Nada de bien cayó en la comunidad judía chilena la cita de este lunes entre el presidente Gabriel Boric y su par palestino, Mahmud Abbas, al inicio de la 79° Asamblea General de las Naciones Unidas que se celebra en Nueva York. Mediante un comunicado de prensa, fustigaron al mandatario chileno y lo instaron a pedir la liberación de los rehenes que aún mantiene Hamas.
“Nos preocupa que el presidente Gabriel Boric, quien se ha presentado como un defensor de la paz y de los derechos humanos, se reúna en privado con Mahmud Abbas, líder de la Autoridad Palestina, cuyo gobierno apoya y premia abiertamente el terrorismo”, partieron señalando en el documento.
“Mientras el Gobierno de Chile supuestamente condena cualquier forma de violencia, decide sentarse a conversar con un líder que, apenas meses después de la masacre perpetrada por Hamás en Israel el 7 de octubre pasado, firmara un acuerdo con esta misma organización”, acusaron.
“Esperamos que en esta reunión, el presidente Gabriel Boric sea coherente con su discurso de defensa de los derechos humanos y ponga sobre la mesa la urgente necesidad de liberar a los más de cien israelíes secuestrados”, prosiguieron.
“De más está decir que no hay objeción en que el Presidente busque fortalecer relaciones internacionales o discutir temas de política exterior. Sin embargo, si Chile realmente quiere contribuir a la paz en Medio Oriente, debe dejar la condescendencia cómplice con Hamás y Hezbolá, que lo único que logra es dejar la causa Palestina capturada por el fundamentalismo islámico en manos de Irán y sus proxys”, sostuvieron.
“Por su parte, lo que ratifica el Presidente mediante esta reunión, es que no defiende “principios” sino que ha tomado un bando, perjudicando abiertamente las relaciones exteriores de Chile y su estrategia de defensa”, adujeron.
“A los chilenos nos preocupa especialmente la actividad de grupos terroristas en nuestro territorio. Existe información sobre la presencia de Hezbolá en América Latina, organización terrorista vinculada a Irán y Hamás, que representa una amenaza directa para la estabilidad en la región, y que plantea serias preocupaciones y dudas sobre la seguridad nacional”, recalcaron.
“Ignorar los peligros reales que representan las alianzas con grupos terroristas en nuestra región no solo es una muestra de incoherencia, sino también un error estratégico que pone en entredicho el compromiso de Chile con la paz, la justicia y la seguridad, tanto dentro como fuera de sus fronteras. No olvidemos el episodio del caso de los aviones venezolanos- iraníes en Chile”, remataron.
Qué dijo el Gobierno
El ministro de Relaciones Exteriores chileno, Alberto van Klaveren - quien dicho sea de paso es de ascendencia judía -, señaló por su parte desde Nueva York que “en esa carta se incluyen aseveraciones muy injustas”.
Según el canciller, “el Presidente Abbas ha apoyado siempre la solución de dos Estados y en esa materia hay una coincidencia absoluta con la posición de Chile. Chile adhiere totalmente a una solución de dos Estados que puedan vivir en paz con frontera segura en ambos casos, y frontera obviamente internacionalmente reconocida”, consignó Emol.
Sin embargo, “en esa carta se incluyen aseveraciones muy injustas sobre todo respecto de la posición de Chile frente a Hamas. Chile condenó en los términos más enérgicos las acciones terroristas cometidas por Hamas el día 7 de octubre en territorio israelí y apoya con toda su fuerza también la causa de la liberación de los rehenes israelíes que permanecen en manos de terroristas de Hamas”.
“Esa ha sido la posición de Chile y la verdad es que creemos que la comunidad judía debería tomar en consideración esa posición”, subrayó.
Tocante al supuesto pacto que, según la comunidad, Abbas habría hecho con Hamas, van Klaveren sostuvo que “no sé muy bien a qué se refiere eso. El presidente Abbas es un Presidente reconocido por una mayoría de estados en el sistema internacional. Muy recientemente diversos países europeos reconocieron también al Estado Palestino y obviamente a su cabeza que es el presidente Abbas”.
“Nadie podría calificar al Presidente Abbas como un partidario del terrorismo. Sería realmente muy injusto decir eso y por eso no compartimos esa apreciación”, finalizó.