Uruguay y Estados Unidos lanzan red de inversiones para emprendedores por hasta 1.000 millones de dólares

El gobierno de Estados Unidos y el de Uruguay lanzaron una red de “inversores ángeles” por hasta USD 1.000 millones, que busca el apoyo de los emprendedores de América Latina. La iniciativa tiene el objetivo de “cerrar la brecha de financiamiento” que tiene algunos firmas al iniciarse, además de “impulsar el crecimiento económico” y “reforzar ecosistemas de empresas emergentes en la región”, informó la Presidencia uruguaya.

El anuncio se dio en el marco de una gira que el ministro de Relaciones Exteriores de Uruguay, Omar Paganini, está haciendo por Estados Unidos. El lanzamiento de la red fue realizado junto al asesor de Seguridad Nacional del gobierno norteamericano, Jake Sullivan, y la administradora de la Agencia de Estados Unidos para el Desarrollo Internacional, Samantha Power.

La Red de Inversores Ángeles de las Américas es una iniciativa diseñada para “movilizar las inversiones” en las primeras etapas de los emprendedores. Esta red es apoyada por Endeavor Miami y BID Lab y representa “un hito en el fomento del progreso empresarial en las Américas”, según la información oficial. El “compromiso inicial” es por hasta USD 1.000 millones que serán destinados a los emprendedores de la región.

“El objetivo de la propuesta es impulsar a las nuevas empresas latinoamericanas a expandirse al mercado internacional, mediante el fortalecimiento del desarrollo económico en todo el hemisferio occidental y la mejora de los vínculos económicos de Estados Unidos”, dice el texto.

La Casa Blanca reconoce que la seguridad económica es parte integral de la región, según la información de la Cancillería uruguaya. Por lo tanto, al “reforzar” el ecosistema de empresas emergentes y promover el “crecimiento económico sostenible”, la red “no solo fomenta la innovación” sino que fortalece la “resiliencia económica y la seguridad”.

Este proyecto está enmarcado en la Alianza para la Prosperidad Económica de las Américas (APEP, por su sigla en inglés), que procura que el continente sea el más competitivo del mundo en términos económicos. Siguiendo esa meta, los ministros de los 12 países miembro se reunieron en Washington esta semana y se dedicaron a identificar “oportunidades para aprovechar los primeros éxitos, ampliar el espíritu empresarial para fomentar una mayor innovación y el acceso a la capacitación en la economía digital”.

En la reunión también se promovieron “objetivos de energía limpia y descarbonización”, de manera de “reforzar el Estado de Derecho” y “fortalecer la seguridad alimentaria y la producción sostenible de alimentos”. “Estos esfuerzos permitirán mejorar de forma colectiva el panorama económico de las Américas, para garantizar un crecimiento sólido y estabilidad en los años venideros.

“Nuestra colaboración en esta iniciativa, a través de Uruguay innovation Hub, subraya nuestro compromiso de fomentar el emprendimiento y el desarrollo económico en América Latina. Creemos que esta red servirá como catalizador para que las nuevas empresas prosperen y se expandan a los mercados internacionales, incluido Estados Unidos, mejorando así la seguridad económica y la estabilidad de la región”, declaró el canciller uruguayo Paganini.

Uruguay se quiere posicionar en la región como un polo tecnológico y, para lograrlo, a fines del año pasado lanzó el plan Uruguay Innovation Hub (UIH), un espacio para “probar productos” y “desarrollar proyectos innovadores”, según lo definió Paganini cuando todavía era ministro de Industria.

Se trata de una programa de participación de institutos públicos y privados que funcionará en la órbita de la Agencia de Investigación e Innovación, otros organismos estatales y el Banco Interamericano de Desarrollo. “Ya somos, y hace muchos años, un business hub regional; tenemos un pujante ecosistema tecnológico, entonces queremos dar un salto y ser un hub regional de innovación”, dijo el jerarca del gobierno uruguayo.

UIH apuesta a otorgar fondos a aquellos emprendimientos que ya pasaron por la etapa de validación de una idea y va a “co-invertir” en ellas, para lograr la aceleración de las empresas.

Otra de las patas del programa se denomina “company builder” y se enfoca en la estructuración de un modelo de negocios.