Después de una intervención policial de varias horas en la localidad de Epizana (Cochabamba) para levantar un punto de bloqueo, los seguidores de Evo Morales reinstalaron en la madrugada el piquete utilizando ramas y piedras para interrumpir la circulación de vehículos.
A las 8:45 de este jueves, en el cuarto día consecutivo de protestas, sumaban diez cortes en las carreteras que conectan Cochabamba con el oriente y occidente del país, según el reporte de transitabilidad de la Administradora Boliviana de Carreteras (ABC).
La medida de presión ha ido tomando fuerza. Inició el lunes con cuatro cortes de carretera y este jueves se registran diez. “Hasta el lunes se va a cerrar el país. Se va a masificar (el bloqueo) en Parotani, que es el punto más fuerte a nivel nacional. Luego, se hará en Potosí, Ventilla, Caracollo, La Paz y en todos los rincones del país”, anticipó el dirigente campesino Pedro Llanque, citado por el diario Opinión.
Una de las principales motivaciones de la protesta tiene que ver con el respaldo a Evo Morales ante un proceso de estupro y trata de personas por el cual podría ser aprehendido y enviado a prisión. La Fiscalía lo investiga por un supuesto caso de abuso sexual a una menor de edad en el año 2015, con quien habría tenido una hija el año siguiente. El ex mandatario fue convocado a declarar en la ciudad de Tarija (al sur de Bolivia) el 10 de octubre pero no se presentó. En su lugar llegó un abogado para presentar un memorial y justificar la ausencia de su defendido, alegando irregularidades en el proceso y falta de garantías.
Ante su inasistencia, la fiscal que lleva el caso, Sandra Gutiérrez, manifestó que lo que corresponde es emitir una orden de captura. Sin embargo, a una semana de no haberse presentado, no se conoce públicamente que el documento haya sido emitido.
Por la posibilidad de su aprehensión, sus seguidores anunciaron bloqueos a nivel nacional pero solo han cercado a un departamento en el que se encuentra el trópico cocalero, principal bastión político de Morales.
El senador y dirigente cocalero Leonardo Loza exigió en una rueda de prensa que se retiren los procesos penales contra Evo Morales “si es que quieren que se levanten los bloqueos en el país”.
Los manifestantes también exigen el cumplimiento de un amplio listado de demandas sindicales sobre temas económicos, como solución al tema del dólar y el abastecimiento combustible, y políticos, como que se habilite a Evo Morales como candidato a las elecciones de 2025 y se valide un congreso del Movimiento Al Socialismo (MAS) en el que se lo ratificó como principal dirigente del partido.
Después de haber sido convocados a dialogar con el Gobierno, los bloqueadores incluyeron una serie de condiciones para la negociación, entre ellas que el encuentro se realice en uno de los piquetes y que el Gobierno se comprometa a derogar un decreto que establece una pausa ambiental en medio de la emergencia por incendios forestales que han consumido diez millones de hectáreas en menos de cinco meses.
Caso de trata y estupro
La Policía ha detenido de manera preventiva en la cárcel de Morros Blancos, en Tarija, al padre de la supuesta víctima de Evo Morales, acusado de haber actuado en complicidad para obtener beneficios políticos de la vinculación entre su hija y el ex presidente.
La Fiscalía también investiga a la madre de la víctima, quien ocupó cargos en la función pública durante la gestión de Evo Morales y durante el tiempo en el que presuntamente éste abusaba de su hija, pero no fue encontrada para citarla a declarar. La Policía no descarta que ambas mujeres hayan salido del país.
En tanto, Evo Morales, el principal acusado en este caso, no ha negado la comisión del delito. Consultado por un periodista ha respondido: “No se metan con la familia”. Tanto él como su defensa afirman que este caso, y otros siete abiertos en su contra en un plazo de dos semanas, son parte de una campaña de lawfare por parte del Gobierno para eliminarlo de la política en medio de la crisis interna del MAS y con miras a las elecciones de 2025.