Prisión preventiva para un padre y su pareja acusados de matar a una niña de dos años en Chile

Conmocionada se encuentra la tranquila comuna de La Calera (115 kms al noroeste de Santiago), tras conocerse la noticia del fallecimiento de una pequeña de solo dos años, a manos de su padre y la pareja de éste. La niña llegó sin signos vitales el pasado 28 de septiembre al hospital local con varias lesiones que daban cuenta de un maltrato reiterado, pero fue un traumatismo encefalocraneano lo que finalmente le causó la muerte.

Este martes, el Juzgado de Garantía de La Calera decretó prisión preventiva para J.A.A.V. y K.J.F.C., el padre y su pareja. El primero fue imputado por el delito de parricidio, mientras que la madrastra de la niña fue acusada de homicidio calificado.

Según informó el jefe de la Brigada de Homicidios de Valparaíso de la PDI, Freddy Espinoza, la menor, de nacionalidad chilena, presentaba al momento de ser ingresada al Hospital de La Calera “diversas lesiones en distintas partes, obviamente por la acción de terceras personas”, según consigna una nota de Meganoticias.

El subprefecto Espinoza señaló que de inmediato se pudo colegir “la participación de la pareja del padre de la menor, por lo cual, en conjunto al Ministerio Público, pasan a control de detención el padre, por parricidio, y la madrastra, por homicidio”.

“Estos antecedentes fueron posteriormente confirmados con la autopsia respectiva, en la cual se establecen las mismas lesiones detectadas por los detectives de la Brigada de Homicidios”, detalló.

Finalmente, la autoridad policial agregó que la investigación aún sigue su curso, a fin de establecer la verdadera responsabilidad de cada uno de los acusados por este terrible hecho.

Durante la formalización, la fiscal Javiera Beltrán puso a disposición del tribunal diversas pruebas - entre fotografías y testimonios de testigos -, que demostraron que la infortunada niña era víctima de violencia reiterada por parte ambos imputados.

“Existen datos de atención de urgencia, desde agosto del presente año, que dan cuenta de que la niña habría sido llevada y se le habrían constatado lesiones previamente (...) Se cuenta también con declaraciones de los abuelos de la niña, quienes renunciaron a su derecho a guardar silencio, que refirieron que la niña presentaba lesiones que según su padre respondían a caídas. El Ministerio Público cuenta también con declaraciones de una vecina de la imputada, que la habría visto saliendo de su departamento con la niña en sus brazos, tapada, vio un bulto, lo que coincide con el lugar y la hora de los hechos”, señaló, según reza una nota de Emol.

Ante la evidencia, el juez Roberto Lizana ordenó de inmediato la prisión preventiva para los acusados y, más importante aún, dio por acreditada su responsabilidad en las diversas laceraciones y contusiones que presentaba la menor. También se concluyó la causa precisa de su muerte: un traumatismo encefalocraneano.

“Evidentemente por los crímenes que se están atribuyendo, el bien jurídico que se lesionó, la clara indefensión en que estuvo la víctima por largo tiempo, el contexto en que ocurrieron los hechos, las lesiones provocadas a la niña que pudieron ser advertidas por el tribunal y que presentaba en gran parte de su cuerpo, hacen pensar que efectivamente la conducta de los imputados podría reiterarse en el medio libre y, en consecuencia, es razonable pensar que la libertad de ambos imputados constituye peligro para la seguridad de la sociedad”, sostuvo el juez Lizana.

Finalmente, el magistrado indicó que “se da cuenta de violencia crónica, violencia sostenida por parte de los adultos en perjuicio de la infante, quien además, como lo ha señalado el Ministerio Público y es de toda lógica pensar, no tuvo ninguna opción o posibilidad de ejercer defensa”.