Luego de tres meses de intensas pesquisas, la Fiscalía de La Araucanía informó este lunes la detención de tres sospechosos del cruento asesinato de tres carabineros, quienes fueron acribillados con sus propias armas a fines de abril pasado en la comuna de Cañete (635 kms al sur de Santiago), y cuyos cuerpos calcinados fueron encontrados en el pickup de la camioneta en que se trasladaban.
Los allanamientos se efectuaron la madrugada del lunes tanto en Cañete como en Santiago y gracias a ellos se detuvo a los hermanos Jefferson Alexander Antihuen Santi (19) y Felipe Antonio Antihuen Santi (29), además de Nicolás Rivas Paillao (19), sindicados como los presuntos responsables del crimen de los carabineros Sergio Arévalo, Carlos Cisternas y Misael Vidal, el 27 de abril.
Otro hermano, identificado como Damián Antihuen Santi, logró escapar y se encuentra prófugo, por lo que es intensamente buscado por Carabineros.
De acuerdo a antecedentes de la investigación, los Antihuen Santi fueron quienes asesinaron a los uniformados, cuando estos llegaron hasta el portón de su tío Carlos Antihuen Riquelme a verificar el cumplimiento de su arresto nocturno, puesto que se encuentra imputado por ataques incendiarios.
El general director de Carabineros, Ricardo Yáñez, señaló que “estamos contentos por el éxito de una investigación que no ha estado exenta de complejidades, pero que nuestros especialistas han sido capaces de sobrellevar y han liderado una investigación que hoy día da frutos, y podemos entregarles tranquilidad y justicia a sus familias”, según consigna una nota de Cooperativa.
Roberto Garrido, fiscal regional de La Araucanía, indicó por su parte que “se trata de una diligencia muy relevante en esta indagatoria, porque hemos reunido hasta esta altura una cantidad de antecedentes suficientes que nos permiten formular imputaciones en contra de las personas detenidas, pero también nos va a permitir recopilar otra información y evidencia asociada a estos delitos que estamos investigando”.
Vínculo con organizaciones radicales mapuche
En un punto de prensa, Garrido detalló que existiría una “doble intención” por parte de los asesinos: “Una es hacerse con las armas que los funcionarios de Carabineros portaban, y otra es atacar directamente a carabineros, en relación con una de las personas implicadas, que ya tiene antecedentes por ataques directos a los funcionarios de Carabineros, y por lo tanto, nos parece que están vinculadas esas dos situaciones”, aseguró.
El persecutor aseguró que los sospechosos son miembros de “organizaciones criminales que no tienen otra finalidad que proporcionar lucro a las personas que las integran. Dentro de estas orgánicas participan diferentes personas que a veces utilizan la denominación de Weichan Auka Mapu (WAM), otras veces de Resistencia Mapuche Lafkenche (RMP) como sería el caso de las personas que hoy están siendo detenidas”.
Garrido también confirmó que el hermano sospechoso que se mantiene prófugo es intensamente buscado por la policía, asegurando que pronto lograrán detenerlo.
“Es un procedimiento que está en curso y esperemos que se concrete también la detención de esa persona”, subrayó Garrido.
Los tres detenidos serán formalizados este jornada a partir de las 14:00 horas.
¿Qué dijo el Gobierno?
La vicepresidenta de la República, Carolina Tohá - quien se encuentra subrogando al mandatario Gabriel Boric, de visita oficial en los Emiratos Árabes -, llegó hasta la zona y en conferencia de prensa junto a otras autoridades indicó que “debemos reconocer y felicitar el trabajo investigativo y policial que ha conducido a este resultado. Si tenemos este avance en esta causa, es porque ese trabajo se hizo bien, desplegando capacidades profesionales, esfuerzo y dedicación”.
Sin embargo, sostuvo que “tenemos todavía un prófugo que estamos buscando, otras personas que deben ser identificadas y buscadas, y también tenemos que ir ante los tribunales y presentar la evidencia de esta investigación, que ha sido ardua, y que según nos han relatado esta mañana, tiene múltiples elementos”.
Tohá finalizó asegurando que “en Chile, los crímenes, particularmente de esta gravedad, no van a quedar impunes. Así ha sido con todos los atentados que se han cometido en contra de fuerzas de orden y seguridad, y todos los casos que más han concentrado la atención de la ciudadanía en el último tiempo”.