Un violento intento de asalto a un vehículo blindado del Banco Central del Ecuador ocurrió la mañana del 9 de octubre en el kilómetro 90 de la vía Cuenca-Molleturo-El Empalme. El ataque dejó un custodio muerto y ocho personas heridas, incluyendo un trabajador de un restaurante cercano. Las víctimas fueron trasladadas a distintos centros de salud para recibir atención médica.
Los conductores que transitaban por la zona describieron el suceso, ocurrido el miércoles, como una “escena de película”, según indicó Primicias. El convoy, que salió de Guayaquil alrededor de las 9:30 con destino a la sucursal del Banco Central en Cuenca, estaba compuesto por cinco vehículos y 12 custodios. Sin embargo, al llegar al sector Tamarindo, fue emboscado por un grupo de más de 20 delincuentes armados con fusiles y explosivos. Los atacantes, que se desplazaban en volquetas y camionetas, bloquearon la vía y chocaron contra los vehículos del convoy, intentando detenerlos para efectuar el asalto.
En medio de la balacera, el conductor del blindado, que estaba ubicado en la mitad del convoy, realizó una maniobra decisiva para evitar el robo. De acuerdo con declaraciones recogidas por Primicias, el comandante de la Zona 6 de la Policía Nacional, José Vargas Alzamora, indicó que cuando los delincuentes abrieron fuego, el conductor “alcanzó a escapar” del lugar y, bajo fuego cruzado, logró retroceder y dirigirse de vuelta hacia Guayaquil. Su rápida reacción fue clave para impedir que los delincuentes se llevaran el dinero.
La vía Cuenca-Molleturo-El Empalme es una carretera clave que conecta la ciudad de Cuenca, en la región andina de Ecuador, con la zona costera, específicamente con Guayaquil. La carretera es conocida por ser una peligrosa debido a su geografía. A lo largo del trayecto, la vía pasa por zonas montañosas, con curvas pronunciadas, deslizamientos de tierra frecuentes y condiciones climáticas que pueden variar significativamente, desde neblina espesa en las partes altas hasta lluvias intensas en la región costera. El sector de Tamarindo, donde ocurrió el reciente intento de asalto al convoy, es una de las zonas más críticas en términos de seguridad vial y ha sido testigo de varios incidentes, tanto por causas naturales como por la acción de grupos delincuenciales.
El Banco Central del Ecuador (BCE), en un comunicado, destacó la valentía del conductor y del equipo de seguridad, afirmando que su “heroica actuación” fue fundamental para frustrar el intento de asalto. “Gracias a la valiente y oportuna reacción del equipo de seguridad del BCE, se impidió el robo de las especies monetarias”, subrayó la institución. A pesar del violento ataque, el blindado logró escapar sin que los delincuentes accedieran a los valores transportados.
La Fiscalía General del Estado, que tomó control de la investigación, informó que durante las primeras diligencias se encontró un total de 12 vehículos involucrados en la escena del crimen, algunos de ellos utilizados por los delincuentes. Asimismo, la Fiscalía confirmó que se realizó la detonación controlada de tres granadas que los atacantes dejaron en el lugar.
Según la Policía Nacional, los delincuentes huyeron en tres camionetas: una Ford 150 y dos D-Max, abandonando en el lugar las volquetas utilizadas para bloquear el paso del convoy, una de estas incendiada. Aunque se informó sobre la retención de siete personas en las inmediaciones del ataque, la Fiscalía aclaró que no hay detenidos relacionados directamente con el intento de asalto.
Las investigaciones continúan, y las autoridades han intensificado la búsqueda de los responsables, utilizando incluso drones para tratar de localizar los vehículos en los que escaparon los asaltantes. La vía Cuenca-Molleturo-El Empalme fue cerrada al tráfico desde el mediodía del 9 de octubre hasta la madrugada del jueves 10 para permitir las diligencias correspondientes.
El Banco Central del Ecuador aseguró que cooperará con la Fiscalía General para esclarecer este “hecho atroz” y para que se capture a los responsables. La entidad agradeció a la Policía Nacional y al Ejército por su intervención oportuna y subrayó que trabajaron coordinadamente para “garantizar el resguardo de los valores monetarios”.