El Tribunal Municipal de Camagüey sentenció con penas de hasta 15 años de cárcel por delitos como sedición y propaganda enemiga a 13 personas que participaron en las protestas antigubernamentales de la localidad de Nuevitas (este de Cuba) en agosto de 2022.
De acuerdo con un listado proporcionado a EFE por la ONG Justicia 11J, solo una persona -una mujer acusada de sedición- fue absuelta por falta de pruebas, mientras que el resto obtuvo sanciones de entre cuatro y 15 años de prisión.
Además de sedición y propaganda enemiga de carácter continuado, el Tribunal consideró probados lo delitos de sabotaje, encubrimiento, actos contra la seguridad del Estado, atentado y resistencia. En total, las penas ascienden a los 138 años de cárcel.
De tal forma, el dictamen cumple así con buena parte de la petición realizada originalmente por la Fiscalía, a la que obtuvo acceso EFE. La sentencia no es firme y podrá ser apelada.
El juicio -que en principio iba a tener lugar en diciembre pero fue pospuesto- se celebró en enero, en dos sesiones de 12 horas cada una. Al interior de la sala solo pudieron acceder dos familiares por detenido, según contaron a EFE testigos presenciales.
En los alrededores del tribunal se desplegó un fuerte dispositivo de seguridad que cerró varias calles adyacentes.
Nuevitas, una ciudad costera de unos 60.000 habitantes, fue escenario en agosto de 2022 de algunas de las mayores protestas antigubernamentales de Cuba desde el 11 de julio de 2021 (11J).
ONG y activistas han denunciado en términos generales en estos juicios que, además de graves irregularidades en el debido proceso, estas sentencias tienen un carácter ejemplarizante y disuasorio.
De acuerdo con el informe mensual del pasado marzo de la organización Prisoners Defenders -con sede en Madrid-, en Cuba hay 1.092 personas encarceladas por razones políticas.
“Tres años después (de las masivas protestas del 11 de julio de 2021) el pueblo ha vuelto a salir masivamente a la calle para expresar su rechazo al régimen y exigir libertad, aún sabiendo que las autoridades castigan con represión y prisión cualquier manifestación ciudadana. Y así ha vuelto a reaccionar el régimen. Durante el pasado mes de marzo, 24 ciudadanos cubanos han pasado a formar parte de la lista de prisioneros políticos de Prisoners Defenders tras participar en las manifestaciones pacíficas que transcurrieron fundamentalmente en el oriente del país”, consignó el reporte de la ONG enviado a Infobae.
Luego describió que los municipios con mayor número de nuevos prisioneros políticos por las protestas de marzo son Santiago de Cuba (11), y Holguín (8), habiendo también presos por este motivo en Artemisa (1), Cienfuegos (1), La Habana (1), Las Tunas (1) y Sancti Spíritus (1). Once de esos prisioneros políticos fueron detenidos en protestas entre el 8 y el 16 de marzo, mientras que los otros 13 corresponden a las manifestaciones del 17 y 18 de marzo.
“Libertad”, “¡No a la violencia!”, “¡Corriente y comida!” y “Patria y Vida” fueron las consignas coreadas por los manifestantes que, pese a que no hubo violencia por parte de ellos, fueron reprimidos.
(Con información de EFE)