A mediados de la semana pasada, la ex presidenta Michelle Bachelet volvió con todo a la arena política chilena, al arengar a los postulantes a alcaldes del oficialismo para las próximas elecciones municipales de octubre, en un encuentro organizado por la fundación que preside, Horizonte Ciudadano.
Y es que a pesar de que ha dicho hasta el cansancio que no piensa postularse a un tercer período presidencial, lo cierto es que la ex Comisionada de las Naciones Unidas, casi sin moverse de su escritorio, ya se ubica segunda en todas las encuestas presidenciales, por debajo de la alcaldesa de derecha Evelyn Matthei y compitiendo palmo a palmo con el líder republicano, Juan Antonio Kast.
La última entrega de Cadem, el domingo pasado, así lo confirmó: según el sondeo, si las elecciones presidenciales fueran ahora y no en noviembre de 2025, la ex mandataria empataría con el líder republicano José Antonio Kast en el segundo lugar (11%), y quedaría solo 4 puntos por debajo de la alcaldesa de Providencia, Evelyn Matthei, en caso de posible segunda vuelta (49% vs 45%).
Matthei continúa a la cabeza de las preferencias espontáneas, con un 21%. Sin embargo, Bachelet ha crecido de 4% a 11% desde abril a la fecha, y alcanza también un 61% de imagen positiva, su nivel más alto en diez años.
La ofensiva
Así las cosas, Bachelet - quien es médica - pasó un cambio y se apersonó, con una semana de diferencia, en la inauguración de dos centros de salud que fueron bautizados con su nombre en Santiago: uno junto a la alcaldesa de esa comuna, Irací Hassler, y otro junto al edil de la comuna de Maipú, Tomás Vodanovic.
Dichas apariciones de la otrora jefa de Estado, cortando cintas y dando con una sonrisa de oreja a oreja discursos y declaraciones a la prensa, saltaron las alarmas de la oposición, pero sobre todo de Republicanos y la Unión Demócrata Independiente (UDI), puesto que hasta ahora ningún político del oficialismo se perfilaba como una figura verdaderamente competitiva contra Matthei.
El primero en tomar la ofensiva fue su más cercano contendor, Juan Antonio Kast, quien el pasado lunes, en medio de la gira para promocionar las candidaturas de su partido a las elecciones municipales de octubre próximo, aseguró tajante que la ex mandataria “es la gran responsable de la destrucción en el país”.
“Tiene que hacerse cargo de los múltiples desastres que dejó su gobierno y el grave daño que provocó a los chilenos. En cada área de la acción de un Gobierno el sello de destrucción y estancamiento de Chile tiene nombre y apellido: Michelle Bachelet”, fustigó el líder republicano.
“La izquierda no ha sido capaz de generar nuevos liderazgos y por esa incapacidad se asoma la ex presidenta Michelle Bachelet como la única candidata, luego de 10 años de su elección”, afirmó.
La estrategia de la derecha
La oposición tomó entonces la ofensiva y lanzó sus dardos por la prensa, a fin de neutralizar la buena racha de la ex presidenta. ¿Su estrategia?: criticar las actividades en que participa, torpedear las reformas emblemáticas de su administración, cuestionar su labor como Alta Comisionada de las Naciones Unidas respecto a Venezuela - y su relación con Hugo Chávez y Maduro - y, por último, enrostrarle los problemas judiciales de su hijo, Sebastián Dávalos.
El martes, la UDI anunció que presentarán un oficio a la Contraloría General de la República (CGR), ligado a la ex mandataria, en el que pedirán se investigue un posible intervencionismo electoral del gobierno de Gabriel Boric y el eventual mal uso de recursos públicos.
Al respecto, el diputado Juan Antonio Coloma señaló que “es evidente que el gobierno está completamente desatado en campaña electoral y de la peor forma, que es jugando con las expectativas de los chilenos para apoyar a los candidatos de izquierda que van a la reelección. Estamos oficiando a la Contraloría para que actualice el instructivo de prescindencia y buen uso de los recursos públicos”.
Al día siguiente, desde el Partido Republicano, también arremetieron contra Bachelet cuyos gobiernos, dijeron en un punto de prensa, dejaron “graves consecuencias para el país”.
Stephan Schubert, jefe de la bancada, sostuvo que “la vamos a confrontar directamente para que se haga cargo del grave daño político, económico y social que ha sufrido el país desde que ella asumió en el Gobierno”.
Ese miércoles, los diputados de Renovación Nacional instaron también a Bachelet a renunciar a la dieta vitalicia que le corresponde por ser ex presidenta, en caso de que asuma ser candidata.
“Si ella ha tomado la decisión de ser candidata, entonces tiene el deber moral de decir ‘suspendo esta remuneración’. Pero lo que no es posible es usufructuar de remuneración pagada con fondos de los chilenos, bajo esta idea de que ella no es candidata. Yo le pido a la expresidenta Bachelet más sinceridad con los chilenos”, anotó el diputado Diego Schalper.
La arremetida de Matthei
Finalmente, tras la andanada de la oposición en pleno, la alcaldesa Evelyn Matthei saltó al ruedo y calificó en un punto de prensa de “descaradas” las intervenciones de Michelle Bachelet en ambos centros de salud, tildando todo el asunto como un “festival de inauguraciones”.
“Esto ha sido tan descarado, que yo lo que quisiera señalar es que, una cosa es si hay intervencionismo o no, lo que puede ser sancionado por ley, eso lo verá la Contraloría. Pero lo que nadie duda es que ha sido de muy mal gusto.”
La edil criticó los límites éticos de la ex presidenta y remató: “Espero que no se gaste la plata de todos los chilenos en hacer intervencionismo electoral.”
La defensa desde el oficialismo
Tras sus dichos, desde el oficialismo salieron a respaldar a Michelle Bachelet en barra. El diputado Leonardo Soto (PS), aseguró que “la ultraderecha y Kast están en estado de shock y al borde de un ataque de nervios. Cada vez que Bachelet declara que no quiere ser candidata, sube su apoyo ciudadano como figura presidencial semana a semana”, según consignó La Tercera.
El senador Jaime Quintana (PPD), razonó por su parte que “Bachelet no es funcionaria pública. Por lo tanto, no tiene inhabilidad alguna, y puede hablar cuándo y dónde quiera (...). Hay una preocupación de sectores de la oposición por el cariño que la gente demuestra y expresa hacia Bachelet (...). Ella está haciendo lo que ha hecho siempre: colaborar con la unidad, apoyar candidaturas”.
Finalmente, el diputado Daniel Melo, jefe de la bancada socialista, opinó: “Yo creo que la derecha y la extrema derecha está completamente nerviosa con el alza sostenida que ha tenido la ex presidenta Michelle Bachelet en cada una de las encuestas. Lo que trata la derecha es enlodar a la ex mandataria”.
Qué dijo Bachelet
Hasta ahora, las únicas declaraciones que ha dado Bachelet fueron a principios de semana, tras conocerse los resultados de la encuesta Cadem que la posicionó segunda en la carrera presidencial. Luego de su participación en el ciclo “Mujer y Política”, en la Universidad Adolfo Ibáñez, la ex mandataria aseguró que, al menos por ahora, no piensa postularse como candidata.
“Yo ando en otra en la vida. En lo que estoy dedicada es a contribuir a la unidad en las fuerzas del progresismo. Porque como no estoy en política activa (…) lo que quiero es contribuir a que el país mejore”, aseguró.
Qué dicen los analistas políticos
Tocante a las reales posibilidades de que Michelle Bachelet se convierta por tercera vez en presidenta de Chile, la profesora de la Facultad de Gobierno de la Universidad de Chile, Verónica Figueroa Huencho, señaló en conversación con Diario UChile que la ex mandataria “ha sabido unificar a la izquierda en los momentos de crisis. Ha sabido dialogar, ha estado muy presente y, en algún minuto, las propias figuras importantes del Frente Amplio o de la coalición actual, también la convocaron. Por lo tanto, creo que ella representa una templanza y una certeza que es lo que necesita el país en este momento”.
Enfrentada a Evelyn Matthei, Figueroa Huencho sostuvo que “ambas tienen historias que se cruzan, pero también bien distintas. La historia de Evelyn Matthei está vinculada a la dictadura, a la derecha conservadora, a la UDI, está vinculada también a lo que ella ha entendido por agenda de género, por la agenda de derechos humanos. Y por otra parte, también está Michelle Bachelet con una historia totalmente contraria, que ha estado en la ONU, que ha tenido una representación internacional, que representa a una mujer de izquierda, además también por su historia familiar: una tradición vinculada a los derechos humanos”.
“Entre ambas, claramente la figura de Michelle Bachelet resulta mucho más atractiva a una amplia mayoría, porque también recordemos que en los últimos tiempos el tema de los consensos ha sido importante (...) Si hubiese una campaña entre ambas, Evelyn Matthei va a tener que extremar su posición cuando hablamos de seguridad u otros temas que están en la palestra”, apuntó al citado medio.
Por otra parte, el director de la escuela de Gobierno y Comunicaciones de la Universidad Central, Marco Moreno, planteó en conversación con BíoBíoChile que Bachelet “lo que hace es bloquear otros posibles liderazgos que puedan estar instalándose” en la izquierda, por lo que recomendó no “sobrexponerse y adelantarse, demasiado tiempo le juega en contra”.
Respecto a Evelyn Matthei, Moreno se mostró cauto ya que “podrían haber sorpresas en ese sector. José Antonio Kast sí va a ser candidato, pero en la oposición, vamos a ver si finalmente Matthei llega a la primaria”.
“Es un escenario abierto. En la medición aparece amenazando Michellet Bachelet a Evelyn Matthei (...) Un muy buen elemento para la discusión va a ser el resultado electoral de las elecciones municipales de octubre”, remató el analista.