18 personas fueron detenidas durante el transcurso del fin de semana por su presunta participación en un espectacular atraco a la oficina de la empresa de transporte de valores Brinks, ubicada en Rancagua (90 kms al sur de Santiago), ocurrido el viernes pasado. La banda quemó varios vehículos para distraer la atención de la policía y a pesar de que ni la empresa ni las autoridades han dado una cifra oficial, trascendió que lograron un botín de unos $25 mil millones (alrededor de USD 27 millones), dinero que aún no ha sido recuperado.
El atraco quedó registrado en cámaras de seguridad e incluso fue grabado por vecinos de la sucursal. En su huida, cuatro ladrones fueron heridos al enfrentarse a balazos con la policía, y dos de ellos están en estado grave en el Hospital de dicha ciudad. La ciudad vivió un verdadero shock con calles cortadas, autos incendiándose en diversos sectores y sirenas sonando por doquier.
La ministra del Interior, Carolina Tohá, señaló que “lo que asaltaron es una oficina de la empresa que se dedica al traslado de valores. Sacaron una cantidad que todavía no ha sido informada de la empresa, pero se sabe que es una cantidad alta”, según reza una nota de BíoBíoChile.
Todos los detenidos fueron identificados, son de nacionalidad chilena y su formalización se amplió hasta este martes a las 10:00 am. Tohá, sin embargo, dijo que otros participantes del atraco aún se encuentran prófugos.
“Quiero recordar que esta banda tiene otros participantes que todavía no se detienen y todavía no podemos descartar quiénes sean esas personas ni sus nacionalidades”, aseguró.
Dos trabajadores de la empresa detenidos
Los últimos en caer - hasta ahora - fueron un guardia de seguridad de la empresa (el sábado) y una cajera. Según indicó el fiscal jefe de la Unidad de Análisis Criminal de la zona, Carlos Fuentes, “en la revisión de algunos de los antecedentes, principalmente teléfonos, aparece una foto donde están algunos de los imputados reunidos días previos al delito y aparece esta mujer que hoy día (domingo) pasó a control de detención”.
“No se descarta en ningún caso que ella haya entregado información importante, de hecho es todo lo contrario, esa es la línea de investigación respecto de ella”, agregó el persecutor.
El fiscal jefe de Rancagua, Claudio Meneses, explicó la figura legal por la cual serán imputados: “En principio, lo que tenemos es un delito de robo con intimidación, tenencia ilegal de arma de fuego, tenencia ilegal de municiones también y un robo de intimidación al momento de robar un vehículo en la huida de estos sujetos”.
Pelucas y armamento pesado
Tras la primera jornada de formalización -este sábado -, desde el Ministerio Público dieron a conocer nuevos detalles sobre cómo se planificó el cinematográfico golpe y las armas incautadas. El mismo fiscal Fuentes sostuvo en un punto de prensa que el robo “viene siendo planificado hace un par de meses. Por eso la cantidad de detalles, tanto de entrada y de salida”, según consignó CHV noticias.
El persecutor explicó que “para despistar sobre todo a las cámaras lejanas, los primeros sujetos que entraron estaban vestidos con el mismo color de vestimenta de las cajeras o tesoreras, y además se pusieron pelucas para que justamente con las cámaras de lejos no pudieran ser identificados”.
Fuentes aseguró que la investigación se mantiene abierta, a fin de “determinar si los que están hoy día sentados en el tribunal son todos o no. Tengo la conciencia clara de que de los que están acá, hay un par que son los que idearon esto y los que, además, reclutaron gente, creemos que podrían haberse dado la fuga uno o dos en principio”, remató.