La muerte de un bebé de un año, que quedó en medio de una balacera entre bandas narcos, generó conmoción en Uruguay. El niño estaba con su madre en su casa del barrio Cerro Norte –una zona periférica de Montevideo– cuando comenzaron a llover los disparos desde un auto que pasaba por la zona. El bebé recibió tres impactos de bala y fue trasladado por su padre hasta el Hospital del Cerro, donde murió a los minutos. La mujer, en tanto, también fue alcanzada por los disparos y está internada en grave estado.
Este episodio siguió sumando elementos que agrandaron esa conmoción. La primera persona imputada por este homicidio fue un adolescente de 14 años, que se entregó ante las autoridades. Y ahora se sumó otro menor de edad (de 17) que fue imputado por la Justicia por estar vinculado al crimen.
El segundo adolescente fue detenido en la madrugada del martes. A ambos se los imputó por una “infracción gravísima tipificada como un delito complejo especial y muy especialmente agravado de homicidios”, informó El Observador. Para este joven se dispuso una medida socio educativa de privación de libertad en el centro de menores Inisa (Instituto Nacional de Inclusión Social Adolescente). Estará allí hasta que se conozca la condena definitiva.
La fiscal Mirna Busich tiene un plazo de un mes para presentar la acusación porque se trata de un adolescente. Además del delito vinculado al homicidio, se le imputaron otros tres: tráfico de armas de fuego, lesiones graves y disparos de armas de fuego.
El joven fue detenido por efectivos de la Guardia Republicana que estaban realizando patrullaje en el Cerro Norte, una zona en la que, por el recrudecimiento de la violencia, se ha aumentado la presencia policial. El joven intentó huir de los funcionarios pero fue alcanzado. En una primera instancia presentó datos de identidad falsos, pero los efectivos policiales recurrieron a un sistema que permite reconocer a las personas detenidas.
Mientras esperaban la llegada de la ayuda policial para identificarlo, el joven se resignó. “Ya perdí”, sostuvo, y dio su verdadero nombre.
El trasfondo de la pelea del sábado era el enfrentamiento entre la banda de Los Colorados –que es relativamente nueva en la zona y le disputa el mercado de la droga a los vendedores tradicionales– con grupo formado por la familia de Los Suárez, una organización con más años de experiencia delictiva.
La banda de Los Colorados y la de Los Suárez operan a poca distancia y se pelean por el dominio del territorio para vender droga. La cercanía convirtió a Cerro Norte en un lugar de homicidios y balaceras, y en una de las zonas más intervenidas por el Ministerio del Interior, que ha realizado varios megaoperativos en el barrio.
En el ataque de este sábado también resultó herida la madre del bebé fallecido y esposa del líder de Los Colorados, quien era el objetivo de los atacantes. Este grupo criminal respondió el ataque en el mismo momento y por eso quedaron las marcas de los disparos en distintos lugares del barrio. Se encontraron en la escena unos 40 casquillos de balas.
Axel Joel Mattos tiene 23 años y es el líder de la banda. Los investigadores aseguran que el grupo tiene el respaldo de traficantes brasileño. La madre del bebé fallecido, en tanto, es hermana de otro de los integrantes de la banda.
Uno de los integrantes de Los Colorados dio un testimonio anónimo al noticiero Telemundo. “Mirá lo que me hicieron los perros del Beto (Suárez)”, dijo el hombre, mientras mostraba las heridas que tenía en sus manos y en el pecho. Contó que su madre también había sido víctima de disparos y que él había sido agredido por la policía. “Nos tenemos que estar cuidando de los perros del Beto y los Albines (otro grupo criminal) y encima también de los botones”, relató.