Los presidentes de Rusia, Vladímir Putin, y Bolivia, Luis Arce, mantuvieron este lunes una conversación telefónica en la que apostaron por profundizar las relaciones entre ambos países sobre bases mutuamente provechosas.
“Se debatió el futuro desarrollo de las relaciones bilaterales con hincapié en la realización de proyectos conjuntos mutuamente provechosos en las esferas comercial-económica y de la energía”, informó el Kremlin.
Según la Presidencia rusa, ambos mandatarios “acordaron intensificar los contactos a diversos niveles”.
“El líder boliviano felicitó al presidente de Rusia y a todo el pueblo ruso en ocasión del 79 aniversario de la victoria en la Gran Guerra Patria”, apelativo ruso de la II Guerra Mundial, añadió el Kremlin.
A fines de abril la canciller de Bolivia, Celinda Sosa, anunció durante su visita a Moscú que Arce recibió una invitación para asistir al Foro Económico de San Petersburgo, que se celebrará del 5 al 8 de junio.
La diplomática boliviana destacó que uno de los principales objetivos de su viaje era, precisamente, “avanzar una agenda para la visita y el encuentro de nuestros presidentes”.
Además, se aseguró el apoyo de Rusia al ingreso del país andino en el grupo de países de economías emergentes BRICS, que ve como una herramienta “para quebrar la hegemonía de Estados Unidos”.
Reactor nuclear de Alto
En agosto de 2023, el gobierno de Luis Arce recibió los componentes iniciales del reactor nuclear de investigación que se construye en el Centro de Investigación y Desarrollo en Tecnología Nuclear de El Alto.
Según detalló en su momento la cancillería rusa, será el primero en el mundo a 4.000 metros sobre el nivel del mar.
“Avanzamos por la senda del desarrollo, la ciencia y la tecnología como pueblo digno y soberano. Llegó a Bolivia la vasija y el primer componente del Reactor Nuclear de Investigación, que estará en el Centro de Investigación y Desarrollo en Tecnología Nuclear de El Alto”, anunció el pasado domingo el presidente Arce.
Detalló, asimismo, que el reactor nuclear de investigación “está diseñado para estudiar y desarrollar aplicaciones nucleares con fines científicos y tecnológicos”. “Será el primero en el mundo a 4.000 metros sobre el nivel del mar, abriendo un abanico de posibilidades para la investigación”, agregó.
“Con el apoyo de Rusia, nuestro socio y país amigo, superaremos la brecha tecnológica y desarrollaremos, junto a profesionales bolivianos, tecnologías nucleares para medicina oncológica. También para mejorar la producción de alimentos e industrialización”, resaltó en sus redes el mandatario.
Erlan Vásquez, especialista en ingeniería nuclear de la Agencia Boliviana de Energía Nuclear (ABEN), explicó a la prensa local que la nueva infraestructura tendrá 200 kilovatios de potencia térmica y “es de tipo piscina moderado y enfriado por agua ligera”. Según indicó, la vasija que llegó esta semana a Bolivia fue diseñada para albergar al reactor nuclear.
El componente fue construido por la Corporación Estatal de Energía Nuclear Rosatom, que está a cargo de las obras de construcción del centro nuclear de investigación, cuya finalización está prevista para 2025.
El centro de investigación de El Alto ya cuenta con el Complejo Ciclotrón-Radiofarmacia, que produce radiofármacos para el diagnóstico del cáncer y el Centro de Irradiación Multifuncional, para procesar alimentos para la exportación, según indica la agencia de noticias rusa Sputnik.
El Centro de Investigación y Desarrollo en Tecnología Nuclear forma parte de una serie de acuerdos firmados en Moscú en 2019 entre Bolivia y Rusia en materia energética, de seguridad y explotación de litio. En ese entonces Evo Morales -hoy distanciado y peleado con Arce- era el presidente boliviano, y recibió una fuerte crítica por parte de la oposición, que también alertó sobre los verdaderos intereses del Kremlin.
(Con información de EFE)