Comunarios del área rural del departamento de Santa Cruz realizaron una marcha de diez días en “defensa del territorio”, afectado por los incendios, y en reclamo de acciones contra los avasallamientos de tierra.
Sin embargo, tras no conseguir la presencia del director del Instituto Nacional de Reforma Agraria (INRA), Eulogio Núñez, ni del director de la Autoridad de Bosques y Tierra (ABT), Luis Flores, para que escuchen sus demandas, tomaron instituciones públicas en el municipio de San Ignacio de Velasco e iniciaron un bloqueo en la carretera Biocéanica que a las pocas horas entró “en cuarto intermedio”.
La decisión del bloqueo fue tomada en una asamblea en la que participaron representantes de varias comunidades. Este martes, el presidente del Comité Cívico Interprovincial, Marcelo Méndez, manifestó: “Exigimos que se tomen acciones efectivas para evitar que sigan incrementando los incendios forestales y que se detengan los avasallamientos en nuestras tierras”.
Anteriormente hubo otra marcha que partió de la localidad de Pailón hasta Santa Cruz de la Sierra, en un recorrido de 53 kilómetros que duró cinco días. Tras llegar a la capital, los marchistas hicieron una vigilia de más de un mes en la plaza central de la ciudad para demandar atención a sus reclamos: acciones contra los incendios forestales y reversión de algunas determinaciones del INRA que, según denuncian, otorga tierras a personas ajenas a las comunidades.
Ante la ausencia de respuestas, los marchistas salieron con la intención de realizar bloqueos y advirtieron que desalojarán a los avasalladores, según reporta el diario El Deber.
Los indígenas de las tierras bajas de Bolivia protestan por la desatención de los incendios forestales provocados que consumieron más de 10 millones de hectáreas entre junio y octubre, la mayoría concentrados en la región chiquitana de Santa Cruz. Pese al trabajo de los bomberos voluntarios, la cooperación internacional y las acciones del Gobierno, que algunos actores han considerado tardías, el desastre ambiental solo ha sido mitigado con la lluvia.
Por otro lado, reclaman el control de asentamientos ilegales en sus territorios, un problema creciente en Bolivia que también ha sido vinculado con la expansión del fuego.
Actores detrás de los incendios
Según la Fundación Tierra, hay principalmente dos causales detrás de los incendios forestales provocados y una de ellas tienen que ver con la toma ilegal de tierras.
La primera responde a los intereses gubernamentales de ampliar la frontera agrícola y pecuaria. “Hay una correlación directa entre la expansión del modelo del agronegocio en el oriente, el incremento paulatino de la deforestación y el agravamiento de los incendios en el país, todo esto apuntalado por la flexibilización de normas ambientales e instauración de políticas que facilitan el desmonte y la quema”, señala una publicación del organismo.
La segunda causal tiene que ver con las políticas de distribución de tierras, que se han aplicado buscando favorecer intereses sectoriales pero que a la larga “han degenerado en situaciones fuera de control e incluso ilegales, como los avasallamientos de tierras, los asentamientos ilícitos, y la quema de bosques sin permiso para ‘justificar’ apropiaciones de tierras”.
Para la organización ambiental, el agente movilizador de la deforestacion y los incendios es el modelo de producción agropecuaria. Los avasallamientos de tierra y las quemas ilegales están directamente relacioandas con el modelo, porque luego esas tierras se siembran con monocultivos o se alquilan o venden al sector agroindustrial.