En nueve meses de mandato, los choques entre el presidente de Ecuador, Daniel Noboa, y su vicepresidenta, Verónica Abad, se cuentan por montones. Lo que empezó como una sospecha de distanciamiento entre ambos desde la campaña quedó confirmado apenas asumieron el cargo y Noboa decidió encargarle a Abad la representación diplomática de Ecuador en Israel. Desde entonces, el mandatario ha sido enfático en que busca maneras de evitar que Abad lo reemplace cuando él deba hacer campaña para las elecciones del 2025. A eso se suman las vocerías gubernamentales y oficialistas que han calificado a Abad de corrupta, mal agradecida y desleal, entre otros. Ahora, Abad ha denunciado a Noboa y a otros miembros del gabinete ante el Tribunal Contencioso Electoral por violencia política de género y ha pedido varias sanciones, incluyendo la destitución y la pérdida de derechos políticos. Pero ¿cómo inició todo?
Infobae reconstruyó la línea de tiempo de esta ruptura que inició mucho antes de que siquiera Noboa se presentara como un candidato con posibilidades de triunfo. Para lograr armar las piezas del rompecabezas se consultó material de archivo de las entrevistas que Noboa y Abad realizaron como candidatos, se conversó con fuentes reservadas, cuyas versiones se verificaron y contrastaron con los acontecimientos que son de dominio público, declaraciones de Noboa y Abad en el ejercicio de sus cargos, ruedas de prensa, documentos y comunicados oficiales. Este medio pidió comentarios a la Secretaría de Comunicación de la Presidencia, liderada por Irene Vélez. El pedido, que fue ingresado por la dirección de gestión documental de la Presidencia al Quipux –el sistema de gestión documental oficial del Ecuador–, no ha sido respondido hasta el cierre de esta edición.
La llamada
La vida política de Daniel Noboa inició con su elección como legislador. Noboa logró una curul apoyado por el Movimiento Ecuatoriano Unido y su periodo empezó en mayo de 2021. Como asambleísta fue presidente de la comisión de Desarrollo Económico. Su despacho estaba en Quito, la capital del Ecuador y sede del poder político.
Por su parte, Verónica Abad hasta el 2022 era directora en Azuay del Movimiento Amigo, con el cual se postuló a la alcaldía de Cuenca, en el sur del país en las elecciones municipales de febrero de 2023. Entonces quedó séptima entre nueve postulantes. Abad, según ella misma ha relatado en múltiples entrevistas, estuvo vinculada siempre a organizaciones de la sociedad civil en temas de emprendimiento.
Noboa y Abad se conocieron en algún momento del 2021. Una fuente cercana a Abad, que conversó con Infobae para este reportaje y que pidió la reserva de su identidad, contó que Noboa, en calidad de asambleísta, mantuvo reuniones y diálogos con Abad. Coincidían, dijo la fuente, en su visión acerca del emprendimiento.
En una entrevista con Ecuavisa, el 13 de junio del 2023, Abad dijo que se conocía con Noboa “hace aproximadamente 2 años”. Esta afirmación concuerda con el relato de que ambos empezaron su relación política/profesional mientras él era legislador. Asimismo, en un perfil publicado por Plan V en agosto del 2023, Abad señaló que: “A Daniel (Noboa) le llamó la atención que una mujer pueda romper un sistema, porque no ganamos la alcaldía pero quebramos el núcleo, el alcalde ganó apenas con 10 puntos más”. Además, indicó que “han estado más cercanos desde la presencia de Noboa en la última Asamblea... y así surgieron las primeras conversaciones sobre una posible candidatura”.
El 17 de mayo de 2023, el ex presidente de Ecuador, Guillermo Lasso, disolvió el congreso y convocó a elecciones anticipadas. Uno de los primeros políticos en anunciar su precandidatura, aunque sin partido, fue Daniel Noboa. Para el 24 de mayo, el movimiento Pueblo, Igualdad y Democracia (PID) ya había hecho público su respaldo a la candidatura y el 28 de mayo se sumaba a la alianza MOVER, el antiguo Alianza PAIS que apoyó a Rafael Correa. El 2 de junio, Noboa y Abad fueron los primeros en inscribir oficialmente su candidatura, el 9 de junio el Consejo Electoral aprobó la inscripción.
Un día clave entre el 28 de mayo y el 2 de junio, fue el 1 de junio, cuando se celebraron las primarias de la alianza auspiciante de Noboa. Mientras el proceso de democracia interna se realizaba, Noboa habría llamado a Verónica Abad para proponerle la candidatura a la Vicepresidencia, según contó la fuente que habló con Infobae. Abad ya había confirmado en una entrevista con este medio que fue Noboa quien la buscó para que ella fuera su binomio, pero entonces no dio más detalles. Ahora la fuente reservada reveló que fue todo tan rápido, que la aceptación de Abad fue inmediata y “enseguida viajó de Cuenca a Quito para la aceptación de la postulación” ante la autoridad electoral.
Si se lee entre líneas, esa llamada se convertiría en el principio del fin para Abad, pues según ella relata en la denuncia por violencia política de género que presentó contra Noboa: “Aceptar la candidatura a la Vicepresidencia de la República, y haber ganado la elección ha sido una condena para mí, en mi condición de mujer, en mi condición de madre y en mi condición de política...”.
La primera vuelta
Con la inscripción de las candidaturas, ambos políticos empezaron a aparecer en medios de comunicación y delinear cómo sería la campaña. Según se recopila en varias entrevistas de junio de 2023, Verónica Abad iba a encargarse del sector social. Así lo decía Noboa y lo repetía Abad.
Aunque un año después del inicio de ese periodo electoral, Noboa ha dicho que su vice “solita va a caer”. Antes, la calificaba como una “mujer leal”. Por ejemplo, el 7 de junio de 2023, en una entrevista con Radio Sucre, cuando le preguntaron por qué escogió a Abad como binomio, Noboa dijo: “Ha sido una mujer ejemplar. Siempre ha ayudado a la gente, siempre ha hecho obra social y (es) una persona seria y leal”. Diez días después, en Diario Correo, Noboa contó: “A Verónica Abad la conozco desde hace algunos años. Siempre ha tenido esa vocación de trabajo social, ese trabajo con las comunidades (de) mujeres emprendedoras, más que nada en el Azuay y en Sierra Centro”. Pero entonces, también aseguró: “Creo que era una mujer idónea para el puesto” (sic.).
Aún como candidato, Daniel Noboa no era muy cercano a los medios de comunicación y en las entrevistas que brindó, en pocas se le pregunta sobre Abad.
En lo que respecta a la campaña, Abad, una mujer de la Sierra ecuatoriana, se encargaría de esa región del país para movilizar al electorado, mientras que Daniel Noboa, que ha vivido en Guayaquil, haría la campaña, principalmente, en las provincias del litoral. Abad tenía un “grupo de voluntarios” para la campaña, además de una persona del equipo de Noboa que fue designada para apoyar en la comunicación de la entonces candidata: “Solo nos impuso una persona de comunicación... Era más como una espía porque todas las fotos y videos que tomaba nunca los publicaban en las redes sociales”, contó a Infobae una persona del equipo de campaña de Abad que pidió que no se mencionara su nombre.
Conforme avanzaba la campaña, relató la persona del equipo de Abad, poco a poco se le fueron quitando jurisdicciones a Abad para que acudiera y realizara actos proselitistas. Luego tras el magnicidio del candidato presidencial Fernando Villavicencio y con el debate, celebrado el 13 de agosto, Noboa subió considerablemente en las encuestas: “Noboa pasó del 2% al 20% luego del debate obligatorio”, dijo Álvaro Merchante, de la consultora Comunicaliza a Expreso. Fue entonces cuando Noboa, que ya estaba distante con Abad, mostró un cambió abrupto: “Ya había distanciamiento. Antes del debate sé que Verónica le envió una carta a Daniel invitándolo a la reflexión”, dijo la fuente.
Pese a que nadie lo notó, Noboa y Abad ya no aparecieron en el cierre de campaña de la primera vuelta. De los ocho binomios, cuatro cerraron la campaña juntos. Dos no hicieron ningún evento y, además de Noboa, el candidato Jan Topic apareció sin Diana Jácome, entonces su candidata a vice y ahora asesora de Daniel Noboa. Ese 17 de agosto de 2023, Noboa cerró su campaña en Durán. Mientras él recorría un sector de la ciudad hubo una balacera. Aunque no se consideró un atentado directo contra él, el hecho tuvo gran cobertura, pues sucedía a pocos días del asesinato de Villavicencio. Ese mismo día, en Cuenca a 186 kilómetros, Abad por su cuenta hacía un mitin, del cual tuvo que ser evacuada por la seguridad que la acompañaba pues había la amenaza de un atentado, del que no se prestó atención.
Tras ser considerado la sorpresa de las elecciones, Noboa accedió al balotaje. Luego de esa primera victoria y por insistencia de Abad, Noboa le concedió “una entrevista” en su residencia en Guayaquil. Al edificio llegó Abad acompañada por su escolta policial y su equipo, pero en la puerta les informaron que solo ella podía ingresar. La persona del equipo de Abad que habló con Infobae y que acompañó entonces a Abad dijo no poder confirmar qué sucedió en esa reunión pero aseguró que la vicepresidenta “salió descompuesta” tras hablar con Noboa. La fuente supone que en esa reunión se le dijo a Abad que se fuera del país.
En la segunda vuelta, Abad empezó a recibir mayor atención y sus comentarios sobre el feminismo, el papel del Estado, entre otros, fueron cuestionados. Según un reportaje de Ecuavisa, publicado el 27 de noviembre de 2023, Noboa “reaccionó enviándola (a Abad) a Estados Unidos y Europa para que hiciera campaña con los migrantes. Era la primera manifestación de que no la quería cerca”.
El triunfo, la ruptura y el destierro
Daniel Noboa se impuso en las urnas ante la correísta Luisa González. El flamante presidente recibió los resultados en su casa en Olón. Mientras que Verónica Abad estaba en Quito, en el centro de control del Consejo Nacional Electoral. Que no estuvieran juntos entonces levantó las primeras sospechas en la opinión pública de que estaban distanciados. Esto se acrecentó cuando en el evento de entrega de credenciales Noboa dijo: “El camino hacia la Presidencia también tiene traiciones, muchas veces de gente que uno ni siquiera espera”. En ese acto, Noboa se mostró frío con Abad, mientras que ella aplaudía y sonreía, como si nada ocurriera.
El 23 de noviembre fue el cambio de mando, Noboa tomó juramento en el congreso. Por esos días, en redes sociales, se especuló que Abad había pedido la mitad de invitaciones al evento para ella. Días después Abad desmentiría públicamente aquello y revelaría que solo le dieron nueve de las 100 invitaciones que le correspondían. Una de las fuentes que conversó con Infobae aseguró que aquel día fue difícil el ingreso a la Asamblea Nacional y que los padres de la vicepresidenta “casi se quedan fuera” del evento.
Luego del juramento, en el Palacio de Carondelet se esperaba a Noboa con un almuerzo de bienvenida. Abad no asistió y almorzó en un mercado de Quito. La vicepresidenta aseguró que “nadie la invitó”. Entonces, fuentes de la Cancillería dijeron a Infobae que era “imposible” que la vicemandataria no haya sido invitada al almuerzo de bienvenida en la sede del gobierno. Por el nivel logístico desplegado en el mercado se evidenció que no fue un almuerzo improvisado, pero oficialmente nunca se emitió un pronunciamiento al respecto.
Horas después de los dos almuerzos, Abad apareció en Carondelet. Protocolarmente el vicepresidente siempre está presente en la firma de los primeros decretos del Presidente, que son para posicionar a su gabinete. Sin embargo, un funcionario del gobierno saliente relató a Infobae que fue el equipo de protocolo de la Presidencia de Lasso fue quien invitó, a través de una llamada telefónica, a Abad para que acudiera al Palacio.
En la foto oficial del presidente y su gabinete, Abad no apareció. Luego llegó el decreto 27 asignándole como única función “colaborar en calidad de Embajadora en nombre del Ecuador por la paz para evitar el escalamiento del conflicto entre Israel y Palestina”. Sin embargo, como ese cargo es inexistente en la carrera diplomática, Noboa tuvo que corregir la designación con el decreto 61 donde se la nombró: “Embajadora Extraordinaria y Plenipotenciaria de la República del Ecuador ante el Estado de Israel”.
Con la disposición, Abad rompió el silencio y dijo que Noboa “no la quiere cerca”, que el equipo del presidente “la mandó a callar” y que se oponía a la alianza del oficialismo con el correísmo y el partido Social Cristiano en la Legislatura.
Una de las teorías de la ruptura entre ambos es por un problema con el manejo de fondos de campaña. El 28 de noviembre de 2023, en una rueda de prensa, Abad aseguró: “Mienten como siempre con cosas que no tienen relevancia, como que he cogido fondos de campaña y que ahora tengo autos nuevos y que a mi familia le he puesto autos nuevos y etcétera”. Al revisar las declaraciones patrimoniales ingresadas por Abad en la Contraloría, la vicepresidenta no tiene vehículos o propiedades a su nombres.
El ministro de Gobierno, ex secretario de la Administración y hombre de confianza del presidente, Arturo Félix Wong, dijo a El Universo, el 17 de junio del 2024, que ciertos empresarios contaron a Noboa que Abad “ha recibido dinero a nombre nuestro y eso nunca lo pedimos, nunca lo solicitamos y nunca lo solicitaremos tampoco”. Wong aseguró que no hay ningún conflicto personal y que “cuando ya te enteras de eso, tú tienes que poner un stop y decir, si esto pasa ahora, ¿qué pasaría en funciones? Entonces, tienes que cuidar a tu gobierno”. El 7 de agosto de 2024, ante la Comisión que investiga irregularidades en contra de la Administración Pública, Abad dijo que lo dicho por Wong es “mentira” y que es una “calumnia” en su contra.
El 10 de diciembre de 2023, Abad se mudó a Israel y desde entonces ejerce funciones como diplomática. En sus entrevistas ha relatado que enviarla a un lugar donde se vive un conflicto armado es “un destierro”, ha pedido que la Asamblea se pronuncie ante el autoritarismo de Noboa y ha dicho temer por su vida. Además, ha asegurado que el Caso Nene, por el que investigan a su hijo por tráfico de influencias y por el cual se la investigará cuando no esté en funciones, es otra forma de persecución en su contra.
Desde que Abad se fue, tanto Noboa como sus ministros han dejado claro que el mandatario no quiere que la vicepresidenta lo reemplace mientras él hace campaña para elegirse para un periodo completo en el 2025.
En el último comunicado firmado por Noboa y emitido luego de la presentación de la denuncia de Abad ante el Tribunal Contencioso Electoral, el presidente acusó a la vice de querer “al Presidente de la República fuera del poder, para que ella asuma ese cargo. Si quedaba alguna duda de sus intenciones, hoy al fin se le cayó la máscara”. Aunque el comunicado argumenta que Abad tendría alianzas con partidos políticos como el correísmo, la Constitución del Ecuador establece que la única función del vicepresidente es reemplazar al presidente. Además, el Código de la Democracia, que norma las elecciones, indica que no se puede ser funcionario público y candidato, por lo que se debe pedir una licencia. Pese a ello, y como lo confirma su último pronunciamiento, Noboa no está dispuesto a dejar que Abad ocupe la silla presidencial. Esa pugna, por el momento, es el clímax de la pelea inconclusa entre un binomio desconocido que logró la Presidencia del Ecuador por una casualidad.