimiento, es que es un establecimiento que se encuentra en plenas condiciones para resguardar la seguridad de cualquier persona que se encuentra ahí recluida”.
Varios medios confirmaron que la amenaza provino de Antonella Marchant (29), jefa del clan narco “Los Marchant”, apresada a fines de 2021 con 380 kilos de cocaína y más de USD 5 millones, quien le habría dicho, pasándose el dedo índice por el cuello: “Te voy a matar, violador conch...”.
Marchant era pareja de Sabrina Durán Montero (24), la “narcoreina” de Peñaflor, asesinada a balazos en octubre de 2023. Ambas se habían enamorado tras las rejas y mantuvieron una relación por al menos un año.
Los días de Monsalve en la cárcel
La defenestrada ex autoridad pasa sus días de encierro en el módulo 86, reservado para “primerizos” -reos sin antecedentes penales previos-, acusados por delitos con bajas penas o de índole sexual, y ocupa específicamente la celda 44, la misma donde estuvo 14 días el ex futbolista Jorge “Mago” Valdivia, acusado de dos delitos de violación.
En dicho módulo viven alrededor de 70 presos, entre ellos el ex alcalde de Rancagua, Juan Ramón Godoy -imputado por fraude al fisco-, y Eduardo Macaya, padre del senador UDI Javier Macaya, ya condenado por abuso sexual.
Según consignó El Mercurio, desde Gendarmería dijeron que hasta ahora había tenido una “estadía tranquila”, y que se estaba “adaptando al encierro”. Como suele suceder en estos casos, Monsalve mata las horas del día “jugando pimpón y entreteniéndose con algunos internos”.
Luego del desayuno, los internos salen de su encierro a las 9:00 horas, y suelen distenderse en el patio hasta las 18:00, hora en que deben volver a su calabozo. Monsalve comparte el suyo específicamente con un ex carabinero imputado también por violación y otra persona acusada de manejar bajo los efectos del alcohol.
Protesta de gendarmes
Esta jornada, desde el Gobierno confirmaron que tras cuatro días de negociaciones hubo acuerdo con Gendarmería de Chile, quienes habían iniciado una paralización nacional exigiendo una ley que regule reajustes salariales y ascensos. El jueves, funcionarios encendieron barricadas a la salida del penal de Rancagua, protestando contra la concesionaria de la cárcel y exigiendo mayores medidas de seguridad.
A modo de ejemplo, advirtieron que hace solo unos días varios internos lograron fugarse tras abrir una celda utilizando una cuchara, aunque luego fueron recapturados.