El paso de un pequeño tornado el martes dejó al menos 11 viviendas destruidas y más de 20 personas aisladas en el centro y sur de Chile, fuertemente golpeado en los últimos días por intensos temporales y vientos.
Los principales estragos fueron registrados en la región de Bío Bío, donde los vendavales formaron un tornado de baja intensidad que arrasó con una decena de residencias y provocó caídas de árboles, postes y cables de electricidad, ocasionando cortes de energía.
De acuerdo con el Servicio Nacional de Prevención y Respuesta ante Desastres (Senapred), el evento meteorológico fue un “tornado de clasificación EF-0, con registro de rango de vientos entre 105 y 137 kilómetros por hora”.
Al menos 24 personas permanecían aisladas en Bío Bío mientras las autoridades emitieron alertas para nuevas lluvias, vientos y otros fenómenos climáticos en diversas áreas del país.
Desde hace varios días las lluvias caen sin tregua en Chile, lo que ha generado preocupación entre la población ante el riesgo de nuevas catástrofes.
“Se necesita ayuda urgente de la municipalidad, porque el jueves ya llueve otra vez”, dijo a The Associated Press Fabiola Martínez, cuya casa se vio damnificada por el paso del tornado en Bío Bío.
La llegada del fenómeno coincidió con la visita del presidente Gabriel Boric a la región para evaluar los daños causados por las tormentas de la semana pasada, que han dejado a un muerto, cuatro heridos y miles de afectados.
“Aterrizamos en Concepción para coordinar en terreno los trabajos y agilizar la entrega de ayudas en zonas afectadas por el sistema frontal en la región del BioBío”, indicó el mandatario en X, antes Twitter.
Bío Bío se encuentra desde el pasado 11 de junio en “alerta roja por evento meteorológico” debido a la alta probabilidad de nuevos temporales, tornados, derrumbes, aluviones y deslizamientos de tierra.
Ya en el extremo sur chileno, la ciudad de Punta Arenas se encuentra bajo advertencia por la “pérdida de conectividad” en distintas zonas, donde se prevé que las temperaturas bajarán hasta los seis grados centígrados bajo cero.
“Debido a las condiciones meteorológicas del sector, caracterizadas principalmente por intensas nevadas, existe una pérdida de conectividad terrestre en sectores urbanos y periurbanos de la comuna de Punta Arenas, la que no ha podido ser superada con recursos locales”, informó Senapred.
Mientras la situación de emergencia esté vigente, quedan suspendidas todas las clases en la comuna.
Por su parte, el gobierno indicó que movilizará más recursos, personal y equipamientos en las próximas horas para “controlar la situación, dada la extensión y severidad del evento”.
El desplazamiento de un sistema frontal la semana pasada dejó un rastro de destrucción en gran parte de Chile, que declaró la zona de catástrofe en siete de sus 16 regiones. Los temporales y vendavales provocaron extensas inundaciones, cortes de calles, suspensión de clases, deslizamientos de tierra y estragos generalizados, además de dejar casi 100.000 hogares sin electricidad.
El servicio meteorológico alertó el martes sobre la llegada de un nuevo sistema frontal que traerá nuevos temporales y nevadas. Asimismo, una masa de aire frío provocará heladas moderadas a intensas en el extremo austral del país, donde los termómetros podrían marcar hasta 16 grados bajo cero.
(Con información de AP)