La Alianza para el Desarrollo en Democracia (ADD), conformada por Costa Rica, República Dominicana, Panamá y Ecuador, destacó este viernes la importancia de que Brasil asuma un papel decisivo en la búsqueda de una salida a la crisis venezolana tras el fraude electoral perpetrado por el régimen de Nicolás Maduro el pasado 28 de julio.
“Pensamos que Brasil puede ejercer un rol muy, muy trascendental, por su peso específico dentro del continente”, expresó Javier Martínez-Acha, ministro de Relaciones Exteriores de Panamá, en una conferencia conjunta con sus homólogos de Costa Rica, Arnoldo André Tinoco, de Ecuador, Gabriela Sommerfeld, y de República Dominicana, Roberto Álvarez.
Según Martínez-Acha, el presidente brasileño Luiz Inácio Lula da Silva tiene la capacidad de influir en el proceso debido a su posición dentro de la izquierda latinoamericana, especialmente ahora que “los aliados al señor Maduro se le están acabando”.
El ministro subrayó que la crisis en Venezuela ha unido a los países democráticos del continente, más allá de sus ideologías, en la defensa de la democracia.
Durante el encuentro en Panamá, los cancilleres de la ADD también se reunieron con los opositores venezolanos Rafael de la Cruz y David Smolanski, a quienes ratificaron su apoyo a la democracia y a la defensa de los derechos humanos en Venezuela.
“No podemos abandonar a Venezuela y esa es una afirmación que los cuatro cancilleres aquí presentes defendemos”, afirmó Martínez-Acha, añadiendo que su deseo es que el pueblo venezolano recupere la paz y encuentre un camino para una transición política pacífica.
El próximo 10 de enero de 2025 es la fecha en que debería asumir el nuevo gobierno venezolano, tras las elecciones presidenciales del 28 de julio. En esos comicios, el Consejo Nacional Electoral de Venezuela, controlado por la dictadura, proclamó como ganador a Nicolás Maduro.
Sin embargo, el resultado fue impugnado por la Plataforma Unitaria Democrática (PUD), la coalición opositora venezolana que asegura que el vencedor fue Edmundo González Urrutia, exiliado en España desde el 8 de septiembre tras una orden de captura en su contra emitida por el régimen. Este resultado fue respaldado por el Tribunal Supremo de Justicia de Venezuela, pero es rechazado por gran parte de la oposición venezolana y algunos gobiernos de la región.
El ministro de Exteriores panameño aprovechó para reconocer la valentía de la líder opositora venezolana María Corina Machado, de quien destacó su lucha a favor de la democracia en el país. Según Martínez-Acha, Machado “se está jugando la vida por la democracia de todo un pueblo, de los hermanos de Venezuela”.
Los mandatarios de Brasil y Colombia, Luiz Inácio Lula da Silva y Gustavo Petro, respectivamente, tampoco han reconocido los resultados de los comicios venezolanos. Ambos han condicionado su postura a la publicación de las actas electorales, algo que hasta ahora el régimen de Nicolás Maduro no ha cumplido.
El opositor venezolano Rafael de la Cruz valoró la postura de Brasil y Colombia de ofrecerse como mediadores en un eventual proceso de transición y expresó su gratitud por la posición de ambos países de “no reconocer el fraude que trató de hacer Maduro y al mismo tiempo de ofrecerse como mediadores para una negociación que deberíamos de tener entre venezolanos”.
Según el opositor, esto se alinea con el llamado a la transición pacífica que tanto él como otros representantes de la oposición han venido defendiendo.
De esta forma, la Alianza para el Desarrollo en Democracia reafirmó su compromiso con el pueblo venezolano y llamó a una solución diplomática y pacífica para que el próximo 10 de enero se respete la voluntad expresada en las urnas.
(Con información de EFE)