El ex carabinero chileno imputado por cegar a una persona durante el estallido social se convirtió en best seller

(Desde Santiago, Chile) Claudio Crespo, el exteniente coronel de Carabineros dado de baja por la institución y actualmente imputado por la Justicia por cegar a un manifestante durante el estallido social de octubre de 2019, reapareció en la escena pública al publicar un libro llamado “G-3: Honor y Traición”, en el que cuenta su experiencia combatiendo a la “primera línea” y el que rápidamente escaló al primer lugar de ventas, convirtiéndose en un “best seller”.

El hecho ocurrió el 8 de noviembre de 2019, cuando según la imputación del fiscal Francisco Ledezma de agosto de 2020, Crespo “se parapetó en una de las paredes de un edificio y, abusando de su cargo, con la intención de castigar, disparó la escopeta antidisturbios”, según consigna una nota de Emol.

El disparo impactó de lleno en el rostro de uno de los agitadores, Gustavo Gatica, quien perdió completamente la vista. El persecutor sostuvo además que al momento del tiro, “no existía riesgo alguno para la integridad de los carabineros”. Debido a esto, el Instituto Nacional de Derechos Humanos (INDH) interpuso una querella por apremios ilegítimos calificados, con resultado de lesiones gravísimas.

A poco andar, Carabineros dio de baja Crespo, al constatar irregularidades en el manejo de los videos grabados mientras se desarrollaban los hechos.

Tras la imputación, Crespo inicio un largo camino judicial. Quedó en prisión preventiva y tras varios intentos por revocarla, logró cambiarla por arraigo nacional y firma quincenal en octubre de 2021.

El pasado 5 de marzo se llevó a cabo la preparación del juicio oral en el 7° Juzgado de Garantía. La fiscal Ximena Chong solicitó 12 años de cárcel, inhabilitación y el pago de las costas para Crespo. Finalmente, la audiencia quedó programada para fines de este mes.

“Mi nombre es Claudio Crespo, soy teniente coronel de Carabineros en situación retiro. Escribí este libro, que denominé ‘G-3: Honor y Traición’”. Así comienza el video publicado en X el pasado 12 de marzo, donde Crespo promociona el lanzamiento del texto que, en sus palabras, “es un compendio de experiencias propias durante la crisis social del 18 de octubre de 2019″.

En el libro, añade, “denuncio públicamente todo lo que vivimos, lo que hemos sufrido, y esta persecución político-judicial en nuestra contra, solamente por hacer nuestro trabajo”.

Además, promete que en las páginas entrega detalles de cómo se organizó el combate contra la “primera línea”, y cómo la prensa y medios independientes los “atacó”. Es más, denuncia “que fuimos traicionados por el Estado, que hoy nos persigue a través del Consejo de Defensa del Estado (CDE)”, y por la propia institución de Carabineros, “a la cual entregué 27 años de mi vida”.

El libro escaló rápidamente en el ranking de ventas y estaba en el primer lugar de ventas entre el periodo del 28 de marzo y el 3 de abril.

Ello, pese a que su lanzamiento no estuvo ajeno a controversias, pues el evento tuvo que ser cancelado tras diversas “funas” en redes sociales.

El domingo pasado, Crespo fue invitado al programa “Sin Filtros”, donde aseguró que los Carabineros le temen más a la Justicia chilena que a los delincuentes.

Crespo afirmó que sus ahora excompañeros “son los más afectados de la crisis social y hasta el día de hoy hay más de 160 carabineros, condenados y en la cárcel”.

También hizo sus descargos contra el Gobierno de Gabriel Boric, recordando que durante el estallido social, cuando estaba el ex Presidente Sebastián Piñera, “lo atacaron hasta el cansancio, y tenían dos fines: sacar a Piñera y refundar a Carabineros. ¿Pero qué dice el Gobierno hoy día? Apoyar a Carabineros, y hoy los alcaldes que están en proceso de elección piden sacar a los militares a la calle”.

Asimismo acusó una “serie de mentiras” en el contexto del estallido, acusando a personeros del Partido Comunista, quienes “dijeron que en en la estación Baquedano nosotros torturamos (...) a mi me mandan allá a proteger la estación y fue un día terrible, los tipos querían entrar a toda costa y yo tenía 30 carabineros contra 30 mil tipos”.

Crespo señaló que “nosotros nos sacamos la cresta (en el estallido) y luego la Justicia nos persiguió. El carabinero le tiene miedo a la Justicia, porque saben que si llegan a enfrentarse a un delincuente, y si es justo el delincuente es menor de edad, o el arma era de mentira y el carabinero le dispara, viene el INDH y el Consejo de Defensa del Estado”, remató.