El Observatorio Cubano de Conflictos (OCC) registró 633 protestas y denuncias públicas espontáneas en Cuba en abril, esto es 3,22% menos que las 654 compiladas en marzo.
“La leve baja podría deberse a que, después de comprobar una vez más el mes anterior que apagones eléctricos de 12 o 13 horas son una receta segura para protestas masivas como las del 17 de marzo en Santiago de Cuba, Bayamo y Matanzas, los cortes eléctricos fueron más moderados en abril (entre cuatro y seis horas)”, subrayó el observatorio en el informe enviado a Infobae.
Y siguió: “Pese a que las protestas y denuncias por actos represivos se mantuvieron entre las tres categorías más nutridas con 136, en el cuarto mes del año los desafíos al Estado policial se les fueron arriba con 147, si bien las primeras tuvieron en muchos casos un carácter ejemplarizante e intimidatorio. Una muestra: por primera vez voceros del régimen mencionaron la posibilidad de aplicar la pena de muerte a manifestantes pacíficos acusados de sedición, figura delictiva que se usó ampliamente contra los participantes en las protestas del 11J”.
Luego recordó que de sedición acusaron a muchos de los 14 cubanos que, en agosto de 2022, participaron en las protestas antigubernamentales por los apagones en Nuevitas, Camagüey. “Con ellos también intentaron dar un escarmiento a fines de abril. Las sentencias publicadas fueron en su mayoría de 10 a 15 años de prisión, y la más alta se la adjudicaron a Mayelín Rodríguez Prado. Por transmitir las protestas a través de las redes sociales, Mayelín cargó con la acusación de sedición y además con la de ‘propaganda enemiga de carácter continuado’”, consignó el OCC.
Abril marcó también la primera vez en que las protestas se acercaron a la casa del dictador Miguel Díaz-Canel. “Mujeres pobres y sencillas fueron a reclamar sus derechos a la residencia del gobernante, situada en el exclusivo reparto Cubanacán, y a través de las redes sociales transmitieron su acción y denunciaron que en Cuba sólo viven hoy los dirigentes comunistas mientras el pueblo muere de hambre y miseria”, detalló el reporte; al tiempo que acotó que “otros desafíos al Estado policial fueron protagonizados en el mes por religiosos, periodistas y sindicalistas independientes, usuarios y personalidades de las redes sociales, académicos, cineastas, ex militantes comunistas y presos políticos”.
En otro orden, explicó que una de las categorías más numerosas de protestas y denuncias en el período fue la relacionada con la “Alimentación y los precios de los alimentos“ (112). A principios de abril, Díaz-Canel admitió que los estados de opinión sobre ese tema son “muy críticos y muy negativos”. Pero en el mes continuaron los retrasos y los faltantes irrecuperables en la entrega de casi todos los productos subsidiados de la canasta básica racionada, lo cual junto con un aumento imparable de los precios en el mercado de oferta y demanda mantuvo a una gran parte de la población saltándose comidas y a otra pasando días sin comer.
Al menos tres personas fueron captadas en cámara desfallecidas de hambre en las calles de Santiago de Cuba y Cienfuegos. El gobierno reconoce solo 330.000 personas vulnerables en el país, pero a ese grupo pertenecen muchos más: todos los que dependen para comer de la ahora incierta canasta básica y viven con menos de un dólar al día.
La categoría de “Inseguridad Ciudadana“ registró 84 protestas o denuncias públicas en abril después de haber acumulado 144 en enero y 124 en febrero, pero la caída no sería más que la “resaca de la ola”, destaca el informe.
“La creciente alarma entre la ciudadanía ante un fenómeno social inusitado en Cuba ha convertido a la isla en un país en el que, como dice en Cubanet Jorge Luis González Suárez, hay que vivir detrás de las rejas, por temor a asesinatos, desapariciones, asaltos, robos con fuerza y con violencia y crímenes de bandas y pandillas”, consignó.
Las demás clasificaciones de protestas y denuncias públicas contabilizadas por el OCC quedaron en el siguiente orden: problemas sociales (61); servicios públicos, incluyendo electricidad, agua, transporte y salubridad (39); salud, medicinas y médicos (38); y vivienda (19).
El informe sostuvo que mayo comenzó bajo la “ominosa sombra” de una reunión del Consejo de Ministros que admitió lo que llamó “un panorama desfavorable” en el primer trimestre del año, caracterizado por “decrecimiento de ingresos procedentes de exportaciones, disminución de importaciones e incumplimientos de actividades económicas claves como las principales producciones agropecuarias, de azúcar y derivados y generación de electricidad”.
Por último, acerca de la brecha creciente entre la élite de poder y el pueblo, el economista Pedro Monreal comentó: “La nota de prensa sobre la reunión del Consejo de Ministros indica lo alejado que parece estar el gobierno respecto a la realidad social, cuando se informa que solamente existen unas 330 mil personas vulnerables ¿Acaso no se entiende qué es pobreza?”.