A un mes de haberse anunciado un mandamiento de aprehensión contra Evo Morales, la orden aún no ha sido ejecutada.
El ex presidente de Bolivia enfrenta varios procesos penales, pero hay uno puede llevarlo a la cárcel en el corto plazo. El 26 de septiembre, la Fiscalía Departamental de Tarija (al sur del país) reabrió una investigación que lo acusa de trata de personas y estupro. Según documentación oficial, Morales habría tenido una hija con una adolescedente el año 2016, a la que registraron dos años más tarde en un registro civil de la localidad de Yacuiba, fronteriza con Argentina, y cuya partida de nacimiento constituye la prueba del delito. La víctima tenía 15 años y él 57 cuando ocurrió el presunto embarazo.
Hasta ahora, ni Morales ni nadie de su entorno ha negado la comisión del delito y han acusado al Gobierno de estar detrás con el objetivo de eliminarlo del escenario político mediante la manipulación de la justicia.
La Fiscalía había emitido una orden de captura a finales de septiembre por este caso, pero quedó sin efecto luego de que los abogados del líder cocalero interpusieran un recurso para lograr su anulación. Sin embargo, la investigación continuó su curso y el 10 de octubre, Morales fue convocado a la Fiscalía para brindar su declaración. En su lugar llegó su abogado, Jorge Pérez, que presentó un memorial y justificó la ausencia de su defendido al decir que no habían garantías.
Ese mismo día, la fiscal a cargo del caso, Sandra Gutiérrez, informó que ante su inasistencia se emitiría un nuevo mandamiento de aprehensión. “La ley así lo ordena, sea Evo Morales, sea Juan Pérez la ley es absolutamente para todos y nosotros estamos trabajando en lo que corresponde conforme a ley. Lo que corresponde es sacar el mandamiento de aprehensión ya que ellos han sido notificados sin que se haya vulnerado sus derechos”, manifestó ante los medios la fiscal Gutiérrez.
A más de un mes de esa declaración, no se conoce que se haya emitido ninguna orden contra el expresidente. Este lunes, Gutiérrez informó que la investigación sigue su curso y que se tienen suficientes indicios que vinculan al exmandatario con la adolescente.
“No vamos a parar con esta investigación, siempre el Ministerio Público ha actuado de manera objetiva, apegado a la ley y vamos a presentar lo que corresponda”, afirmó en conferencia de prensa.
La fiscal también anticipó que habrán “sorpresas”. “Como Ministerio Público seguimos firmes en esta investigación y en cualquier momento, nosotros vamos a darles la sorpresa a todos ustedes”, manifestó.
En la denuncia también se acusa a los padres de la víctima por supuesta complicidad y haberse beneficiado con cargos públicos durante la vinculación del ex presidente con su hija. El padre cumple detención preventiva en la cárcel de Morros Blancos (Tarija), mientras que el paradero de la víctima y su madre se desconoce, el abogado de ambas informó que están en el país pero las autoridades creen que pueden haber escapado a Argentina.
Además de este proceso, el líder cocalero enfrenta otros que fueron abiertos a finales de septiembre, cuando realizó una marcha desde la localidad de Caracollo (Oruro) hacia La Paz en protesta contra el Gobierno. Morales y su equipo jurídico califican estos procesos como una “campaña de lawfare”, como un acto más de la disputa por el control del partido y el poder del Estado que lo tiene enfrentado con el presidente Luis Arce, su antiguo ministro y delfín político.