El ministro de la Defensa de Venezuela, el general Vladimir Padrino, reafirmó este martes la lealtad de las Fuerzas Armadas hacia el presidente Nicolás Maduro. Esta declaración se produjo justo un día después de que los líderes opositores solicitaran a los militares respetar los resultados electorales y alinearse con el pueblo venezolano.
“Rechazamos contundentemente los desesperados y sediciosos planteamientos contenidos en un escrito publicado en redes sociales”, dijo Padrino al leer un comunicado del alto mando militar y policial en este país caribeño.
Padrino, acompañado del alto mando militar y jefes policiales, se expresó mediante un mensaje transmitido por la televisora estatal, condenando los llamados de la oposición como “fatuos e irracionales”.
“Estos fatuos e irracionales llamados persiguen resquebrajar nuestra unidad e institucionalidad, pero jamás lo lograrán. Ratificamos nuestra absoluta lealtad al ciudadano Nicolás Maduro Moros”, enfatizó Padrino. Asimismo, afirmó que estos llamados buscaban fracturar la unidad e institucionalidad de las fuerzas militares, pero sin éxito alguno.
La oposición, encabezada por María Corina Machado y Edmundo González, declaró el martes haber obtenido más de siete millones de votos en las elecciones presidenciales, contrastando con los 3,3 millones de sufragios que aseguran logró Maduro.
Los opositores publicaron copias de las papeletas de 30.000 máquinas de votación en un sitio web para respaldar sus afirmaciones.
El gobierno venezolano también ha confirmado que posee copias de esas actas, aunque hasta el momento ni el gobierno ni el Consejo Nacional Electoral (CNE) han divulgado esta información. Notablemente, la página web del CNE está caída desde la madrugada del lunes 29 de julio, justo después del cierre de los comicios.
Machado y González difundieron el lunes una carta en redes sociales instando a las fuerzas armadas a que respeten la voluntad del voto popular.
La líder opositora, impedida de inscribirse como candidata por una prohibición del Tribunal Supremo, apareció en un video con un fervoroso mensaje hacia los simpatizantes opositores, incentivándoles a mantenerse firmes y continuar su lucha en las calles.
“El miedo no nos va a paralizar”, expresó, añadiendo que seguirán afrontando y superando los desafíos sin abandonar la movilización ciudadana.
En contraposición, Padrino, quien ha estado al frente del Ministerio de Defensa por una década y ha sido sancionado por Estados Unidos, articuló su rechazo hacia las acciones opositoras. La figura central del aparato militar de Maduro desempeña un papel clave en mantener la cohesión y control sobre las Fuerzas Armadas, un factor determinante para la estabilidad del régimen, según varios analistas.
El actual escenario político en Venezuela refleja una profunda polarización y tensión social. A pesar de las acusaciones de fraude y manipulaciones electorales por parte de sectores opositores y observadores internacionales, Maduro sigue contando con un respaldo significativo de las fuerzas militares, una institución tradicionalmente vinculada al poder político en el país.
El contexto electoral lleva consigo un trasfondo de crisis económica y social que exacerban la situación. Según reportes del Banco Mundial, Venezuela enfrenta una de las peores crisis humanitarias y económicas del mundo, con hiperinflación, escasez de alimentos y medicinas, y un colapso generalizado de los servicios básicos.
La legitimidad del proceso electoral y la posición de las Fuerzas Armadas seguirán siendo aspectos cruciales en la evolución de la crisis venezolana. Las declaraciones de Padrino no solo reflejan una reafirmación de lealtad a Maduro, sino también un mensaje de cohesión interna, buscando contrarrestar cualquier indicio de fractura dentro de las filas castrenses.
Mientras tanto, líderes opositores como Machado continúan buscando maneras de resaltar las presuntas irregularidades electorales y mover la opinión pública, tanto nacional como internacional, para ejercer presión sobre el régimen.
Esta situación abre varias incógnitas sobre el futuro inmediato de Venezuela. La capacidad de la oposición para movilizar a la ciudadanía y mantener la presión, así como la respuesta del gobierno de Maduro y su control del aparato militar y de seguridad, serán determinantes para los próximos desarrollos.
Aunque las acciones opositoras y los llamados a las Fuerzas Armadas han sido categóricamente rechazados por Padrino y el alto mando militar, el conflicto político está lejos de resolverse, y las tensiones siguen siendo altas.
Las estrategias y decisiones que tomen ambas partes en las próximas semanas y meses podrían definir significativamente el rumbo del país en medio de esta profunda crisis.
(Con información de Reuters)