(Desde Santiago, Chile) En entredicho se encuentra por estos días el fiscal jefe de Pudahuel, Eduardo Baeza, por su responsabilidad en la posible huida de dos ciudadanos iraníes que fueron detenidos en mayo de 2023 por la Policía de Investigaciones (PDI), en el Aeropuerto Internacional de Santiago, tratando de salir del país con pasaportes falsificados.
Los hechos ocurrieron el 1 de mayo del año pasado, cuando trabajadores de la aerolínea British Airways se dieron cuenta que los pasaportes británicos presentados por dos pasajeros de un vuelo entre Santiago y Londres estaban denunciados por robo.
La PDI tomó detenidos a los individuos, quienes resultaron ser Alí Basheri, de 37 años (quien aseguró que su oficio era soldador), y de Abolfazl Delkhahfar, de 23 (quien dijo ser peluquero), ambos iraníes, los que se encontraban en tránsito en Santiago tras un sospechoso periplo que incluyó vuelos entre Teherán, Moscú, Caracas y Ciudad de Panamá. Desde allí embarcaron con destino a Chile, con el objetivo de partir nuevamente a Europa, según consigna una nota de El Mostrador.
Red de pasaportes falsos
La investigación policial parecía avanzar rápido, pues por medio de las cámaras de seguridad del aeropuerto se determinó que un chileno fue quien les había entregado los pasaportes.
Se trata de Carlos Samuel Gazzano Vega, quien dejó al interior de un baño los dos pasaportes británicos y se llevó los pasaportes iraníes. En su casa de San Bernardo, al momento de ser allanada, se encontraron dichos documentos y seis teléfonos celulares.
Gazzano confesó que el trabajo había sido hecho a petición de un extrabajador del aeropuerto, Carlos Abraham Lagos Rivera, “a cambio de una suma de dinero por pasajero”. También aseguró que Lagos “le había pagado en al menos 12 ocasiones por realizar este tipo de conductas permitiendo que, con identidades falsas, salieran ciudadanos extranjeros de Chile e ingresaran a terceros países”, agregando que “los pasaportes falsos ingleses se los entregó una mujer en cercanías del metro Gruta de Lourdes y que siempre mantuvo coordinación con Carlos Lagos, vía telefónica”.
¿Dónde están los iraníes?
Alí Basheri y Abolfazl Delkhahfar quedaron en prisión preventiva en el penal Santiago 1, pero el 25 de mayo, en una audiencia de revisión de medidas cautelares, se decidió cambiar la prisión preventiva por arraigo nacional, arresto domiciliario nocturno y la prohibición de los imputados de mantener comunicación entre ellos. Los imputados fijaron como su domicilio en la embajada iraní en Chile, ubicada en Las Condes, Santiago.
El 19 de julio, Basheri, sin embargo, informó de un cambio de domicilio al tribunal: El Olimpo 857, Maipú. Se trata de una vivienda que –según informó Radio Bío Bío– “en el pasado habría estado vinculada con movimientos de Hezbollah”, cuyas posibles actividades en Chile fueron recientemente denunciadas por la ministra de Seguridad de Argentina, Patricia Bullrich.
En septiembre del año pasado, el Ministerio Público pidió al tribunal ampliar el plazo de investigación en otros cuatro meses, lo que fue concedido. Sin embargo, como admiten varias personas cercanas a la investigación, desde esa fecha se dejó de tener conocimiento respecto del paradero de los imputados, quienes hoy están en calidad de prófugos y se cree que huyeron del país por pasos no habilitados, seguramente en la zona norte.
Otro hecho llamativo es que, a esta fecha, no han sido imputados los chilenos que hasta el momento aparecen implicados en el hecho, pese a que el plazo de investigación (luego de varias prórrogas) venció el 1 de abril pasado y el próximo 31 de mayo las partes están citadas a una audiencia de cierre de investigación.
Al respecto, desde la Fiscalía Regional Metropolitana Occidente señalaron que no pueden referirse al detalle de “las eventuales falencias” detectadas en la indagatoria, pero sí se precisó que a inicios de mayo el fiscal Pastén “traspasó dicha investigación a la Fiscalía de Alta Complejidad Occidente”, la que es encabezada por la fiscal Paulina Díaz, y que dicha unidad “se encuentra efectuando diligencias tanto respecto de los imputados, como de las distintas aristas del caso”.