Las autoridades de Costa Rica detuvieron este viernes a un hombre como sospechoso de participar en el asesinato del ex militar venezolano Ronald Ojeda, un disidente del régimen de Nicolás Maduro que estaba asilado en Chile.
Una fuente del Ministerio de Seguridad de Costa Rica confirmó a la agencia de noticias EFE que esta persona fue arrestada por la Policía de Migración en la localidad de Paso Canoas, frontera terrestre con Panamá, luego de que en los sistemas se activara una alerta roja de captura.
El hombre, identificado como Maickel Villegas Rodríguez, permanece a las órdenes de las autoridades costarricenses a la espera de determinar su situación jurídica.
En una declaración pública, la Cancillería de Chile señaló: “Interpol nos comunicó que se detuvo en Costa Rica a uno de los prófugos sospechoso del asesinato del ex teniente Ronald Ojeda. Estamos en contacto estrecho con la Fiscalía, Interpol y Poder Judicial para iniciar petición de extradición”.
La emisora chilena Radio Bío Bío añadió que el subsecretario del Interior de Chile, Manuel Monsalve, consideró que es “una buena noticia” la detención de Villegas Rodríguez pero subrayó la importancia de actuar con prudencia en la medida que avanza el proceso.
La Fiscalía chilena ha señalado a Villegas Rodríguez como uno de los presuntos autores del secuestro y homicidio de Ojeda, por lo que el gobierno de Chile está trabajando en su pronta extradición. Monsalve detalló que se ha solicitado la “formalización de la investigación, con fines de extradición” ante el Tercer Juzgado de Garantía del Centro de Justicia.
Al ser consultado sobre cómo Villegas Rodríguez pudo haber abandonado Chile tras el crimen, Monsalve advirtió que “la única forma que haya salido del país es de manera clandestina, no hay forma de que haya salido por un paso regular”.
Ronald Ojeda, disidente venezolano y asilado político en Chile, fue secuestrado el pasado 21 de febrero en Santiago y sus restos fueron hallados diez días después en una localidad periférica de la capital, sepultados debajo de un bloque de cemento.
Este caso generó un conflicto diplomático entre Venezuela y Chile, pues ambas partes intercambiaron señalamientos acerca de la investigación.
El pasado 12 de abril, la ministra del Interior chilena, Carolina Tohá, afirmó que el Gobierno “demandará que Venezuela cumpla sus responsabilidades” en relación con el caso de Ojeda.
El pasado 5 de junio, el fiscal general del régimen chavista en Venezuela, Tarek Saab, acusó a Chile de no haber entregado “absolutamente nada” de información y exigió “reciprocidad” sobre el caso. Saab dijo en aquel momento que el asesinato del ex militar fue una operación para “enturbiar” las relaciones entre Venezuela y Chile, y señaló como posibles responsables a cuerpos de inteligencia chilenos y extranjeros “con intereses espurios”.
En respuesta a estas declaraciones, el presidente chileno Gabriel Boric anunció el 6 de junio el envío de una nota de protesta a Venezuela y dijo que “los comentarios del fiscal venezolano dan cuenta efectivamente de que no hay voluntad adecuada para resolver un caso que es tremendamente complejo”.
(Con información de EFE)
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