(Desde Santiago, Chile) A dos años de su retiro, el exjugador de Cobreloa Christian Pavez denunció una serie de escándalos ocurridos durante su paso por el club loíno, del que es hincha acérrimo. En una entrevista con el medio “Socios del Desierto”, Pavez reveló preocupantes episodios que, según acusó, fueron encubiertos por los dirigentes del club para tratar de evitar que salieran a la luz pública.
El exjugador, quien se retiró del fútbol tras la derrota de su equipo ante Copiapó en la final por el ascenso, reconoció que el resultado fue importante para dar el paso de dejar las canchas, pero los graves hechos que vio en el equipo de sus amores lo llevaron a tomar finalmente esa decisión.
“Tuvimos que vender el resultado. Por querer ganar, el club tapó muchas cosas... Todos queríamos que Cobreloa subiera. Pasaron muchas situaciones y el tener que callarlas y no poder dejar la cagada me frustró. Dije que no quería otro año más así, porque tenía que criar hijas en un ambiente donde se callaba todo por un resultado”, partió su alocución.
“Vi a compañeros hacer cosas y después se lavaron las manos, decían que no hacían nada. Tuve que callar para que ganáramos y no dejar la cagada ni tener un plantel quebrado. Mi decisión de retiro fue por haber sido muy profesional. Quise cuidar mi nombre de un ambiente así”, continuó.
El jugador aseguró que lo más grave que tuvo que vivir fue el conocido caso de violación masiva que tiene actualmente a 8 excadetes - de los 9 implicados - en prisión preventiva, hecho ocurrido durante un asado realizado el 16 de septiembre de 2021 en la Casa Naranja, sede del club ubicada en Calama (1.500 kms al norte de Santiago).
“Creo que tendrían que hablar los que lo hicieron realmente. Hay cosas que lamentablemente están a la luz pública. Fue el año anterior que llegué, pero cuando llegué justo entré a una sala, hablaban del tema y no sabían cómo callarlo y taparlo. No sé si lo hicieron, pero yo estuve ahí cuando lo callaron. Lamentablemente tuve que callarme situaciones en mi casa. No sé si pasó o no lo de la niña. Si pasó o no, callar ese tipo de cosas...son temas fuertes”, afirmó.
Cabe señalar que la propia víctima, identificada como Valentina, entregó en su testimonio crudos detalles de cómo fue abusada: “Me pegaron cachetadas, con un cinturón, me ahorcaron, eran bastante violentos”, relató, asegurando que en el lugar los jóvenes habían consumido alcohol, marihuana y cocaína.
Ludpatía y adicciones
Pavez también acusó que el club hacía la vista gorda con sus jugadores. “Eso arrastró más decisiones: avalar ludopatía, adicciones. Porque había adicciones que teníamos que aguantar todos siendo jugadores profesionales. Cómo vamos a aguantar a alguien adicto a una droga siendo futbolistas profesionales. Eso nadie lo ha hablado”, denunció.
El ahora retirado deportista también se refirió a las imputaciones de su compañero David Escalante, ex delantero del equipo, quien deslizó que Axl Ríos, volante del equipo, había ido “para atrás” en la final con Copiapó, elenco que finalmente subió a primera división y con el que después fichó.
“A lo mejor habló más de la cuenta, pero tuvo personalidad para hacerlo. Al no tener evidencia, mejor dejo ahí las cosas. Pero las viví. Que hablen, que digan ‘yo me equivoqué, hice esto. Y no solo, con tres compañeros más’”.
Pavez aseguró que al ver todos estos problemas decidió retirarse del fútbol y dijo que sobre todo el tema de la violación en manada, “me llevó a mirar de otro modo a mis hijas”. Finalmente, lamentó que el club rebajara su integridad moral en pos de un resultado. “El club necesita más sustento moral para llegar arriba. No es venderse a obtener la meta y subir”, reflexionó filosófico.