Tras una audiencia de 15 horas, los testimonios de los testigos protegidos del caso Metástasis detallaron la corrupción arraigada en el sistema de justicia y la infiltración del crimen organizado en las instituciones. Después de las declaraciones de los acusados Marcelo Lasso, cercano al narcotraficante Leandro Norero, y de Mayra Salazar, la exrelacionista pública de la Corte Provincial del Guayas, intervino Helive Ángulo, encargado de la administración de los bienes de Norero.
En su intervención, Helive Ángulo se refirió a los vínculos que Norero tenía con la política. Explicó que había una relación entre el capo y el entonces alcalde Agustín Intriago, que fue asesinado en julio de 2023. Angulo contó que Intriago le relató que se había reunido con un asesor de Fernando Villavicencio, entonces legislador que denunciaba actos de corrupción. Intriago le había dicho a Angulo que el asesor pedía USD 300.000 en efectivo y USD 100.000 mensuales para no seguir publicando noticias en contra de Leandro Norero: “No me consta ni tampoco fui testigo de dicha conversación, solamente él (Intriago) me indicó aquello”.
Ángulo pasó el mensaje a Norero, que a su vez conversó con Xavier Jordán, otro procesado y prófugo. El capo le dijo a Ángulo que no pagaría nada a cambio de que se dejara de publicar en su contra: “Más bien voy a tratar de generar una relación política ya que Xavier Jordán maneja a un asambleísta, el mismo que responde a los nombres de Ronny Aleaga, al que nosotros identificábamos todo el tiempo como “El Ruso””, dijo el testigo protegido.
La relación entre Jordán y Aleaga quedó al descubierto cuando Fernando Villavicencio publicó una fotografía donde ambos procesados estaban en la misma piscina en Miami. A esa imagen se la conoce como la “foto de los tetones”. Cuando Villavicencio la reveló, Aleaga pidió que el político fuera sancionado.
De acuerdo con el testimonio, Jordán le transmitía a Norero todo lo que conversaba con Aleaga, el exasambleísta correísta, vinculado al caso y prófugo. A Norero le daba gusto que “se desacreditara la información que el señor Fernando Villavicencio entregaba, que en su gran mayoría era cierta”, dijo Ángulo. Para que Aleaga, uno de los más fuertes detractores de Villavicencio en el Legislativo, continuara con su campaña de desprestigo en contra de Villavicencio, Norero y Jordán lo “financiaban en efectivo, con el fin de que tuviera los elementos para poder llevar a cabo dichas diligencias”.
Ángulo era uno de los hombres de confianza de Norero, por lo que realizaba diligencias del capo como la entrega de dinero a sus socios. En ese contexto, el ahora testigo protegido relató que entregó a Ronny Aleaga USD 20.000 en Quito para que continuara con las labores políticas que beneficiaban al narco: “En ese tiempo estaban en la campaña del Sí y del No. Entonces, Norero tenía bastante miedo del tema de la extradición”.
Guillermo Lasso, expresidente de Ecuador, impulsaba una consulta popular donde una de las preguntas se refería a la extradición de ecuatorianos desde su país de origen. Lasso perdió arrolladoramente en febrero de 2023. Uno de los partidos que hizo campaña por el No fue el del expresidente Rafael Correa, al que pertenecía Aleaga.
Ante el testimonio de Ángulo, los militantes correístas e incluso el expresidente Correa han emitido comentarios diciendo que Norero no pudo financiar la campaña del No porque ya había sido asesinado. La periodista de investigación, Sara Ortiz, recordó que “el 21 de julio de 2022, Ronny Aleaga ya hacía campaña por el No en la Consulta Popular. Leandro Norero llevaba 57 días preso. Fue asesinado el 3 de octubre de 2022″. Además, la consulta y sus temas ya se discutían antes de que se enviaran las preguntas a la Corte Constitucional, en septiembre de 2022, y de que se la convocará, en noviembre de ese año.
El testigo protegido también contó que Ronny Aleaga engañó a Norero, pues le prometió que sobornaría a la fiscal general Diana Salazar a cambio de favores judiciales para el narco. Para ello, contó Ángulo, Aleaga le pidió a Norero un auto de alta gama para entregárselo a la fiscal Salazar. Norero cumplió pero no veía que sus causas avanzaban y empezó a sospechar que algo sucedía. Entonces, envió a sus emisarios a espiar a Aleaga y se enteró que era él quien ocupaba el vehículo y que jamás pactó con Salazar.
Luego de enterarse del engaño de Aleaga, Jordán tuvo que intervenir ante Norero y le pidió que “perdone al Ruso, que fue error de buena fe”. Ángulo relata que luego de ese episodio, Norero le dijo que ya no confía en los políticos.