La exministra de Salud de Bolivia, Eidy Roca, se encuentra conectada a un respirador y en fase terminal de una enfermedad que le ha imposibilitado el habla. Aún en esas condiciones, fue citada este miércoles a una audiencia virtual en la que se la acusa por el caso de los respiradores comprados con sobreprecio durante la pandemia, una adquisición que inició antes de su gestión.
“No la pueden juzgar sin que ella entienda los actos de la audiencia. Estaría violándose su derecho a la defensa, no habría igualdad procesal, lo que vulnera sus derechos constitucionales”, mencionó la abogada de Eidy Roca, citada por el periódico boliviano Opinión.
“Debe vivir los últimos días en paz. Además, la defensa técnica trabaja en coordinación con su cliente para poder hablar, argumentar, negar hechos, etcétera; y ella no puede hablar, no entiende por la enfermedad, es imposible que pueda defenderse”, manifestó por su parte la hermana de la exministra.
Roca padece una enfermedad denominada Esclerosis Lateral Amiotrofica (ELA) y demencia frontotemporal agramatical. Estas enfermedades le han causado impedimento del habla y debilidad física progresiva, al punto de haber perdido la capacidad de movimiento y respiración.
En esas circunstancias sus familiares, políticos y líderes de opinión en Bolivia, han pedido que por razones humanitarias, al encontrarse en etapa terminal, sea separada del proceso.
La expresidenta interina, Jeanine Añez, escribió desde la prisión en su cuenta de X: “Prueben, señores jueces, una pizca de humanidad y por una vez hagan valer los derechos humanos, la Constitución y tratados internacionales, y no las órdenes políticas del régimen del MAS. Maria Eidy Roca es inocente y se está muriendo. Respeten su integridad, déjenla vivir en paz”.
Cuando inició el debilitamiento de sus funciones debido al a enfermedad, la exministra solicitó que se le autorice viajar a Argentina para recibir tratamientos médicos paliativos. Si bien fue autorizada, tuvo que sortear dificultades relacionadas con retrasos y trámites de desarraigo temporal, lo que le ocasionó inconvenientes como pérdidas de vuelo y retraso en el acceso a la salud, según reportes de la prensa local.
Roca y otros exfuncionarios del Gobierno de Añez son investigados por la compra con sobreprecio de 324 respiradores chinos durante la emergencia por el Covid-19. En octubre de 2023, el Ministerio Público presentó una acusación por contratos lesivos al Estado, conducta antieconómica, incumplimiento de deberes y delitos contra la salud pública.
Sin embargo, los respiradores no fueron adquiridos durante su gestión. Tras el arribo del primer lote de respiradores y luego de que se destapara el escándalo de sobreprecio, el entonces ministro de Salud, Marcelo Navajas, renunció al cargo y asumió Roca.
En febrero de 2021, Eidy Roca manifestó: “Mi persona no participó en el proceso de contratación de los respiradores, pues en el mes de abril (de 2020) cumplía funciones en la dirección de promoción de salud”.
No obstante, la Fiscalía consideró que tenía pruebas suficientes para procesarla y en abril de 2021 la Justicia dictaminó detención domiciliaria, una fianza de 70 mil bolivianos (cerca de 10.000 dólares), arraigo, presentación ante la Fiscalía cada viernes y prohibición de trabajo.