(Desde Santiago, Chile) Diversos malabares para llegar a sus puestos de trabajo han debido realizar esta jornada miles de chilenos, debido al paro total de ferroviarios anunciado por la Federación Nacional Transporte Ferroviario de Carga y Pasajeros (EFE), quienes piden más seguridad en el tráfico vial tras la fatal colisión de trenes que dejó dos muertos en San Bernardo, el pasado jueves 20 de junio.
“Desde el día jueves hemos mantenido conversaciones con la Empresa de Ferrocarriles del Estado (EFE) y lamentamos informar que esta, como administrador y mantenedor de las vías férreas de nuestro país, no ha sido capaz de garantizar la seguridad del tráfico ferroviario”, señalaron desde la federación mediante un comunicado.
“Al día de hoy no se ha realizado ninguna mejora en los sistemas de movilización en los que actualmente operamos, manteniéndose así, las mismas condiciones operacionales que dieron como resultado la colisión de dos trenes con consecuencias fatales. Como trabajadores ferroviarios no pondremos en peligro la vida de nuestros asociados y mucho menos la de nuestros pasajeros, por lo que hemos decidido no operar los trenes en los servicios de pasajeros que administra EFE”, indicaron.
“Esta paralización se mantendrá hasta que EFE sea capaz de garantizar la circulación segura de los trenes por las vías de nuestro país”, remataron desde el gremio.
Por su parte, la empresa estatal aseguró que se encuentra dialogando con los trabajadores y que ya decretaron diversas “soluciones complementarias” para los pasajeros, como el aumento de buses en el transporte público.
“Por supuesto, estamos buscando soluciones intermedias. No vamos a abusar de nuestra posición en ningún caso: hay una conversación, hay una comunidad en ferrocarriles que trabaja junta y vamos a mantener ese espíritu”, dijo el presidente de EFE, Eric Martin.
Arresto domiciliario
Este sábado, en tanto, el maquinista del tren de pasajeros y el encargado de control de las vías fueron imputados por su presunta responsabilidad en la fatal colisión entre un tren de pasajeros de EFE - que realizaba una prueba de velocidad con nueve funcionarios a bordo - y un convoy cargado con más de mil toneladas de cobre, el que dejó dos muertos y nueve heridos en San Bernardo.
Ambos fueron formalizados por cuasidelito de homicidio y lesiones graves, quedando con arresto domiciliario y arraigo nacional.
Según antecedentes de la investigación, el controlador de la vía habría autorizado de manera imprudente la maniobra de retroceso del tren de pasajeros que implicaba el cambio de vía, movimiento que además fue efectuado con demora por parte del maquinista.
“Cada uno en su participación en este hecho provocó el accidente, por lo tanto, entendemos que ambos tienen participación directa”, señaló el fiscal Marcos Pastén, quien no descartó responsabilidad de la empresa estatal EFE.
“Desde el año 1986 que no teníamos un accidente ferroviario con personas fallecidas, de estas características, por lo tanto, nosotros no descartamos por ahora ningún tipo de posibilidad investigativa en este caso”, aseguró.
La defensa de los acusados
Ximena Silva, defensora del controlador de las vías, aseguró que su representado es inocente y endilgó la responsabilidad del accidente a la empresa estatal, puesto que a su juicio “en ese momento fallaron muchas cosas, no existían los útiles necesarios para que mi representado pudiera realizar su trabajo de manera adecuada y, además, él buscó evitar la colisión (...), por lo tanto, no es responsabilidad de él en forma legal. Si hubiese habido radiotransmisores, estos hechos se pudieron haber evitado”, indicó.
Según la abogada, el coordinador “trató de evitar este accidente y pudo haberlo evitado si hubiesen contestado desde el tren de prueba, o si hubiesen funcionado otros medios tecnológicos para poder haber evitado este accidente. Eso no sucedió”.
Sin embargo, desde la defensa del maquinista del tren de pruebas negaron dicha versión, asegurando que no recibió llamada alguna y que la autorización de cambia de vía fue dada tres minutos antes del accidente.
“Creemos que estamos en posición de lograr acreditar que mi representado tiene la calidad de víctima y no de imputado”, afirmó Fernando Cortés, abogado del maquinista.
Finalmente, Cortés también apuntó a EFE puesto que según el reglamento de tráfico ferroviario, las comunicaciones entre la Central y la cabina deben ser por radiotelefonía y no por celular. Debido a esto, el tribunal no descartó la responsabilidad de la empresa y fijó un plazo de 150 días para la investigación.