(Desde Montevideo, Uruguay) - El ex secretario de la Presidencia de Uruguay Álvaro Delgado se convirtió este domingo en el candidato a presidente de Uruguay por el Partido Nacional. Con el 50% de los votos escrutados, Delgado acumula el 75% de los votos, seguido de Laura Raffo con el 19% y Jorge Gandini con el 5%, según la información de la Corte Electoral.
La ex sindicalista Valeria Ripoll lo acompañará en la fórmula. Fue la secretaria general de Adeom, el sindicato de funcionarios de la Intendencia de Montevideo. “La lógica de esto es intentar correrse a la izquierda lo más posible”, interpretó el politólogo Adolfo Garcé, en Canal 12.
Delgado habló primero en su comando y luego se trasladó a la sede del Partido Nacional, para confirmar su compañero de fórmula. “A este blanco le toca ser abanaderado, pero sabe que lo más importante siempre es la bandera”, dijo Delgado en una reunión pública del Directorio del Partido Nacional.
El anuncio de su compañero de fórmula se hizo esperar y se conoció recién sobre la medianoche. Fue a esa hora que el ahora candidato subió al escenario para hablarle a la militancia. Delgado saludó a los candidatos electo por la coalición –Andrés Ojeda, Guido Manini Ríos y Pablo Mieres– y también al elegido por el Frente Amplio, Yamandú Orsi.
Delgado dijo sentirse “orgullloso” del gobierno de Luis Lacalle Pou y aseguró que ahora, al votarlo a él, se podrán consideran los resultados de la gestión de este gobierno. El aspirante dijo que comienza una “nueva etapa”, un “nuevo camino” hacia las elecciones de octubre y noviembre, cuando se definirá el próximo presidente.
“A la gente le pedimos que eligiera un rumbo. Venimos a esta sede a decirle a la gente que representamos la continuidad del rumbo que inició Luis Lacalle Pou”, señaló. Delgado aseguró que “muchos uruguayos” que no votaron al actual presidente hoy miran un eventual nuevo gobierno del Partido Nacional con “esperanza”.
Delgado llamó a la “unidad” y reiteró que “lo más importante” es el Partido Nacional, al que definió como el “instrumento más lindo que tiene el Uruguay”.
El postulante hizo tres anuncios en su discurso. El coordinador de los equipos técnicos de Delgado, Agustín Iturralde, convocará a los asesores de los otros pre candidatos que tuvo el Partido Nacional para formar un programa único de los nacionalistas.
El segundo anuncio fue la propuesta de que Valeria Ripoll sea su compañera en la fórmula presidencial. Destacó su “valentía” y como una “peleadora por las causas sociales”.
Delgado también anunció Luis Lacalle Pou integrará las listas al Senado del Partido Nacional.
“Tenemos claro el valor de la descentralización, la libertad y la tolerancia. Es un rumbo que a Uruguay le da certeza y tranquilidad. Tenemos que ser claros con la gente porque en octubre y noviembre tiene que tomar una decisión más importante que cinco años por delante. Tiene que mirar el rumbo de Uruguay hacia adelante. Tenemos claro que no queremos que Uruguay retroceda”, aseguró en su discurso.
Delgado llamó a pelear por generar más empleo, la primera infancia, reducir la cantidad de personas que viven en los asentamientos y por las reformas que considera necesarias en el país.
La presidenta del Directorio del Partido Nacional, Macarena Rubio, llamó a “cuidar la unidad” de la fuerza política y llamó a continuar con las “transformaciones” del gobierno de Luis Lacalle Pou.
El primer discurso de la noche de Delgado fue en su comando. Allí agradeció a su familia en un breve mensaje que dio en su comando de campaña. “Con los resultados a la vista, tengo el honor de representar al Partido Nacional como candidato único. Es de los honores más grandes que me puede haber dado la vida. Siento la responsabilidad y el peso de la historia, pero también lo disfruto como un lindo y hermoso desafío”, destacó y mencionó a Lacalle Pou como uno de los artífices de la actual coalición de gobierno.
Al reconocer la derrota, Raffo habló de que comienza una “nueva etapa” en la campaña y apeló a la unidad partidaria de cara a las elecciones de octubre y el más que probable balotaje de noviembre. La economista, que tenía el respecto del histórico sector Herrerismo, llamó que todos estén en el “mismo barco” para asegurar un “segundo gobierno de la coalición”.