En la Cumbre Iberoamericana, Uruguay reiteró su compromiso con los principios democráticos y el respeto a los derechos humanos, destacando la importancia de estos valores en un mundo incierto y complejo. Durante su intervención, el vicecanciller uruguayo, Nicolás Albertoni, subrayó que sin democracias sólidas y apego al Estado de Derecho, es difícil imaginar un espacio iberoamericano seguro y estable.
Durante su intervención, subrayó la importancia de este foro como “un espacio sincero donde las distintas posiciones nacionales se transmiten, discuten y respetan”. Sin embargo, expresó una “profunda lamentación” por la ausencia de Venezuela en esta reunión, que trató sobre la “defensa de los valores democráticos”.
Según Albertoni, aunque estos foros pueden ser criticados por “una sensación de escasos resultados”, son espacios donde se puede hablar “de frente” a los otros países.
En relación a la situación política venezolana, Albertoni expresó su preocupación y urgencia al señalar que “es imperioso que retome la senda democrática”. Destacó que si el próximo 10 de enero no se realiza un traspaso de poder a un “candidato legítimamente electo”, el actual régimen podría consolidarse como “una nueva dictadura en nuestra región”.
El vicecanciller también reflexionó sobre las raíces compartidas entre las naciones iberoamericanas y enfatizó la necesidad de defender “los principios basados en el respeto a la democracia, el apego al Estado de Derecho y la defensa de los derechos humanos y las libertades fundamentales”. Para Albertoni, estos valores son esenciales, aunque no todos los países de la región han logrado alcanzarlos de manera plena.
Dijo también que sin “democracias sólidas y apego al Estado de Derecho, difícilmente se podrá soñar con un espacio iberoamericano seguro, estable y menos desigual”.
Este miércoles, el Ministerio de Relaciones Exteriores de Uruguay ha emitido una recomendación a la población para que, a la luz de la “situación imperante” en Venezuela, traten de evitar o en todo caso posponer sus viajes a la nación caribeña ante el riesgo de verse involucrados en incidentes.
La diplomacia uruguaya ha subrayado en un comunicado que “la realidad actual venezolana está caracterizada por impedimentos a la libre circulación de las personas”, así como “profusos casos de detenciones arbitrarias y secuestros por parte de las autoridades y de colectivos organizados no estatales”.
“Actualmente, se desconoce el paradero de un ciudadano uruguayo, residente en Estados Unidos, del que se tuvo noticias de su detención al ingresar a territorio venezolano el 19 de octubre pasado, y sobre cuya situación aún no se ha recibido información oficial pese a las reiteradas solicitudes”, han añadido.
Así las cosas, las autoridades uruguayas han tenido en cuenta “esta realidad” para advertir de la “gran incertidumbre sobre el estado actual” del citado ciudadano uruguayo y para alertar al resto de la población sobre la falta de garantías de seguridad en caso de que viajen a territorio de Venezuela.
A todo esto hay que sumarle la decisión del régimen de Nicolás Maduro de expulsar a los diplomáticos uruguayos de Venezuela a finales del pasado mes de julio, poco después de que Maduro reivindicara su victoria en las elecciones presidenciales del país en medio de denuncias de fraude por parte de la oposición.
(Con información de EFE)
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