Evo Morales desafió este domingo al presidente Luis Arce, ambos del Movimiento al Socialismo (MAS), a someterse a las elecciones primarias cerradas para que así se defina quién será el candidato del partido para las presidenciales de 2025, en medio de las crecientes tensiones en el bloque oficialista.
“Nos sometamos a los militantes inscritos legalmente ante el Tribunal Supremo Electoral (TSE) y el pueblo que decida quién es su candidato: Evo, Arce u otra candidatura”, dijo el ex presidente de Bolivia (2006-2019) en su programa dominical en la emisora cocalera Kawsachun Coca.
Morales pidió “evitar cualquier problema” en el MAS y “buscar la unidad” de la organización sin que a la interna de ese partido existan pugnas entre “evistas” o “arcistas”, como se conoce a los seguidores del ex gobernante y del actual jefe de Estado boliviano.
“Si el Lucho (Arce) gana tengo que hacer campaña por el Lucho. Si yo gano el Lucho hace campaña por mí. Eso es hablar de unidad, estoy dispuesto porque aquí somos orgánicos, por eso desafío (a Arce) nos sometamos a internas”, remarcó.
Esta semana el MAS cumplió 29 años de su creación en medio de la división interna que arrastra el partido oficialista desde hace dos años.
Arce encabezó el jueves pasado una movilización en La Paz para conmemorar la creación del MAS, sin la presencia de Morales; mientras que este último hizo lo mismo este sábado en la población de Yapacaní, en el departamento de Santa Cruz, entre críticas al Gobierno.
Hace unos días, en una entrevista con la agencia EFE, Morales advirtió que habrá “una convulsión” en Bolivia en caso de quedar inhabilitado para las elecciones de 2025, aunque insistió en que constitucionalmente tiene abierta esa posibilidad.
Por su parte, en un acto en el municipio de Valle Grande la víspera, Arce dijo que “el pueblo no va a permitir que ningún interés individual se ponga por encima del bienestar de la patria” y que Bolivia “no va a tolerar las amenazas de los nuevos golpistas que quieren hacerse del poder por las buenas o por las malas”.
A finales del año pasado, el Tribunal Constitucional emitió una resolución en la que señala que la reelección indefinida en Bolivia no es un derecho humano y que esta se aplica por “única vez” de forma continua o discontinua, por lo que afecta a Morales que gobernó el país en tres ocasiones entre 2006 y 2019.
Sin embargo, Morales considera que está habilitado ya que la resolución no hace referencia a su situación sino que el Constitucional hizo una consideración en el marco de otro caso.
Otro aspecto que confronta al MAS es la realización de un nuevo congreso partidario para la elección de una nueva directiva.
El Órgano Electoral conminó esta semana al MAS para que al término de 25 días, en “consenso”, llame a un congreso que elija a una nueva directiva, algo que es un requisito para la participación del partido en las próximas elecciones.
El bloque “evista” defiende el congreso que se desarrolló el año pasado, en donde se reeligió a Morales como líder del partido y se le proclamó “candidato único” en 2025, mientras que los sectores sociales “arcistas” llamaron a una asamblea para principios de mayo.
Las tensiones entre Morales y Arce comenzaron a finales de 2021, mientras que el último tiempo los seguidores de ambos líderes los han proclamado como candidatos para las presidenciales de 2025.
(Con información de EFE)