La crisis interna del Movimiento Al Socialismo (MAS) está golpeando la institucionalidad en Bolivia. Este miércoles, la Asamblea Legislativa Plurinacional amaneció cercada con una vigilia de seguidores del presidente Luis Arce que exigen a los legisladores -de la oposición y el evismo- la aprobación de créditos internacionales que darían un respiro a la crisis económica que atraviesa el país.
Este martes una marcha encabezada por la Central Obrera Boliviana (COB), cuya dirigencia es afín al Gobierno y no goza de la legitimidad unánime de las bases, llegó hasta la Plaza Murillo y terminó en golpes con seguidores de Evo Morales. En medio de la medida de presión, la Cámara de Diputados convocó a una sesión para este jueves 12 de septiembre y apuntó en la orden del día el tratamiento de dos créditos.
El primer proyecto de ley corresponde “a la aprobación del contrato de préstamo para el Programa Boliviano de Administración de Tierras para el Desarrollo Rural Sustentable, suscrito el 23 de mayo de este año entre el Estado boliviano y el Banco Interamericano de Desarrollo – BID, por un monto de 40.000.000 dólares”.
El segundo proyecto de ley es el referido al préstamo para el Programa Nacional de Emergencia para la Generación de Empleo, suscrito el 10 de mayo de este año, entre el Estado boliviano y el Fondo Financiero para el Desarrollo de la Cuenca del Plata (Fonplata), por un monto de 100.000.000 dólares.
Sin embargo, no son los únicos créditos que están pendientes en la Asamblea. Arce informó que son doce por un valor total de 1.076.760.000 dólares y calificó la falta de tratamiento de estas leyes como un “boicot” a su gestión y dijo que es una de las causas de la falta de dólares en el país.
La madrugada de este miércoles se observó a varios grupos de trabajadores apostados en inmediaciones de la Asamblea Legislativa que tiraban petardos y mostraban pancartas en las que exigían la aprobación de las leyes. Uno de los voceros informó que la instrucción de la COB es permanecer en vigilia indefinida “hasta la aprobación de los créditos”. En la puerta de la Asamblea había resguardo policial de la Unidad Táctica de Operaciones Policiales.
Legisladores de la oposición y el ala evista del MAS rechazaron la presión de los seguidores del presidente y han indicado que no darán curso a los proyectos. El diputado Renán Cabezas expresó que no aprobarán los créditos internacionales mientras no se aclare el manejo y destino de los recursos. “No vamos a aprobar leyes económicas si el presidente no rinde cuentas, no le explica al pueblo boliviano y a los representantes del pueblo qué destino han tenido estos recursos, cómo se están utilizando, dónde se están utilizando. Por ello debemos señalar de forma firme y clara: no nos van a obligar a levantar la mano”.
De igual manera, el jefe de bancada de Comunidad Ciudadana Enrique Urquidi manifestó que no se aprobarán leyes que sigan endeudando al país y apuntó contra Juan Carlos Huarachi, dirigente de la COB: “a punta de carajazos aquí no nos van a manejar (…) aquí nos van a respetar, le guste o no, la Asamblea Legislativa es el corazón de la democracia”.
La tensión política se puede incrementar en los próximos días con una marcha a La Paz anunciada por el presidente del MAS, Evo Morales, el 17 de septiembre y un bloque de caminos para octubre.