El presidente de El Salvador, Nayib Bukele, fue investido este sábado por el Congreso para un segundo mandato consecutivo para el período 2024-2029, con un amplió respaldo popular y con reclamos por la situación económica del país.
“Sí, juro”, respondió a la juramentación hecha por el líder de la Asamblea Legislativa, Ernesto Castro, quien le impuso la banda presidencial en las instalaciones del centenario Palacio Nacional.
El acto fue privado, sin acceso al público, transmitido en cadena nacional y en el que estuvieron presentes el rey de España, Felipe VI; el presidente de Argentina, Javier Milei; otros mandatarios, la familia y cercanos de Bukele.
Afuera, en la Plaza Capitán General Gerardo Barrios, cientos de personas, entre invitados especiales de diferentes sectores del país e internacionales, simpatizantes de Bukele y del partido oficialista, Nuevas Ideas (NI), presenciaron su discurso.
El jefe de Estado dirigió unas palabras al país luego de la juramentación. “Es un Gobierno reconocido por el 100 % de los países del mundo. Todos reconocen este gobierno a pesar de lo que digan los opositores”, comenzó. Y agregó: “Este es el momento más importante de nuestra historia reciente. Por fin vencimos el miedo y somos un país libre. Logramos lo inimaginable y lo hemos hecho acá con la gloria de Dios. Los milagros que ha visto este país no son pocos y si Dios así lo desea vendrán muchos más”.
“A partir de ahora tenemos una enorme tarea: la de proteger como un león nuestro legado”, dijo; al tiempo que hizo una analogía entre la situación del país y una persona enferma de cáncer. “Yo te curé del cáncer y te puedo curar de los demás problemas pero no puedo curarte de todo al mismo tiempo”, indicó Bukele para hacer referencia a que en este periodo de gobierno su administración tendrá como objetivo atender los otros problemas tras resolver “el cáncer de las pandillas”.
“Juntos nos libramos del cáncer de las pandillas, de la inseguridad. Incluso, cuando algunos decían que ese no era el camino... La medicina es solo una parte de la solución. La otra parte es la guía de Dios y la última parte es el paciente. Recibimos condenas de todas partes, que era un problema que se tenía que atacar de otra manera. Ustedes (el pueblo), valientemente, decidieron no escucharlos y defender incondicionalmente las decisiones que se estaban tomando. Logramos ser el país más seguro de toda Latinoamérica y hoy somos el más seguro de todo el hemisferio occidental”, remarcó.
Luego agradeció al pueblo, a su esposa Gabriela, a sus hijas, a sus padres y amigos. “Este gran pueblo salvadoreño hizo esto posible. Hizo posible esta aventura que parecía un sueño y ahora es una realidad. No sólo nos dio la confianza en tres elecciones distintas, sino desde antes”, manifestó.
Bukele se convierte así en el primer presidente de la etapa democrática de El Salvador en asumir para un segundo período consecutivo, tras décadas de dictadura militar y una guerra civil de 12 años (1980-1992).
Diversos actores políticos y sociales de El Salvador han manifestado que no reconocen la legalidad ni legitimidad del segundo mandato de Bukele por ser contrario a la Constitución.
También participaron en el acto de investidura la presidenta de Honduras, Xiomara Castro; sus homólogos de Costa Rica, Rodrigo Chaves; de Paraguay, Santiago Peña, y de Ecuador, Daniel Noboa, y el primer ministro de Belice, John Briceño.
Además, se hizo presente una comitiva del Departamento de Seguridad Nacional de Estados Unidos en representación el Gobierno de Joe Biden, liderada por Alejandro Mayorkas.
Momentos antes de la investidura, el Congreso de amplía mayoría oficialista dio inicio a una sesión plenaria extraordinaria en las instalaciones del Teatro Nacional para luego trasladarla al Palacio Nacional.
Bukele, próximo a cumplir 43 años y empresario de la publicidad, se impuso en los comicios del 4 de febrero pasado con más del 85% de los votos válidos a pesar de que la Constitución prohíbe la reelección inmediata.
Su participación en esas elecciones se dio después de que la Sala de lo Constitucional de la Corte Suprema de Justicia, elegida por la legislatura 2021-2024 sin seguir el proceso legal establecido, emitiera un acto en el que cambió el criterio de interpretación de la Constitución.
Con esta resolución, que de acuerdo con expertos no tiene efectos generales y no es de obligatorio cumplimiento por no ser un fallo, Bukele no debía esperar 10 años para buscar una reelección.
El último presidente salvadoreño en reelegirse para un segundo período consecutivo fue el dictador y general Maximiliano Hernández Martínez, quien gobernó entre 1931 y 1944, y dejó el poder tras una huelga general.
(Con información de EFE)