Cuba reveló este miércoles que en los últimos años ha habido un aumento en el consumo interno de drogas ilícitas y se ha comprometido a “controlar y contener” el tráfico de estupefacientes en momentos en que la crisis económica está golpeando al país caribeño.
“En Cuba se ha evidenciado un alza en los últimos años (al consumo de drogas), y los adolescentes y jóvenes representan el grupo más vulnerable”, dijo el doctor Alejandro García, director del Centro de Salud Mental de Centro Habana, en un popular barrio de La Habana.
El régimen de Miguel Díaz-Canel ha reiterado una política de “tolerancia cero” contra las drogas. García señaló en una entrevista al diario Granma, del Partido Comunista, que se está trabajando fuerte para prevenir el “fenómeno porque, aunque eliminarlo sería óptimo, se pretende controlar y contener”.
Cuba está sumida en una crisis económica desde que comenzó la década con un descenso del Producto Interno Bruto del 10% respecto a 2019, lo que ha provocado carencias de alimentos, medicinas, combustibles y otros bienes básicos, así como golpeada por los molestos apagones y la inflación. El país caribeño gasta 2.000 millones de dólares anuales en la importación de alimentos.
“Todavía hay fallos y brechas porque el país tiene problemas. La situación económica está afectando mucho por diversas razones”, dijo García mencionando una disminución del personal especializado. “Existen municipios que no tienen psiquiatras o quienes atiendan directamente el fenómeno de las adicciones”, añadió.
García no reveló el tipo de drogas que se está consumiendo en la isla, pero destacó que en los últimos tiempos se han añadido “nuevos químicos” que en ocasiones se desconocen y es más complejo de “enfrentar y atender”.
Las primeras experiencias en el consumo de drogas - señaló - están entre los 13 y 14 años, a partir de los 17 y 20 pueden convertirse en adictos y a los 25 años hay un incremento.
Autoridades cubanas revelaron a finales de 2023 que los tribunales del país habían sancionado a 689 personas vinculadas con el tráfico de drogas y señaló que el Código Penal sanciona “la tenencia y el tráfico de drogas ilícitas con penas desde 4 a 30 años de cárcel, incluso prisión perpetua y hasta la condena de muerte”.
Cuba, por su estratégica ubicación geográfica en el Caribe, es una ruta utilizada por narcotraficantes para trasladar la droga desde el sur lanzadas en avionetas a lanchas rápidas con destino a Estados Unidos.
(Con información de Reuters)